Aranburu decide retirarse
El capit¨¢n del conjunto donostiarra reconoce cansancio ¡°f¨ªsico y mental¡± a sus 33 a?os
La Real pierde a uno de sus emblemas dentro y fuera del campo. Mikel Aranburu se va. Lo hace por decisi¨®n propia, a sus 33 a?os, despu¨¦s de 14 temporadas en su club de siempre, donde ha acabado como capit¨¢n reflejando su identidad dentro de la plantilla por la que ha visto pasar a 16 temporadas, la amargura de un descenso y el esfuerzo recompensado de un ascenso.
Aranburu, una vez asegurada la permanencia de la Real en Primera, ha comunicado hoy su decisi¨®n. Mientras los aficionados celebraban el empate del Calder¨®n y la consolidaci¨®n del sistema del discutido Montanier, el capit¨¢n guipuzcoano dio el paso en una rueda de prensa para admitir que ¡°ha llegado el momento¡± de dejar el f¨²tbol, al que ha estado ligado toda su vida y, en particular, a la Real a la que lleg¨® procedente de Azpeitia, su pueblo natal.
En su encuentro con los medios, el capit¨¢n realista reconoci¨® que asist¨ªa a un momento dif¨ªcil, al que ha llegado despu¨¦s de muchas reflexiones, pero entiende que arrastra cansancio ¡°f¨ªsico y mental¡±. Por todo ello, dice adi¨®s entre el reconocimiento un¨¢nime de una afici¨®n que apuesta desde ayer por un homenaje de reconocimiento a quien ha sido santo y sa?a del club durante muchos a?os.
Perfil
- Nacido en Azpeitia (Gipuzkoa) el 18 de febrero de 1979, lleg¨® en infantiles a la cantera de la Real. Con 1,80 de altura y 69 kilos y el 11 de dorsal tradicional, ha disputado 490 partidos con el club blanquiazul, a las ¨®rdenes de 16 entrenadores.
- Procedente del Sanse, donde se estren¨® en la temporada 1996-1997, debut¨® en Primera en junio de esa campa?a, frente al Logro?¨¦s. Nunca ha sido internacional, aunque s¨ª ha jugado con la selecci¨®n de Euskadi
- En la campa?a 2003-2004 lleg¨® a jugar 43 partidos con la Real.
Persona muy vinculada a la izquierda abertzale, defensor a ultranza de la oficialidad de las selecciones vascas deportivas y entre ellas la de f¨²tbol, visti¨® la camiseta de Euskadi, pero no la de Espa?a aunque posiblemente tampoco le importara en exceso. Le val¨ªa con su contribuci¨®n a la Real, donde ha pasado por duros momentos profesionales como la grave lesi¨®n de rodilla sufrida en la temporada 2005-2006, que le oblig¨® a permanecer siete meses fuera de la actividad.
Javier Irureta le incorpor¨® al primer equipo tras detectar con rapidez su calidad en el filial guipuzcoano. A partir de entonces se inicia una trayectoria que le lleva a una progresiva consolidaci¨®n en la l¨ªnea medular de la Real. En esta posici¨®n comparti¨® la alegr¨ªa de un subcampeonato de Liga que permiti¨® entrar en la Champions por primera y ¨²nica vez en su larga carrera profesional. Aranburu, de hecho, ha sabido estar a las duras y a las maduras. Sufri¨® el descenso en medio de la incertidumbre sobre el rumbo de la entidad, pero tambi¨¦n particip¨® en la alegr¨ªa que supuso la recuperaci¨®n de la categor¨ªa con Mart¨ªn Lasarte. Nunca le han extra?ado los sucesivos cambios de entrenador en el banquillo de la Real. Ha pasado por la direcci¨®n de Toshack a la de Clemente o la de Kraus a la de Lotina. Y siempre ha sido un referente en la plantilla de cada temporada.
As¨ª las cosas, Aranburu reconoce que ¡°me he sentido querido y respetado por la afici¨®n¡±. La primera prueba fue el emotivo aplauso que se le tribut¨® nada m¨¢s comunicar su decisi¨®n
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