Xabier Agirre plante¨® sin ¨¦xito una lista de integraci¨®n para aspirar al ABB
El recelo de los cr¨ªticos y el deseo de Gerenabarrena de repetir frustraron la opci¨®n
El ex diputado general de ?lava Xabier Agirre transmiti¨®, a quienes le sondearon sobre su predisposici¨®n a hacerse cargo del partido en el territorio, que aceptar¨ªa ser candidato, pero con una lista de integraci¨®n para su ejecutiva. Es decir, sin entrar en confrontaci¨®n, e instituy¨¦ndose en nexo de uni¨®n de dos sectores ya definidos y preparados sin disimulos para la batalla. Esa condici¨®n suya, que no cuaj¨®, hizo incluso temer por la renovaci¨®n del PNV en el territorio donde m¨¢s da?ado est¨¢.
Pese al alejamiento de Agirre del presidente del Araba Buru Batzar (ABB), I?aki Gerenabarrena, a ra¨ªz de los esc¨¢ndalos iniciados con la detenci¨®n, entre otros, de su diputado foral Alfredo de Miguel, pes¨® en ¨¦l un rechazo a la pelea. Agirre dej¨® as¨ª manifiesta una significativa reticencia de partida a entrar en la confrontaci¨®n abierta, lo que parece indicar que el desenlace de ve a¨²n como incierto en ambas partes.
Las reticencias de los cr¨ªticos, que tem¨ªan un enjuague a trav¨¦s del cual Gerenabarrena siguiera influyendo en la organizaci¨®n, y la determinaci¨®n del actal presidente de dar la batalla por repetir en el cargo, arrumbaron el intento. Agirre tendr¨¢ as¨ª que ser candidato para librar una batalla total con quien coincidi¨® en posiciones soberanistas en el pasado. As¨ª, se manejar¨ªan tres opciones: aceptar la condici¨®n de Agirre; convencerle de renunciar a ella, o buscarse otro candidato que encabezara una lista homog¨¦nea, desde la que disputar el gobierno del partido con claridad a su actual jefe de filas. El propio Gerenabarrena despej¨® inc¨®gnitas, al hacer saber que se presentar¨ªa y que tampoco quiere parches, que solo juega a ganar o perder.
Los cr¨ªticos a la actual ejecutiva est¨¢n movilizados para la renovaci¨®n
En su paso adelante, adem¨¢s, ha recibido el apoyo de un significativo grupo de 66 destacados afiliados del PNV alav¨¦s, repartidos entre cargos institucionales y org¨¢nicos, que coinciden en reclamar la continuidad de Gerenabarrena al frente de la territorial hasta 2016. En una carta publicada por dos diarios alaveses, este grupo de jeltzales entienden que el actual presidente del ABB es quien mejor puede encarar los dos principales retos que, a su juicio, tiene Euskadi y que se centran en el final de ETA y en la crisis.
Entre los apoyos cabe consignarse el de Emilio Olabarria, el ¨²nico diputado del PNV en este territorio, adem¨¢s de tres parlamentarios (Mikel Mart¨ªnez, Nerea Antia y Garbi?e Saez), as¨ª como de exmiembros del ¨²ltimo gobierno foral de Agirre y alcaldes. Esta irrupci¨®n puede interpretarse como un claro golpe a las aspiraciones del EBB, que siempre ha visto con buenos ojos el relevo de Gerenabarrena.
Indudablemente este posicionamiento complica m¨¢s a¨²n las aspiraciones de los cr¨ªticos, que en todo caso no daban la batalla por ganada. De hecho, entre algunos de los fieles a Gerenabarrena se empezaba a admitir que el futuro pasaba por un cambio total.
A pesar de este espaldarazo a Gerenabarrena, sus detractores mantienen el prop¨®sito de plantar cara en el proceso de renovaci¨®n interna que ya se ha iniciado en las juntas municipales con la propuesta de candidatos en la primera vuelta. De hecho, este movimiento cr¨ªtico al actual presidente del Araba Buru Batzar est¨¢ ya organizado y movilizado.
Tambi¨¦n ha demostrado ya su viabilidad como alternativa, al ganarle a Gerenabarrena la batalla de los dos candidatos al EBB. Pilar Garc¨ªa de Salazar y Gonzalo Sa¨¦nz de Samaniego derrotaron a los candidatos de Gerenabarrena, incluso a pesar de los refuerzos que le prest¨® desde Gipuzkoa Joseba Egibar. Pero, aunque ese sea un indicio y un apreciable punto de partida, las cosas no est¨¢n decantadas de cara a la renovaci¨®n de la presidencia y de la ejecutiva del territorio, y el peso del aparato es siempre, y en todos los partidos, significativo. De hecho, mientras Gerenabarrena debat¨ªa en silencio la actual situaci¨®n, sus m¨¢s pr¨®ximos advirtieron de que no se deb¨ªa relacionar las elecciones al EBB con las correspondientes al ABB porque, precisaron, ¡°responden a motivaciones diferentes entre s¨ª¡±.
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