Madrid proh¨ªbe abrir bares en zonas ruidosas y sanciona m¨¢s el botell¨®n

La Junta de Gobierno local ha aprobado esta ma?ana la declaraci¨®n de zona de protecci¨®n ac¨²stica especial del distrito Centro, lo que lleva aparejada una serie de medidas para reducir el ruido provocado por los locales de ocio nocturno y por el tr¨¢fico en esa ¨¢rea, que por ahora no incluyen un adelanto en el horario de cierre de bares y discotecas. Adem¨¢s, la alcaldesa, Ana Botella, ha adelantado que la Comunidad de Madrid se ha mostrado dispuesta a cambiar la ley contra el botell¨®n para que las sanciones impuestas no puedan cancelarse mediante la realizaci¨®n de cursillos de concienciaci¨®n, un sistema que a su juicio ¡°no funciona¡±.

Para la elaboraci¨®n de la zona de protecci¨®n ac¨²stica se ha seguido el mismo procedimiento que en los bajos de Aurrer¨¢ (barrio de Arg¨¹elles), aunque las medidas adoptadas son mucho m¨¢s suaves, dado que la superficie es inmensamente superior y la actividad econ¨®mica de los locales de ocio resulta fundamental para la ciudad. Frente a las seis manzanas afectadas por el plan aprobado Arg¨¹elles en 2010, el distrito Centro ocupa 524 hect¨¢reas (con los barrios de Palacio, Embajadores, Cortes, Justicia, Universidad y Sol) y tiene 150.000 habitantes. Alberga adem¨¢s las principales zonas de copas de la ciudad: Chueca, Latina, Huertas y Malasa?a.

Para medir el ruido provocado por el tr¨¢fico en esta zona se ha usado el mapa elaborado en 2006; la algarab¨ªa del ocio nocturno se ha radiografiado en dos ocasiones para establecer zonas de intensidad alta, moderada y baja (ver mapa adjunto).

La ordenanza municipal aprobada hace un a?o proh¨ªbe superar entre las once de la noche a las siete de la ma?ana un l¨ªmite que oscila entre 45 decibelios en ¨¢rea residencial y 53 en una zona ¡°recreativa¡± y ¡°ruidosa¡±. ¡°En actos de especial proyecci¨®n¡± se puede ¡°modificar o suspender¡± la limitaci¨®n, como sucede durante el Orgullo Gay. As¨ª, se considera zona de contaminaci¨®n ac¨²stica alta aquella en la que se superan por 10 o m¨¢s decibelios estos l¨ªmites. Moderada si se rebasan por entre cinco y 10 decibelios. Baja cuando no se llega a cinco m¨¢s.

En las zonas de contaminaci¨®n ac¨²stica alta, el Ayuntamiento se ha reservado la potestad de adelantar el cierre de bares de copas y discotecas, una medida exigida por algunas asociaciones de vecinos y rechazada de plano por los hosteleros. ?Qu¨¦ significa eso? Que en principio los horarios no van a variar. Evidentemente el Gobierno local tiene el derecho a modificarlos cuando lo considere necesario, de forma que este anuncio s¨®lo sirve de hecho como llamada de atenci¨®n y aviso para navegantes.

No se permitir¨¢ abrir nuevos locales (salas de fiesta, caf¨¦s-espect¨¢culo, discotecas, salas de baile, bares de copas, cafeter¨ªas, restaurantes, tabernas, bares, etc¨¦tera). Adem¨¢s, solo se podr¨¢n cambiar licencias en vigor para adoptar actividades menos ruidosas (por ejemplo, pasando de discoteca a restaurante). Los establecimientos que cambien de actividad se ver¨¢n obligados a disponer de un n¨²mero de plazas exclusivas de aparcamiento igual al 27% del aforo en un radio m¨¢ximo de 200 metros.

