¡°Cuando me enter¨¦ de que me hab¨ªan vendido busqu¨¦ la forma de escapar¡±

Que la mafia del tr¨¢fico de mujeres en Galicia es una y son muchas al mismo tiempo qued¨® de nuevo demostrado ayer en un juicio celebrado en la Audiencia de Pontevedra, que sent¨® por primera vez en el banquillo a Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Ad¨¢n, principal imputado de la trama Carioca de Lugo, actualmente en prisi¨®n provisional, y a Manuel Manteiga Rodr¨ªguez, alias 'El Incre¨ªble', veterano del negocio del alterne, detenido en A Coru?a por un caso de blanqueo hace menos de dos meses y que ya hab¨ªa sido condenado a 34 a?os de c¨¢rcel por delitos relacionados con la prostituci¨®n. En aquella ocasi¨®n, finalmente, Manteiga logr¨® la absoluci¨®n del Supremo, que apreci¨® un fallo de la fiscal¨ªa, y esta vez se beneficiar¨¢ del tiempo transcurrido entre la denuncia de los hechos, en el a?o 2001, y la celebraci¨®n del juicio. En la vista de ayer, en la que testificaron tres mujeres, una de ellas, la denunciante, reaparecida in extremis en febrero tras pasar cinco a?os sin dar se?ales de vida, el fiscal redujo de 10 a cuatro a?os la pena que solicita para cada uno de los siete acusados porque ¡°las dilaciones indebidas no fueron causadas por ellos¡±.

Seg¨²n las testigos, la red juzgada en esta ocasi¨®n repet¨ªa el esquema habitual (trata de mujeres, amenazas, explotaci¨®n en los clubes sin remuneraci¨®n a cambio, retenci¨®n ilegal hasta el total pago de la deuda) y supuestamente sirvi¨® de entrenamiento a un joven Garc¨ªa Ad¨¢n, el dur¨ªsimo encargado del club Queens de O Ceao que se describe en el sumario Carioca, antes de aliarse con polic¨ªas y guardias civiles corruptos y urdir la trama lucense. La mujer que se atrevi¨® a denunciar consigui¨® burlar a los proxenetas con un enga?o tras saber que hab¨ªa sido vendida. Despu¨¦s de siete intentos de juicio y tras la inesperada aparici¨®n de 'Cristina' (nombre ficticio elegido por la principal testigo para proteger su identidad) y su declaraci¨®n de ayer por videoconferencia, la causa qued¨® vista para sentencia. El veredicto de la sala segunda de la Audiencia Provincial se conocer¨¢ el martes que viene.

En su regreso a la causa que juzga Jos¨¦ Juan Barreiro, Cristina, de nacionalidad colombiana, explic¨® que aterriz¨® en Alvedro en 2000, despu¨¦s de ser captada all¨¢ por la hermana de la acusada Ana Milena G¨®mez Reyes, eslab¨®n con los clubes y supuesta encargada de los movimientos de las chicas en Galicia. Lejos de cumplir el contrato acordado en su pa¨ªs, que estipulaba que se repartir¨ªan las ganancias de su trabajo al 50% entre ella y sus jefes, seg¨²n la denunciante nunca le pagaron nada y para poder llamar a su familia (desde el tel¨¦fono p¨²blico que suele haber en los burdeles) ten¨ªa que mendigar monedas a sus clientes. Adem¨¢s, todas las puertas estaban cerradas y vigiladas, y solamente pod¨ªa salir ¡°a la peluquer¨ªa¡± acompa?ada por Milena G¨®mez.

En todos los prost¨ªbulos que recorri¨® en los meses que pasaron antes de huir y denunciar, recibi¨® ¡°amenazas¡±: ¡°Nos dec¨ªan que sab¨ªan d¨®nde viv¨ªan nuestras familias¡±, afirm¨® ayer que le dec¨ªan para disipar sus tentaciones de ¡°desaparecer¡±. Lo confirmaron las otras dos testigos, una mujer que trabaj¨® en algunos de estos locales y la vecina de Pontevedra que ayud¨® a esta ¨²ltima a fugarse, que asegur¨® que tuvo que ¡°cambiar de domicilio y de tel¨¦fono¡± porque Ad¨¢n le dijo que le ¡°iba a romper las piernas¡± y a dejarla ¡°en silla de ruedas¡± por denunciar los hechos a la Guardia Civil.

Una testigo asegur¨® que cambi¨® de casa porque la iban a dejar ¡°en silla de ruedas¡±

Cristina lleg¨® primero (llevada por Rodr¨ªguez Manteiga y Milena G¨®mez) al Oasis de Poio, supuestamente propiedad de El Incre¨ªble, del que entonces era el encargado precisamente Garc¨ªa Ad¨¢n. Luego, para seguir pagando su deuda, estipulada por la red en ¡°un mill¨®n de pesetas¡±, fue trasladada al club O'Pazo, de Lugo, aunque era obligada a trabajar en otros locales para saldar m¨¢s r¨¢pido la cuenta pendiente.

Al final, la acusada la dej¨® en el Keops de Ourense y pronto le anunciaron que hab¨ªa sido vendida. Ya no ten¨ªa deuda con los primeros, a los que, seg¨²n dijo ayer, lleg¨® a tener noticia de que hab¨ªa abonado 750.000 pesetas. Ahora la ten¨ªa con el nuevo club, con Manuel Antonio Ferreiro L¨®pez, 'El Gato' o 'El Mechas', como jefe, y Carlos Varela S¨¢nchez de encargado. Tambi¨¦n estos dos hombres se sentaron ayer en el banquillo. Los ¨²nicos que faltaban eran los que entonces eran responsables de O'Pazo, un imponente burdel de las afueras de Lugo, al norte de la ciudad, que acab¨® clausurado: Manuel Ulloa Manteiga, 'El Melenas', y Jos¨¦ Isolino Rico Chor¨¦n, 'El Pelao', permanecen desaparecidos desde que en 2004 fueron condenados a 34 a?os de c¨¢rcel. Al ¨²nico que salv¨® el Supremo fue a aquel que hab¨ªa sido juzgado como tercer socio: El Incre¨ªble.

La ma?ana siguiente a la noche en que Cristina y otra compa?era supieron que hab¨ªan sido vendidas al club ourensano, decidieron fugarse. En la declaraci¨®n, realizada con ciertas dificultades y hondo temor de la mujer desde una localidad espa?ola (que no de Galicia) cuyo nombre se mantuvo en secreto, ella relat¨® la escena: ¡°Cuando me enter¨¦ de que me hab¨ªan vendido busqu¨¦ la forma de escapar. Le dijimos al encargado que nos hab¨ªa bajado la regla y necesit¨¢bamos compresas urgentemente. Se lo pens¨®, y luego orden¨® que nos dejaran salir¡±.