Rajoy se felicita por adelantado

¡°Por adelantado, muchas felicidades¡±. Este fue el colof¨®n pleno de confianza en la victoria que Mariano Rajoy puso a un mitin celebrado en C¨¢diz, repleto de cargos nacionales del PP que hoy asistir¨¢n a los actos de conmemoraci¨®n de la Constituci¨®n de 1812. El simbolismo de esta efem¨¦ride fue el hilo conductor de su apelaci¨®n repetitiva al cambio, el eslogan de la campa?a de Javier Arenas, que equipar¨® al que ya da por sentado que se va a consumar en Andaluc¨ªa. ¡°Entonces fue la apuesta que hizo una gente capaz, competente y patriota por el cambio, el mismo que ahora necesita Andaluc¨ªa para no quedarse atr¨¢s¡±, dijo.

Con un tono notablemente m¨¢s suave que hace una semana en M¨¢laga y Almer¨ªa ¡ªdonde irrumpi¨® con un duro discurso contra el PSOE por el caso de los ERE¡ª, el presidente del Gobierno pr¨¢cticamente celebr¨® el haber conseguido cerrar el c¨ªrculo de la ocupaci¨®n de casi todo el poder institucional de su partido en Espa?a, el broche final a la cosecha de triunfos electorales recogida desde mayo de 2011. Ni siquiera pronunci¨® la palabra ¡°abuso¡± ¡ªsin¨®nimo que emplea Arenas cuando no quiere meterse en la harina de los ERE¡ª y se ci?¨® al manual de viento fresco y de renovaci¨®n que traer¨¢ su partido a la ¨²nica comunidad aut¨®noma que nunca ha mudado de color pol¨ªtico desde que se instaur¨® la democracia.

Por primera vez en los que va de campa?a, un dirigente popular expuso a las claras que solo con la ayuda de Izquierda Unida ¡ªuna formaci¨®n a la que el candidato no suele referirse¡ª el PSOE tiene una posibilidad de seguir en la Junta. ¡°Lo que proponen PSOE e IU, porque es la suma de los dos la ¨²nica alternativa, es que todo se quede igual, exactamente lo contrario de lo que necesita Andaluc¨ªa¡±, proclam¨® Rajoy sin buscar un rodeo. Y apostill¨®: ¡°Lo dem¨¢s es ruido, chascarrillos y cosas para distraer¡±.

Igual que en la campa?a de las generales, el l¨ªder PP censur¨® a los socialistas estar en ¡°lo de siempre¡±: ¡°Intentan meterle el miedo en el cuerpo a la gente para siga lo mismo. Estos que han acreditado que no saben hacer pol¨ªticas de crecimiento econ¨®mico ni crear empleo¡±.

Para no estropear el dise?o de la campa?a de Arenas, que usa la ilusi¨®n como uno de sus pilares, Mariano Rajoy dedic¨® un profuso apartado de su intervenci¨®n a la esperanza, si bien no pudo resistirse a matizar que el camino para abandonar la crisis ser¨¢ largo y ¡°dif¨ªcil¡±. Tambi¨¦n hizo un gui?o al sentimiento y el orgullo andaluz y a la machacona idea del candidato de que en esta batalla electoral no se confrontan ideolog¨ªas, sino el inmovilismo y el futuro.

El andaluz ¡ªarropado tambi¨¦n por la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, y los ministros de Hacienda y Administraciones P¨²blicas y de Empleo y Seguridad Social, Crist¨®bal Montoro y F¨¢tima B¨¢?ez.¡ª tir¨® tambi¨¦n de Constituci¨®n de 1812. ¡°Si en 200 a?os ni siquiera el inmovilismo del viejo r¨¦gimen pudo acallar la corriente reformista de las Cortes de C¨¢diz, tampoco en Andaluc¨ªa el inmovilismo va a parar el viento de cambio¡±, exclam¨®. Luego reiter¨® sus llamadas a la concordia y el trabajo hasta el final.

Si por Arenas fuera, las elecciones se habr¨ªan celebrado ayer. Los datos que maneja indican que no hay nada que ganar y, por el contrario, cabe el riesgo de que estalle la fatalidad en un despiste. En una coyuntura de intensa zozobra econ¨®mica y con el Gobierno de Rajoy marchando a todo gas a golpe de severas medidas de ajuste, seis d¨ªas por delante son una eternidad, una aventura, un enorme espacio en blanco para que cualquier tropiezo o vaiv¨¦n altere el paseo triunfal de la caravana del candidato del PP hasta el Palacio de San Telmo.

Cada d¨ªa que pasa, Arenas adquiere m¨¢s trazas de presidente. Ha ganado en sobriedad, cautela y compostura. Quiere borrar de ra¨ªz el bald¨®n que le han colgado los socialistas de fr¨ªvolo gracioso al que no se le puede comprar ni una escoba, y se esfuerza en transmitir templanza, el vocer¨ªo mitinero se lo deja a sus segundos. De aqu¨ª al d¨ªa 25 lo que busca es que se imponga en el electorado la imagen de la responsabilidad.

Esa es la pauta que va a seguir, tambi¨¦n para exorcizar el resquemor que siempre ha provocado su partido en Andaluc¨ªa. En un acto por la ma?ana en Utrera (Sevilla), llam¨® tres veces al respeto y alert¨® sobre el peligro de ir de sobrado al conocerse nuevas encuestas que le sit¨²an sin discusi¨®n en la c¨²spide, entre ellas la de Metroscopia para EL PA?S, que le otorga el 47,3% de los votos y 59 esca?os, cuatro m¨¢s de los necesarios para la mayor¨ªa absoluta: ¡°Optimismo e ilusi¨®n, s¨ª; pero ni un gramo de euforia ni medio de confianza¡±, dijo y alert¨® a los suyos de la fortaleza del PSOE en Andaluc¨ªa, un arraigo que no se debe nunca ¡°menospreciar¡±.

Una reflexi¨®n que casa poco con la felicitaci¨®n por adelantado de Rajoy, quien agradeci¨® a los andaluces la contribuci¨®n a su llegada a la Moncloa y asegur¨®: ¡°Nos os dejar¨¦ en la estacada¡±.