En las zonas de contaminaci¨®n ac¨²stica moderada no se permitir¨¢ la apertura de salas de fiesta, discotecas o bares de copas. S¨ª se podr¨¢n abrir bares y restaurantes, pero a una distancia m¨ªnima establecida de otros ya existentes que a¨²n no ha sido hecha p¨²blica. Imperar¨¢n adem¨¢s las mismas restricciones sobre el cambio de licencias que en las zonas altas. En las zonas de contaminaci¨®n ac¨²stica baja, se podr¨¢n abrir nuevos locales de cualquier tipo, pero a una distancia m¨ªnima de otros ya existentes. Adem¨¢s, estos nuevos establecimientos deber¨¢n contar con un n¨²mero de plazas exclusivas de aparcamiento equivalente al 27% del aforo en un radio m¨¢ximo de 200 metros, o del 10% en caso de que su actividad sea sin m¨²sica (bares, restaurantes, etc¨¦tera).

Adem¨¢s, el Ayuntamiento ha prometido elaborar un plan de movilidad para el distrito Centro que ¡°permita adecuar el r¨¦gimen especial de carga y descarga, el control del estacionamiento en doble fila, y la peatonalizaci¨®n temporal o definitiva de determinadas calles¡±. Respecto a este ¨²ltimo punto (que tambi¨¦n aparece en el Plan de Calidad del Aire 2011-2015), la alcaldesa ha reconocido que ni este a?o ni el que viene habr¨¢ dinero para acometer nuevas peatonalizaciones. ¡°Eso no quiere decir que hayamos desistido¡±, ha a?adido.

Sin embargo, el presupuesto para inversiones del Ayuntamiento de aqu¨ª al final de legislatura es tan limitado que s¨®lo permitir¨¢ terminar las obras ya en curso y reponer aquello que se estropee. Frente a los 926 millones de 2010, se pas¨® a 430 en 2011. En 2012 ser¨¢n 202. En 2013, 142. Pero es que en 2014 ser¨¢n a¨²n menos, 124 millones. En 2015, ¨²ltimo a?o de la legislatura, 166 millones.

Junto al ruido del tr¨¢fico, que seg¨²n los hosteleros concentra el 85% de este problema, tanto los empresarios como los vecinos se?alan el botell¨®n como su principal preocupaci¨®n. El vicealcalde, Miguel ?ngel Villanueva, ha admitido que esta pr¨¢ctica (j¨®venes que compran bebidas en tiendas y las consumen en plazas y parques) ¡°cada vez est¨¢ m¨¢s distribuida por las calles¡± de la ciudad. La Asociaci¨®n de Empresarios de Ocio Nocturno ha se?alado que ¡°la normativa regional no es eficaz¡± para solucionarlo.

La alcaldesa ha reconocido hoy: ¡°Somos conscientes de que en Madrid tenemos un problema que tenemos que resolver. (¡­) Hemos pedido a la Comunidad de Madrid dos cosas, una ya se ha aprobado y la otra est¨¢ por aprobar. En primer lugar, que la denuncia y el procedimiento sancionador queden en manos del Ayuntamiento [es decir, que las multas las ponga la polic¨ªa municipal y las tramite la Hacienda local]. Y adem¨¢s hemos pedido que la sanci¨®n se aplique directamente, sin la alternativa de hacer un curso, que estar¨ªa muy bien que funcionara pero no funciona. La presidenta regional, Esperanza Aguirre, me ha hecho saber que as¨ª se va a hacer¡±.

La ley regional de Drogodependencias y Otros Trastornos Adictivos, conocida popularmente como Ley del Botell¨®n, proh¨ªbe el consumo de alcohol en la v¨ªa p¨²blica y prev¨¦ sanciones de al menos 300 euros para los infractores, que, en el caso de ser menores de edad, deber¨ªan pagar sus padres. Sin embargo, la sanci¨®n econ¨®mica puede ser sustituida, seg¨²n la normal, por trabajos en beneficio de la comunidad¡±. Esto se reduce en la actualidad a cursillos de concienciaci¨®n. Botella ha rese?ado que es precisamente la lucha contra el botell¨®n lo que ha desaconsejado adelantar el cierre de los locales, ¡°porque supondr¨ªa un traslado posible a la calle de una mayor molestia para los vecinos¡±.