La censura sacude el teatro
Destituida la directora del Centro Dram¨¢tico por ceder un edificio p¨²blico para un acto reivindicativo de actores, mientras Santiago boicotea un espect¨¢culo de Leo Bassi
Dos cap¨ªtulos con argumento teatral y censura en el cierre sacudieron ayer el mundo de la escena. La directora del teatro p¨²blico, Blanca Cend¨¢n, fue destituida por Cultura, seg¨²n explic¨®, por ceder el Sal¨®n Teatro de Compostela para que la profesi¨®n festeje, el pr¨®ximo d¨ªa 27, el D¨ªa Mundial del Teatro. Los amantes de Leo Bassi, con un espect¨¢culo programado en Santiago que ya vend¨ªa entradas, se quedan sin ver al payaso, seg¨²n el ayuntamiento santiagu¨¦s, por ¡°criterios globales de reprogramaci¨®n¡±.
?¡°Me parece un ataque a la libertad¡±, censur¨® Cend¨¢n. A las justificaciones de la ya exdirectora del Centro Dram¨¢tico Galego (CDG), que improvis¨®, sola, una rueda de prensa en una cafeter¨ªa, respondi¨® Cultura. Sin aclarar el motivo del despido: ¡°No vamos a entrar a valorar de momento las causas que motivaron su destituci¨®n¡±, comunic¨® la Conseller¨ªa. ¡°Pero rechazamos rotundamente las razones esgrimidas por ella para justificar su despido¡±. En una escueta nota de prensa anuncia, adem¨¢s, que el CDG ¡°contar¨¢ con una nueva direcci¨®n para promover las artes esc¨¦nicas¡±.
¡°Si a la directora del Centro Dram¨¢tico la despiden por ceder el teatro a la gente del teatro, apaga y v¨¢monos¡±, insisti¨® Cend¨¢n, que retoma su trabajo de actriz con una sensaci¨®n de liberaci¨®n: ¡°Vuelvo a ser cabareteira¡±. Fue Juan Carlos Fasero, el responsable de la Axencia Galega das Industrias Culturais, quien le entreg¨® la carta de despido. Cuando Cend¨¢n le pregunt¨® por qu¨¦, Fasero contest¨®, seg¨²n ella, que el teatro p¨²blico ¡°no puede prestar instalaciones para un acto reivindicativo¡±. El gerente de Agadic, cuyo cese ya fue reclamado por el grueso de la profesi¨®n teatral al poco de su aterrizaje, tampoco dio explicaciones sobre la destituci¨®n de la directora del CDG.
Cend¨¢n: "Hay que luchar, los pol¨ªticos no pueden desmantelar la cultura"
En el limbo quedan, entre otras cosas, la programaci¨®n que Cend¨¢n present¨® p¨²blicamente, con seis meses de retraso, hace 15 d¨ªas ¡ªAs furias, montaje de Andr¨¦s Lima sobre obra del estadounidense Neil Labute ¡ª. ¡°Hablar¨¦ con Lima para decirle que, en principio, no se va a hacer¡±. La Conseller¨ªa no aclara si el CDG montar¨¢ producci¨®n propia este a?o, si bien anuncia que el teatro p¨²blico ¡°contar¨¢ con una nueva direcci¨®n para promover las artes esc¨¦nicas¡±. No dicen cu¨¢ndo. Teniendo en cuenta que el CDG vivi¨® un a?o descabezado entre la destituci¨®n de Cristina Dom¨ªnguez y la elecci¨®n por concurso p¨²blico de Cend¨¢n, la profesi¨®n no se hace ilusiones. Y endurece las cr¨ªticas ante el posible desmantelamiento, por abandono, del CDG. ¡°La actitud de Fasero es grav¨ªsima¡±, critic¨® Salvador del R¨ªo, de Escena Galega. ¡°Habr¨ªa que remontarse muy atr¨¢s para encontrar algo as¨ª¡±. M¨¢s sint¨¦tico fue Iv¨¢n Prado, de Pallasos en Rebeld¨ªa, intermediarios de Bassi en Galicia: ¡°Esto es una llamada de atenci¨®n para todos. Cuando hay censura, estamos en peligro¡±.
En la revisi¨®n apresurada de sus dos a?os al frente del CDG, que dieron de s¨ª la Salom¨¦ de Carlos Santiago y A ¨®pera dos tres re¨¢s, el mayor ¨¦xito de p¨²blico del teatro institucional, Cend¨¢n aprovech¨® para criticar las restricciones. El presupuesto se redujo m¨¢s de un 60% hasta los 400.000 euros de este a?o. Una producci¨®n de formato reducido como la prevista para este a?o, de siete actores, no cuesta menos de 250.000. ¡°?Qu¨¦ sentido tiene el CDG si no es capaz de hacer una producci¨®n al a?o?¡±. De momento, lo ¨²nico cerrado es la programaci¨®n del Sal¨®n Teatro hasta junio.
