Euskadi define el futuro de su pasado

Las iniciativas en materia de memoria que consens¨²an los grupos parlamentarios deben alumbrar la respuesta a una pregunta muy extendida: c¨®mo se contar¨¢ el pasado de Euskadi. Sobre qu¨¦ principios y valores, con qu¨¦ pol¨ªticas p¨²blicas y a trav¨¦s de qu¨¦ instrumentos.

Dos de estos instrumentos, los principales, est¨¢n en estudio avanzado y ser¨¢n determinantes: el Instituto de la Memoria y la Convivencia (IMC), en denominaci¨®n del lehendakari en su ¨²ltima comparecencia parlamentaria, por un lado, y el Memorial de las V¨ªctimas del Terrorismo (MVT), en hallazgo terminol¨®gico m¨¢s solemne que el de Centro por la Memoria que la Ley de V¨ªctimas de 2011 determin¨® crear y ubicar en Euskadi.

El primero, un organismo p¨²blico con participaci¨®n del Gobierno, el Parlamento, Eudel, Diputaciones y una representaci¨®n del movimiento asociativo, ser¨¢ realidad en tres meses, comprometi¨® L¨®pez. El segundo quedar¨¢ definido casi a la vez, en julio como m¨¢ximo, seg¨²n comprometieron en un protocolo el Ministro de Interior, Jorge Fern¨¢ndez, y el consejero Rodolfo Ares. Pero tardar¨¢ m¨¢s en ponerse en marcha y no est¨¢ claro qui¨¦n lo desarrollar¨¢. La edificaci¨®n o acondicionamiento de su sede, y el montaje de la gran exposici¨®n permanente sobre la que previsiblemente pivotar¨¢, llevar¨¢n su tiempo.

El departamento de Interior tiene desde finales del a?o pasado el proyecto realizado por el equipo que eligi¨® ¡ªGalo Bilbao, Daniel Innerarity, Iratxe Momoitio, Jos¨¦ Antonio P¨¦rez y Jos¨¦ Ram¨®n Recalde¡ª y que coordin¨® el especialista catal¨¢n Ricard Vinyes. En la ¨²ltima fase estuvo representado el Consejo vasco de Participaci¨®n de las V¨ªctimas del Terrorismo. El estudio, titulado justamente C¨®mo ser¨¢ el pasado, se centr¨® sobre todo en proyectar el Instituto de la Memoria ¡ªIdME¡ª para el que prev¨¦ ¡°una identidad indiscutible en el contexto internacional¡±, al no existir a¨²n ninguna instituci¨®n sobre el terrorismo pol¨ªtico.

El estudio otorga ¡°prioridad absoluta¡± a las v¨ªctimas de ETA y a su Memorial

El resultado final no coincidir¨¢ con lo que el informe aconseja, anuncian medios del Gobierno, tanto por razones de y consenso pol¨ªtico, como de dimensi¨®n y presupuesto, pero su coordinador, Ricard Vinyes, considera ya un ¨¦xito que existan la inquietud, intenci¨®n y voluntad que revela el encargo. ¡°Haber creado el equipo para un proyecto as¨ª y que haya una propuesta inicia ya un relato. El mero hecho de que haya consenso sobre la necesidad de memoria es un disparo a la l¨ªnea de flotaci¨®n de quienes no la quieren, los que dicen que la ¨²nica que se puede compartir es el dolor¡± se?al¨® a EL PA?S, en referencia a la posici¨®n de los terroristas y sus acompa?antes pol¨ªticos. La opci¨®n de las fuerzas pol¨ªticas vascas es la acertada: justo la contraria del error que Vinyes considera el olvido por el que se opt¨® sobre la represi¨®n de la dictadura franquista. Coincide Jes¨²s Loza, que es ya el Comisionado para la Convivencia. ¡°Tenemos esa experiencia y es un error que no podemos repetir con el terrorismo ahora¡±, se?al¨® el jueves en el curso de una entrevista. ¡°Vamos a ser los primeros en definir las pol¨ªticas de memoria incluso antes de la desaparici¨®n del fen¨®meno violento¡±, destac¨®.

