Un v¨ªdeo sienta a Bankia a negociar con una familia a la que iba a desahuciar

El marido, los tres hijos, la madre y la hermana discapacitada de Mar¨ªa Ben¨ªtez Cabrera est¨¢n, como ella misma, a punto de perder la casa donde viven. Los siete residen desde hace d¨¦cadas en una antigua casa de vecinos en Montoro (C¨®rdoba), una vivienda destartalada y a medio arreglar, sobre la que pesa una deuda con Bankia. Hasta ahora, la entidad recientemente rescatada con dinero p¨²blico por sus miles de millones de p¨¦rdidas, se ha negado a aceptar la daci¨®n en pago de los casi 200.000 euros que Mar¨ªa y su marido deben. Los siete miembros de la familia sobreviven con la paga que recibe la abuela, de menos de 400 euros mensuales.

Esta ma?ana han dado el primer paso en firme para tratar de evitar esta situaci¨®n. Un v¨ªdeo realizado por el periodista Alberto Almansa y que ha circulado r¨¢pidamente a trav¨¦s de Internet y las redes sociales ha dado a conocer la situaci¨®n cr¨ªtica de esta familia. Y lo que es m¨¢s, ha sentado a negociar en serio a la entidad. El desahuci¨® estaba fijado para el d¨ªa 27 de julio, pero un juez ha dado un mes de margen para ejecutarlo. Un plazo que la plataforma Stop Desahucios, que apoya a la familia, considera b¨¢sicos para obligar a Bankia a hablar.

Un centenar de personas se ha concentrado frente a la oficina que Bankia tiene en el centro de C¨®rdoba. Unos minutos antes, Mar¨ªa, su marido y un representante de la plataforma se han sentado a hablar con la directora de la sede bancaria durante una hora. ¡°Estoy algo m¨¢s tranquila¡±, dec¨ªa Mar¨ªa a la salida de la reuni¨®n con la directora, ¡°pero solo un poco¡±.

No era la primera vez que se reun¨ªan. Pero la de esta ma?ana era una charla m¨¢s tensa, reconoc¨ªa la propia afectada, porque desde la oficina se o¨ªan los gritos de protesta y solidaridad de los manifestantes. ¡°La directora se ha comprometido a hacer llegar a sus superiores la propuesta que le hemos hecho¡±, cuenta Mar¨ªa. ¡°Queremos que se cancele la hipoteca y que nos den un alquiler social de la casa¡±, resume. La familia tambi¨¦n ha pedido al banco que no mantenga la espada de Damocles sobre sus cuellos y, como ha hecho el juez, prorrogue la ejecuci¨®n del desahucio.

Est¨¢ en juego no solo la casa donde Mar¨ªa y su marido, Ventura Aguilar -ambos de 42 a?os- viven con la madre y hermana de la mujer (de 52 y 84 ) y sus tres hijos, de 17, 18 y 20, sino tambi¨¦n una segunda vivienda del hermano de Ventura. Una casa que ofrecieron como aval para las dos hipotecas que solicitaron.

La primera se destin¨® para reformar la vivienda donde todos residen. Una antigua casa de vecinos donde naci¨® la propia Mar¨ªa y que finalmente compraron. ¡°Bankia nos concedi¨® una segunda hipoteca para que mi marido arrendara una tierra de olivos. Pero como la agricultura tambi¨¦n est¨¢ en crisis, pues no pudimos pagar¡±, recuerda la mujer.

La familia, que depende tambi¨¦n de las ayudas de C¨¢ritas, ha recibido el apoyo del Ayuntamiento de Montoro. Su alcalde, Antonio S¨¢nchez Villaverde, se encontraba esta ma?ana entre los manifestantes. ¡°Este caso en particular es una canallada¡±, se?ala recordando las condiciones del desahucio. ¡°Desde el Ayuntamiento tratamos de ayudar con pagos puntuales de alquileres o recibos de la luz o el agua, as¨ª como contratos puntuales. Pero el problema del paro es enorme y estamos desbordados¡±, reconoce. El gobierno local que dirige presupuest¨® para 2012 un total de 27.000 euros destinados a ayudas sociales de emergencia. ¡°Ya no nos queda casi dinero. Vamos a buscar partidas para conseguir presupuestar otros 50.000 euros. La gente lo necesita¡±.

Mientras, Mar¨ªa, Ventura y su familia, esperan la respuesta de Bankia y sue?an con seguir viviendo en su propia casa.