Cend¨¢n no ocult¨® sus simpat¨ªas por el exconselleiro Roberto Varela y su escasa sinton¨ªa con Fasero. Tambi¨¦n hizo un llamamiento a la profesi¨®n, con la que mantuvo una relaci¨®n no exenta de cr¨ªticas: ¡°Pido que est¨¦n conmigo. Si tienes dos centros de producci¨®n [en referencia al rebajado Centro Coreogr¨¢fico], hay que dotarlos m¨ªnimamente, no podemos dejar que los pol¨ªticos decidan los presupuestos de la cultura unilateralmente. Tenemos que luchar, no pueden desmantelar la cultura. El CDG lo hemos ido creando durante 25 a?os, y merecemos un respeto¡±.
Nadie duda en el oficio que el D¨ªa Internacional del Teatro ¡ª27 de marzo¡ª y la gala de los Mar¨ªa Casares ¡ª3 de abril¡ª ¡°deber¨ªan superar¡± los niveles de acidez de los noventa. Lo m¨¢s reivindicativo, este martes, ser¨¢ la presentaci¨®n de una plataforma esc¨¦nica que da cabida a todos los colectivos del sector. ¡°Estamos a la intemperie, as¨ª que lo haremos en la calle¡±, dice Del R¨ªo. ¡°No ten¨ªamos previsto reventar nada¡±, bromea Antonio Dur¨¢n, Morris, de la Asociaci¨®n de Actores. Las reivindicaciones ahora son m¨¢s. ¡°De todos modos¡±, a?ade, ¡°yo creo que, entre los desencuentros y la falta de presupuesto, aprovechan para plantear un cierre temporal del teatro p¨²blico agarr¨¢ndose a cualquier disculpa¡±. La cr¨ªtica del director y dramaturgo Quico Cadaval, Premio das Artes Esc¨¦nicas en 2011, es m¨¢s transversal: ¡°La mezcla entre lo p¨²blico y lo privado los conduce a estas confusiones innecesarias. A querer decir esta es mi finca¡±.
Bassi atribuye la censura a su espect¨¢culo a "presiones pol¨ªticas y eclesi¨¢sticas"
La confusi¨®n afecta tambi¨¦n a Leo Bassi, que no actuar¨¢ el pr¨®ximo 10 de abril, a pesar de lo previsto, en el Teatro Principal de Santiago. El acuerdo estaba cerrado y las entradas a la venta, pero hace 20 d¨ªas el Ayuntamiento cambi¨® de opini¨®n y cancel¨® la cita. En realidad, la actuaci¨®n no le costaba nada. Solo ced¨ªa el espacio y la taquilla. Lo que aduce ahora el gobierno local, ¡°criterios globales de reprogramaci¨®n¡±, no es lo que piensa el clown: ¡°El PP me censura porque ha recibido presiones pol¨ªticas y eclesi¨¢sticas. Es un escandaloso atentado contra la libertad de expresi¨®n¡±.
El ¡°exc¨¦ntrico humorista italiano¡±, como lo defin¨ªa todav¨ªa ayer el Ayuntamiento en su web de promoci¨®n tur¨ªstica, vincula lo sucedido con su pol¨¦mica aparici¨®n en la Universidad de Valladolid en octubre y la posterior querella de HazteOir.org y la Asociaci¨®n de Abogados Cristianos, archivada este mes por el Tribunal Supremo. ¡°Me acusaban, entre otras cosas, de haber dicho algo que sabe cualquier experto: que la catedral de Santiago es la continuaci¨®n de un culto dru¨ªdico m¨¢s antiguo¡±, explica. Los denunciantes consideraban, literalmente, que ¡°atacaba los dogmas m¨¢s importantes del cristianismo y del catolicismo, d¨¢ndolos por falsos¡±.
Leo Bassi parece sorprendido por el cambio de criterio. ¡°Como estoy preparando un nuevo espect¨¢culo para el a?o que viene¡±, explica desde Hamburgo, ¡°pens¨¦ en llevar a Galicia una antolog¨ªa de las cosas que he hecho en la ¨²ltima d¨¦cada. Se titula The best of Leo Bassi y es el menos cr¨ªtico de mis trabajos m¨¢s recientes, as¨ª que no lo entiendo. Acabo de llevarlo a Ourense con ¨¦xito y no ha pasado nada¡±. La gira inclu¨ªa una escala en A Coru?a, otra ciudad gobernada por el PP, blanco habitual del payaso italiano, promotor de www.ppleaks.com, un portal contra ¡°el partido de la corrupci¨®n y la mentira¡±. La funci¨®n, dice, tambi¨¦n se ha ca¨ªdo, pero ¡°el acuerdo era solo verbal¡± y prefiere ser prudente. En Santiago tiene ¡°constancia¡±, sin embargo, de que ha sido vetado. ¡°Son oscurantistas, no entienden la libertad de expresi¨®n ni la convivencia laica¡±.
Bassi no descarta ¡°eventuales acciones judiciales¡±, aunque quiere entrevistarse antes con el edil de Cultura. Advierte, en todo caso, de que actuar¨¢ en Santiago sea como sea: ¡°No me causa ning¨²n da?o econ¨®mico porque no recibo subvenciones, pero no voy a darles esa satisfacci¨®n¡±.
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