El Sergas confirma la dimensi¨®n del proyecto inicial del hospital de Vigo
Povisa se mantendr¨¢ como centro de referencia para la poblaci¨®n que lo elija
El Servizo Galego de Sa¨²de (Sergas) confirm¨® ayer las dimensiones iniciales del nuevo hospital de Vigo en la presentaci¨®n de su proyecto de urbanizaci¨®n y ejecuci¨®n a los profesionales del ¨¢rea sanitaria. Nieves Dom¨ªnguez Gonz¨¢lez, gerente del Sergas, asegur¨® que el nuevo hospital, como estaba previsto al comienzo de la legislatura, contar¨¢ con 1.465 camas de hospitalizaci¨®n, 35 salas quir¨²rgicas, 160 consultas externas y 62 salas de diagn¨®stico por imagen, indic¨® que desconoc¨ªa que existiera ning¨²n problema para la financiaci¨®n de la obra, ¡°ya que se mantienen todos los plazos seg¨²n lo previsto¡±, y anunci¨® que el Hospital Povisa seguir¨¢ en el ¨¢rea con una funci¨®n an¨¢loga a la actual.
?El concierto con Povisa ¡ªel m¨¢s caro de la sanidad p¨²blica espa?ola, para una poblaci¨®n asignada de 138.000 beneficiarios de la Seguridad Social y prorrogado desde 2010 en espera de otro nuevo¡ª respetar¨¢ su condici¨®n de hospital general de referencia como hasta ahora, aunque para la poblaci¨®n que voluntariamente lo elija, y mantendr¨¢ sus unidades de referencia para la sanidad p¨²blica (quemados, microcirug¨ªa, cirug¨ªa maxilofacial).
Esta disposici¨®n introduce una aparente incoherencia con el proyecto del nuevo hospital, dimensionado inicialmente en los t¨¦rminos que ahora asume el Sergas pero entre cuyos fundamentos para esa dimensi¨®n figuraba la consideraci¨®n de Povisa como hospital complementario del p¨²blico, cabecera y puerta de entrada ¨²nica al sistema sanitario del ¨¢rea y que iba a albergar todos los servicios de agudos, incluyendo quemados y las demas especialidades de referencia del hospital privado. El Sergas, seg¨²n su gerente, est¨¢ trabajando en perfilar el nuevo concierto para encajar esas aparentes incoherencias.
El proyecto del nuevo hospital, con todo, podr¨¢ sufrir ¡°alguna peque?a variaci¨®n¡± como consecuencia de la exposici¨®n detallada y el intercambio de criterios que suscite en cada uno de los servicios, ¡°pero est¨¢ terminado y responde plenamente al plan funcional en el que se trabaj¨®¡±, asegur¨® Nieves Dom¨ªnguez. En ¨¦l se atender¨¢n los procesos diagn¨®sticos y terap¨¦uticos de mayor complejidad, derivando al Hospital Meixoeiro (420 camas) los de complejidad media y baja y los oncol¨®gicos, y al Nicol¨¢s Pe?a (120 camas) los pacientes psiqui¨¢tricos y sociosanitarios. Dom¨ªnguez abog¨® adem¨¢s por trabajar ¡°en nuevas formas de hospitalizaci¨®n¡± y por potenciar la atenci¨®n a domicilio.
El Sergas considera que el proyecto presentado ayer desmiente las denuncias de Defensa de la Sanidad P¨²blica sobre la merma de las dimensiones y funciones del nuevo hospital. No obstante, la citada asociaci¨®n insisti¨® ayer en el ¡°ocurantismo¡± que ha acompa?ado todo el proceso en la actual legislatura y en la ¡°an¨®mala forma de financiar¡± la obra ¡ªcon fondos que el Estado inyecta en entidades para que los presten a las constructoras y que la Xunta pagar¨¢ a un alto inter¨¦s¡ª, que multiplica su coste ¡°y amenaza con hacerla financieramente inviable tras las elecciones auton¨®micas¡±.
