Colmillos de elefante en casa de Dorribo y m¨¢s de 230 coches en cinco a?os

La familia de Jorge Dorribo y sus m¨²ltiples sociedades adquirieron m¨¢s de 230 coches a lo largo de cinco a?os, seg¨²n recoge el sumario del caso Campe¨®n, cuyo secreto fue levantado ayer por la titular del juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de Lugo, Estela San Jos¨¦.

En el escrito se recoge la petici¨®n del juzgado para que la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico identificara los coches que estaban a nombre del empresario Jorge Dorribo, su mujer, Aveline Fern¨¢ndez, y sus tres hijos, Juan, Laura y Anthea, as¨ª como de su firma matriz laboratorios Nupel desde el a?o 2005 hasta el a?o 2011. A partir de esta petici¨®n comienza a trascender un listado interminable de coches de alta gama de casi todas las marcas que hay en el mercado: Porsche, Mercedes, BMW, Ferrari, Bentley, Chrysler, Audi, Rover o Mitsubishi.

Pero no eran los ¨²nicos lujos en los que viv¨ªa la familia. El 21 de junio del 2011, la Agencia Tributaria aport¨® al sumario del caso un dossier con las fotos de todos los objetos decorativos que se encontraron en el domicilio de Jorge Dorribo, en la urbanizaci¨®n Santa Mari?a de O Cargo en Lugo, durante la inspecci¨®n que hizo el organismo, cuyo valor estima en m¨¢s de medio mill¨®n de euros.

A lo largo de m¨¢s de 40 p¨¢ginas se pueden ver im¨¢genes de colmillos de elefante de marfil por valor de 35.000 euros, vitrinas de navajas antiguas con un precio estimado en 15.000 euros, figuras de danzarina de marfil y bronce de 18.000 euros o escopetas con incrustaciones en plata del siglo XIX que cuestan m¨¢s de 4.500. Tambi¨¦n se encontraron grandes muebles como c¨®modas de m¨¢rmol de 12.000 euros, l¨¢mparas de tipo ¡°holand¨¦s¡± dorada de 15.000 o un conjunto de siete butacones dorados valorados en 16.000 euros.

Importaciones cubanas

Dorribo siempre tuvo predilecci¨®n por los objetos lujosos y las antig¨¹edades. A trav¨¦s de su amigo el expresidente de la Diputaci¨®n de Lugo Francisco Cacharro logr¨® sus primeros relaciones sustanciosas en la Xunta y a trav¨¦s de Manuel Fraga, que entonces viv¨ªa una luna de miel con Fidel Castro, arrib¨® a Cuba con sus medicamentos. En la sanidad de la isla encontr¨® un nicho de mercado y adem¨¢s descubri¨® otro negocio: la importaci¨®n de antig¨¹edades. Con ese fin cre¨® una firma para traer a Espa?a muebles.

Otros de los objetos que se encontraron en su casa provienen de los m¨²ltiples viajes que realiz¨® a Asia, ?frica y Latinoam¨¦rica a lo largo de su carrera, ya que siempre negociaba personalmente sus negocios.