Otra jornada inolvidable

Miles de aficionados del Athletic vivieron ayer otro d¨ªa de pasi¨®n rojiblanca. Desde primera hora de la tarde, las calles en las que se concentran habitualmente m¨¢s hinchas, Licenciado Poza y Garc¨ªa Rivero, fueron un aut¨¦ntico hervidero, como en las grandes ocasiones. La conjunci¨®n era perfecta: partido importante ¡ªel Athletic se jugaba el pase a una semifinal europea por segunda vez en su historia¡ª y comienzo de las vacaciones de Semana Santa.

Los alrededor de 1.600 hinchas alemanes que hab¨ªan venido para animar a su equipo madrugaron bastante m¨¢s y desde primera hora se dejaron notar por las calles del Casco Viejo.

Se esperaba un gran ambiente, pero la mayor¨ªa de los hosteleros hab¨ªa coincidido en se?alar que la celebraci¨®n no iba a alcanzar la intensidad del d¨ªa del Manchester United. Aketza Mor¨¢n, camarero del bar Don Ulpiano de Licenciado Poza, confirmaba a EL PA?S por la noche que ¡°hay bastante menos gente¡±. ¡°Los alemanes se han portado muy bien, aunque casi han venido m¨¢s ayer [por el mi¨¦rcoles] que hoy [por ayer]¡±, indic¨®.

A mediod¨ªa, la pe?a alemana del Athletic M¨¹ller-Dani organiz¨® en el restaurante bilba¨ªno Ein Prosit un hermanamiento con pe?as del Schalke. Jarras de cerveza en mano, aficionados de ambos equipos intercambiaron regalos y se enzarzaron en una cari?osa competici¨®n por ver qui¨¦n cantaba m¨¢s alto el himno de su equipo.

En el primer tramo del partido, la Ertzaintza carg¨® contra algunos aficionados alemanes situados en la Tribuna Sur de San Mam¨¦s, a los que sigui¨® luego vigilando a lo largo de todo el encuentro.