Por otra parte, tanto Dom¨ªnguez como la conselleira de Sanidade, Roc¨ªo Mosquera, volvieron a emplazar ayer al Ayuntamiento de Vigo para que cumpla el convenio que le obliga a realizar las acometidas de luz, agua y otros servicios por importe de cinco millones de euros. El alcalde, Abel Caballero, se resiste por considerar, entre otros aspectos formales como la inexistencia de dotaci¨®n presupuestaria para el convenio, que lo firmado hace seis a?os se refer¨ªa a un hospital p¨²blico y ahora se est¨¢ planteando para un ¡°hospital privado¡±.
Adem¨¢s, una de sus cl¨¢usulas del propio convenio establece que ser¨¢ desarrollado ¡°por otros convenios o addendas en los que se ir¨¢n plasmando sus concreciones y cuantificando sus costes¡±. En el ayuntamiento no ha entrado ning¨²n documento con ese contenido, ni el proyecto ejecutivo ni el plan de urbanizaci¨®n, ¡°lo que nos lleva a pensar que todo esto ¡ªlas exigencias al Ayuntamiento¡ª ¡°es una maniobra para ocultar algo, como la falta de financiaci¨®n¡±.
¡°No vamos a permitir el copago¡±
¡°Vamos a estar en la calle porque no vamos a permitir el copago¡±. As¨ª de tajante se mostraba ayer Jos¨¦ Manuel D¨ªaz Montero, secretario general de la Federaci¨®n de Pensionistas y Jubilados de Comisiones Obreras (CC OO) en Galicia, al tiempo que exhib¨ªa su bast¨®n para hacer ver que manifestarse no entiende de edad. A su lado, unos 200 jubilados y pensionistas protestaban frente a la Xunta contra ¡°los recortes en sanidad, la paralizaci¨®n de la Ley de Dependencia y el copago farmac¨¦utico¡±.
Tras una pancarta que reclamaba la ¡°recuperaci¨®n del poder adquisitivo de las pensiones¡± estaba Jes¨²s Miguel L¨®pez, de Nar¨®n. De si mismo dice ser ¡°un privilegiado¡±, pues recibe 1.100 euros de pensi¨®n. La otra cara de la moneda es que con ese dinero vive su familia, otras cuatro personas que est¨¢n desempleadas. ¡°No le dan trabajo a mis hijos y a mi me recortan la pensi¨®n, ?de qu¨¦ vivimos entonces?¡±. En Galicia, seg¨²n el secretario general de CC OO, Xos¨¦ Manuel S¨¢nchez Agui¨®n, hay unas 70.000 familias con todos sus miembros en el paro. Esto implica que, en muchos casos, la principal fuente de ingresos sea la pensi¨®n de las personas mayores. Una cuant¨ªa media ¡ª776 euros¡ª que, adem¨¢s, es inferior en casi un 20% a la del resto del Estado.
Cuando comenz¨® a trabajar con 11 a?os, Susana Tri?anes, de O Grove, no se imaginaba que alg¨²n d¨ªa habr¨ªa un sistema de seguridad social. ¡°Para cuando lleg¨®, yo ya estaba estropeada¡±. Si bien su pensi¨®n de 500 euros le da para pagar los medicamentos, se resiste a ver mermadas las conquistas sociales. Tambi¨¦n Luisa ?lvarez. ¡°Que nos quiten aquello que hab¨ªamos recuperado, a base de lucha, de un carpetazo y para d¨¢rselo a los banqueros me duele en la vida¡±. Y critica el pago del 10% de los f¨¢rmacos, que va a resarcir el aumento del 1% en las pensiones. Haciendo coro, un grupo de jubilados del antiguo Astano aunaron sus voces para denunciar la reducci¨®n de plantillas en los astilleros.
Lejos de la suspensi¨®n propuesta por el Valedor do Pobo, los jubilados que se plantaron en San Caetano defend¨ªan la Ley de Dependencia en aras de la protecci¨®n de los mayores. Pero ¡°con sentido de futuro¡±, bisbiseaban.
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