El Instituto propuesto al Gobierno abarcar¨ªa los tres violentos del siglo XX: la guerra civil, la dictadura, y, prolong¨¢ndose hasta la actualidad, el terrorismo. Dado que este es el ¨²nico fen¨®meno violento a¨²n vivo, prioriza analizar ¡°c¨®mo funcion¨® su maquinaria del terror, qui¨¦nes fueron los perpetradores de la violencia, con qu¨¦ respaldos sociales contaron, que discursos alentaron o disculparon sus pr¨¢cticas y qu¨¦ respuestas recibieron estas de las instituciones democr¨¢ticas y los gobiernos que las dirig¨ªan¡±. M¨¢s a¨²n, habr¨¢ que ver tambi¨¦n ¡°el papel que esa violencia desempe?¨® y desempe?a en la configuraci¨®n pol¨ªtica e identitaria del Pa¨ªs Vasco actual¡±.

El estudio no es vinculante y en el Ejecutivo se perciben posturas de identificaci¨®n con ¨¦l y otras de distancia, a¨²n con respeto a su rigor. Fuentes oficiales se?alan que ha sido ¡°sobrepasado¡± por avances en el acuerdo pol¨ªtico y otros medios conocedores del texto apuntan que no coincide ¡°en su orientaci¨®n general¡± con la pol¨ªtica que quiere defender el Gobierno. Por ejemplo, porque ¡°mezcla cosas que no queremos mezclar¡±. Sin querer entrar en m¨¢s precisiones, a?adieron que Interior maneja tambi¨¦n otras experiencias e informes.

Pese al hermetismo, se puede pensar que el Gobierno tema por algunas afirmaciones que fuera de contexto podr¨ªan levantar pol¨¦mica. O a las referencias unidas a dictadura y terrorismo. O a que se abogue no por ¡°un relato com¨²n¡± sino por ¡°una polifon¨ªa de relatos¡±. Aunque se reserve la admisi¨®n solo a los que tengan ¡°intenci¨®n de verdad y de justicia¡±, lo que excluye trampas de los victimarios, es resbaladizo y dif¨ªcil de explicar.

Tampoco parece tener aceptaci¨®n la atribuci¨®n al Instituto de la Memoria de la misi¨®n de promover el Memorial de las V¨ªctimas, para el que los gobiernos central y vasco tienen ya su proceso previsto.

Sin tampoco querer precisar, para el consejero Ares el reto est¨¢ en cuidar, sobre todo, ¡°un camino, el del consenso en los avances para definir pol¨ªticas e instrumentos¡±. Curiosamente, esa misma recomendaci¨®n realiza el informe: subraya ¡°enf¨¢ticamente¡± la importancia de que la memoria ¡°est¨¦ arraigada en el consenso de las diferentes tradiciones pol¨ªticas¡±. Tambi¨¦n aconseja que sea ¡°incluyente¡±. ¡°Es el camino m¨¢s recto¡±, afirma, para que la sociedad la asuma ¡°con naturalidad y sin crispaci¨®n¡±. Y advierte que siempre quedar¨¢ ¡°alejada de la visi¨®n¡± y las ¡°teor¨ªas inaceptables¡± con las que ¡°los terroristas y sus c¨®mplices pretenden justificar los cr¨ªmenes m¨¢s execrables¡±.

De lo que se trata, sostiene el informe, es de ¡°honrar a aquella parte de la poblaci¨®n que, de distintas formas, y tanto contra el franquismo como contra ETA, constituy¨® la resistencia democr¨¢tica¡±; tambi¨¦n de convertir ¡°en patrimonio colectivo¡± la memoria ¡°dispersa o dislocada¡± de esos esfuerzos.