Activista por libre
El portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, arrestado esta semana, no se casa con nadie
Chema Ruiz es un activista resbaladizo. No se casa nadie y se casa con todos. A su bola. Y gracias a su independencia se ha convertido en el punto en el que todos confluyen. Es portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid, ayuda a los desalojados por las oficinas p¨²blicas de la vivienda (IVIMA y EMV), se ha ganado a los miembros de la Oficina de la Vivienda del 15-M y estuvo en el origen de Democracia Real Ya. En cuesti¨®n de un a?o, ya es un activista clave en la vida madrile?a.
?Tambi¨¦n es omnipresente. Desde que se entreg¨® a la causa de las familias que est¨¢n perdiendo sus casas ha asistido a m¨¢s de una veintena de desahucios. Pero su entrega le he costado cara: en noviembre, harto de que se pidiera horas libres en el trabajo ¡ªera comercial de una multinacional de sistemas de aislamiento para la construcci¨®n¡ª su jefe le despidi¨®. Desde entonces, est¨¢ en el paro. Noviembre fue un mal mes. El d¨ªa 9, mientras intentaba evitar el desalojo de Estrella, una vecina de Hortaleza con dos hijos menores, fue detenido. Recordar el episodio le incomoda. Su padre, un transportista jubilado, le acompa?aba ese d¨ªa y sufri¨® al ver que se llevaban a su hijo.
Ruiz est¨¢ acusado de desobediencia y atentado contra la autoridad. El martes fue a prestar declaraci¨®n a los juzgados con traje de chaqueta y bien afeitado. Una treintena de personas le acompa?aron al canto de ¡°Si tocan a Chema, nos tocan a todos¡±. Afectados, activistas de distinta procedencia y sus padres, su hermana y sus primos. ¡°Mi hermano se cree su lucha¡±, dice Roc¨ªo. ¡°Le viene de familia, porque mis padres y mis abuelos han sido rojos y sindicalistas, pero yo no. Mi hermano es ¨²nico¡±.
Chema tiene 38 a?os, aunque aparenta m¨¢s. ¡°Los sufrimientos, la gen¨¦tica¡¡±, se encoge de hombros. ¡°Era el ni?o m¨¢s salao del mundo, sacaba sobresaliente sin mirar los libros¡±, dice su padre, con el que comparte adoraci¨®n mutua. Ruiz empez¨® a militar en el Partido Comunista a los 18 a?os. A los 21, fue concejal por Izquierda Unida de su pueblo, Torres de la Alameda. ¡°Pero dimit¨ª a los seis meses, a nadie le importaba el pueblo¡±. Dej¨® el partido (¡°siguen los mismos, acert¨¦¡±). No hab¨ªa vuelto a militar, hasta que hace tres meses se afili¨® al PC de Alcal¨¢, ¡°el ¨²nico que no pertenece a IU¡±.
Chema Ruiz
Chema Ruiz naci¨® en Torres de la Alameda (Madrid) hace 38 a?os. Era promotor inmobiliario, se arruin¨®, el banco embarg¨® el piso y desde junio es portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, a cuya causa se ha entregado. Tanto, que le ha costado el despido como comercial de una multinacional. Desde octubre est¨¢ en el paro.
Aunque no se presenta como un afectado por las hipotecas, Ruiz tiene su propia historia en esta crisis. Regentaba una inmobiliaria en su pueblo junto a su mujer, una prima y la pareja de esta. Pero entonces lleg¨® ¡°el golpe¡±. ¡°En cuesti¨®n de meses pas¨® de venderse todo a no venderse nada¡±, cuenta. Para sortear el temporal, hipotec¨® su casa. Y ah¨ª empezaron sus aut¨¦nticos problemas. La vivienda es ya del banco, a quien todav¨ªa debe la friolera de 380.000 euros. ¡°Mi caso no ha pasado por la PAH porque yo sab¨ªa perfectamente lo que hac¨ªa¡±, dice. Asume que le espera una vida marcada por las deudas. Ni su m¨®vil ni el de su mujer est¨¢n a su nombre. Ella tiene parte del sueldo embargado. Y ¨¦l, que cobra 1.154 euros de paro, sabe que es posible que le suceda pronto: ¡°Hay que asimilarlo¡±.
Ruiz, su mujer y su hija de ocho a?os se han mudado a casa de Roc¨ªo, que vive en una casa de dos plantas y les ha dejado la de abajo. ¡°Donde yo est¨¦, mi hermano va conmigo¡±. Ruiz compagina estos d¨ªas su activismo con la b¨²squeda de empleo. ¡°He echado 200 curr¨ªculums, s¨®lo me han ofrecido 600 euros por trabajar de pe¨®n, indigno. Como para no ser activista¡±. ¡°En cuanto la PAH avance un poco, me paso a ayudar a los parados precarios¡±, dice. ¡°Si todos nos convirti¨¦ramos en activistas sociales se solucionar¨ªan muchas cosas. Me preocupa ver que nos vamos al precipicio y la gente no despierta¡±.
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