El invierno congela los recortes sanitarios
El hospital Josep Trueta de Girona reabre una planta para paliar el colapso en urgencias La falta de camillas obliga a las ambulancias a esperar varias horas
El colapso en el servicio de urgencias del hospital Josep Trueta de Girona oblig¨® ayer al centro a abrir a toda prisa una de las plantas que los recortes obligaron a cerrar el pasado mes de junio. ¡°?Esto est¨¢ fatal!¡±, avisaba una enfermera a un compa?ero que iba a entrar en el turno de la ma?ana. ¡°Estamos intentando que no nos salgan los pacientes por la puerta¡±, trat¨® de bromear mientras una veintena de enfermos atendidos en urgencias esperaban a que quedara alguna cama libre en el hospital.
En esos mismos instantes, con la planta 7A del centro cerrada, en los pasillos de urgencias el ir y venir era constante: al menos 14 enfermos se agolpaban en camillas a ambos lados del pasillo, seg¨²n pudo comprobar este peri¨®dico. Como parte del plan de ahorro y recortes impuesto por el Departamento de Salud, la gerencia del centro cerr¨® tres plantas en junio que se abrir¨ªan a partir de septiembre ¡°seg¨²n las necesidades asistenciales¡±.
La llegada del fr¨ªo, con temperaturas bajo cero la mayor¨ªa de las noches en las ¨²ltimas semanas, ha llevado al l¨ªmite la capacidad de las urgencias. La sobreocupaci¨®n obliga a veces a las ambulancias a esperar fuera hasta que se encuentre una camilla libre para el enfermo, ya que este es ingresado con la que lleva el propio veh¨ªculo. A mediod¨ªa de ayer hab¨ªa dos ambulancias inmovilizadas, lo que supone que los trabajadores no pueden atender las llamadas urgentes o traslados de su ¨¢rea asignada. Un empleado del Servicio de Emergencias M¨¦dicas (SEM) explic¨® que el martes estuvo cinco horas esperando a las puertas del hospital a que le devolvieran la camilla.
Junto a los enfermos, los m¨¦dicos y las enfermeras, los trabajadores del SEM tambi¨¦n pululan por los pasillos de urgencias.
¡°?Qu¨¦ intimidad puede tener un paciente en estas circunstancias?¡±
¡°?Qu¨¦ intimidad puede tener un paciente en estas circunstancias?¡±, se queja una trabajadora. ¡°Esto es un atropello para los enfermos y para los profesionales¡±, denuncia. Las personas que visitan a sus familiares no se pueden quedar el tiempo deseado para no obstaculizar el funcionamiento del servicio. La ola de fr¨ªo siberiano no ha ayudado a aliviar la tensi¨®n. El personal ha llegado a ir a trabajar con forros polares y leotardos para protegerse de las corrientes de aire, mientras los enfermos dormitaban cubiertos por varias mantas. ¡°Se quejan, te piden que los cambies de sitio, pero no hay donde ponerlos¡±, explica una trabajadora.
El Departamento de Salud impuso al hospital Josep Trueta un recorte del 10% del total de presupuesto (16 millones de euros), que el centro deb¨ªa aplicar entre abril y diciembre del a?o pasado. La gerencia no lo ha tenido f¨¢cil para pasar la tijera: a finales de septiembre solo se hab¨ªa reducido el 6%, seg¨²n la direcci¨®n. Como parte del plan de ajuste, el centro decidi¨® no reabrir en septiembre tres plantas que se cerraron en verano. Esas camas se podr¨ªan volver a utilizar ¡°en funci¨®n de las necesidades asistenciales¡±, prometieron los responsables del hospital. Una de las plantas, destinada a los pacientes de medicina interna, se abri¨® en octubre. ¡°Las otras dos se han abierto intermitentemente¡±, asegura una portavoz del hospital.
¡°Entra dentro de la normalidad gestionar las camas en funci¨®n de las necesidades¡±, a?ade esta misma portavoz, que recalca que el centro est¨¢ preparado para trabajar con esta flexibilidad. El hospital considera que estos d¨ªas se est¨¢ produciendo ¡°un pico de actividad¡± que ¡°no se puede predecir¡± y que solo se produce de forma espor¨¢dica.
Trabajadores del Josep Trueta denuncian que el colapso en urgencias era evitable
Los sindicatos avisaron en septiembre de los riesgos que entra?a no reabrir a las puertas del invierno las camas cerradas durante el verano, cuando la actividad asistencial es menor. ¡°Dijimos en todas las reuniones que hab¨ªa que prevenir y tenerlas abiertas cuando llegase el fr¨ªo¡±, afirma Maria ?ngels Rodr¨ªguez, presidenta de la junta de personal por Comisiones Obreras. El centro decidi¨® ayer mismo abrir 14 camas de las 28 que existen en la s¨¦ptima planta y as¨ª se lo comunic¨® a los familiares de los pacientes. ¡°Nos han dicho que a las tres abren una planta y que trasladar¨¢n all¨ª a mi padre¡±, explic¨® un chico que prefiri¨® no dar su nombre. ¡°Esto est¨¢ colapsado¡±, apostill¨®.
La presidenta de la junta de personal cree que esa decisi¨®n se pod¨ªa haber tomado antes porque el servicio de urgencias lleva d¨ªas al l¨ªmite y, al contrario que el hospital, cree que la situaci¨®n ¡°era previsible¡±.
Los sindicatos lamentan que el plan para ampliar las urgencias del Josep Trueta, hospital de referencia para unas 150.000 personas, quedase aparcado tras los recortes anunciados por Salud. ¡°Las urgencias del hospital son muy peque?as para atender a tanta gente¡±, concluye Rodr¨ªguez.
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