¡°Mis hijas me ve¨ªan por la tele y me preguntaban qu¨¦ hab¨ªa hecho¡±
El local foco de la legionela, que cumpl¨ªa la normativa, est¨¢ cerca de la quiebra y se enfrenta a una denuncia por homicidio imprudente. Sanidad da por cerrado el caso
¡°El d¨ªa que salt¨® la noticia esto estaba lleno de c¨¢maras de televisi¨®n. Esto es la ruina, pens¨¦¡±, contaba ayer Jos¨¦ Luis Moreno, de 41 a?os, a la puerta de la marisquer¨ªa Moreno II, en un pol¨ªgono a las afueras de M¨®stoles, en la antigua nacional V. ¡°?Qui¨¦n ha venido hoy que ya se ha acabado?¡±. El 4 de julio la Consejer¨ªa de Sanidad informaba de que estaba investigando un brote de legionela y que todos los afectados hab¨ªan acudido a ¡°un restaurante de un pol¨ªgono industrial del municipio de M¨®stoles¡±.
No hizo falta decir mucho m¨¢s. Enseguida se filtr¨® que era el suyo, un local impoluto abierto hace apenas siete meses, con el mismo nombre que el restaurante familiar, fundado en 1976 en el centro del municipio y muy conocido. Ayer Sanidad anunci¨® que ¡°da por cerrado¡± el brote. Se ha comprobado que los 63 afectados ¡ªdos de ellas han fallecido¡ª se contagiaron en Moreno, pero la marisquer¨ªa nunca se cerr¨®. Sanidad ni siquiera le ha abierto expediente. ¡°Cumpl¨ªa toda la normativa¡±, confirma un portavoz.
63 casos y dos mujeres fallecidas
La legionela es una bacteria que prolifera muy r¨¢pido cuando se dan determinadas condiciones de humedad y calor. Muchas veces, cuando los inspectores llegan a tomar muestras, ya no la encuentran, pese a que haya podido contagiar a decenas de personas que la han inhalado en min¨²sculas gotas de agua. Si la temperatura baja unos grados, simplemente desaparece sin dejar rastro. El brote de M¨®stoles ha finalizado con dos mujeres de 87 y 63 a?os fallecidas. Las dos padec¨ªan m¨²ltiples patolog¨ªas, seg¨²n la Consejer¨ªa de Sanidad. Finalmente se han producido 63 casos que en las encuestas epidemiol¨®gicas solo coincidieron en un lugar: la marisquer¨ªa.
De ah¨ª que, pese a que los primeros resultados del an¨¢lisis en el laboratorio resultaron negativos, Sanidad siempre defendi¨® que desde el punto de vista epidemiol¨®gico el foco estaba confirmado. En cerca de un 70% de los brotes de legionela nunca se llega a aislar la bacteria causante y a determinar el origen mediante an¨¢lisis. Es lo que ocurri¨® con el brote m¨¢s grave vivido en la regi¨®n, en 2010, que dej¨® seis fallecidos y 47 contagiados. En aquella ocasi¨®n Sanidad impuso 40 sanciones por mantenimiento deficiente, pero nunca encontr¨® el origen.
¡°De un d¨ªa para otro me cambi¨® la vida¡±, recuerda Moreno en una de las salas del restaurante, un local de unas cien mesas que hasta hace un mes pr¨¢cticamente se llenaba los fines de semana de clientela familiar: ¡°Perdimos el 90% del negocio. Los trabajadores empezaron a temer por sus puestos. Llegaba a mi casa y encontraba a mis dos hijas llorando porque me hab¨ªan visto en la televisi¨®n y me preguntaban qu¨¦ hab¨ªa hecho. Lo hemos pasado muy mal, muy mal¡±. Se emociona y tiene que dejar de hablar un momento. La semana pasada tuvo que empezar a despedir: ¡°De este negocio viv¨ªan 62 familias. Hemos echado a 20 empleados, buenos empleados que no ten¨ªan ninguna culpa, y si esto sigue as¨ª ir¨¢n detr¨¢s 12 m¨¢s¡±.
Son las siete de la tarde y apenas seis personas toman algo en la barra, justo al lado de la champanera que Sanidad orden¨® precintar. Moreno ense?a todo el local ¡ª¡±nunca he tenido nada que ocultar¡±, dice¡ª: desde la cocina, amplia, reluciente, hasta los ba?os, uno de ellos tama?o mini, para ni?os, con un cambiador y un sill¨®n para que las madres den el pecho. No evita las instalaciones que precint¨® Sanidad: dos fuentes ornamentales tipo cascada en la entrada, otra en el centro del sal¨®n principal y, sobre todo, el sistema de refrigeraci¨®n evaporativa, una especie de humidificadores como los que se ven en cualquier terraza de verano. Se?ala el ventilador m¨¢s cercano a la puerta, en el hall de entrada, justo donde uno espera para que le acompa?en a la mesa: ¡°Me dijeron que pod¨ªa ser ese, pero no est¨¢ claro¡±.
Pese a que sabe que igual le podr¨ªa haber sucedido a ¨¦l que al local de al lado, ha decidido desmontarlo todo. ¡°Por precauci¨®n. No quiero que me pase lo del hotel de Calpe [se cerr¨® tras un brote y cuando las autoridades lo reabrieron seis meses despu¨¦s hubo nuevos casos]¡±. Se emociona al hablar de sus empleados: ¡°Se han ofrecido a venir gratis hasta que nos recuperemos¡±. Y de muchos clientes: ¡°Me dicen que he tenido mala suerte y ya est¨¢, una desgracia¡±.
¡°Tenemos todos los papeles en regla: las facturas, las garant¨ªas, la inspecci¨®n... La seguridad es lo que he visto toda la vida trabajando con mi padre. Si hab¨ªa que tirar 10 kilos de marisco por si acaso y perder dinero, se hac¨ªa. Si esto hubiera sido culpa nuestra, estar¨ªamos mal y dolidos, pero no ser¨ªa lo mismo. Si los inspectores hubieran encontrado esto sucio, sin licencia, la maquinaria sin control... Pero este chaparr¨®n sin comerlo ni beberlo ha sido muy duro. De golpe pierdes tu patrimonio, tu empresa, tu vida¡±, lamenta Moreno, que empez¨® a recoger mesas en el restaurante familiar con 12 a?os. ¡°Me ha tocado. Y cuando te toca algo, hay que afrontarlo. Me quejo de c¨®mo se ha tratado este asunto. Desde el primer d¨ªa est¨¢bamos marcados y eso no se puede hacer sin tener resultados¡±, lamenta.
Un bufete de abogados ha presentado ya ¡°cinco o seis¡± denuncias por lo penal contra la marisquer¨ªa ¡°por un presunto delito de homicidio por imprudencia y lesiones por imprudencia¡±, confirma un portavoz de V¨¢zquez Abogados. ¡°Se han puesto en contacto con nosotros casi 30 afectados por el brote de M¨®stoles¡±, a?ade. Moreno, que pidi¨® ¡°por respeto¡± no atender a este diario hasta que los enfermos salieran del hospital, dice que entiende a los afectados. ¡°Entiendo que pidan una indemnizaci¨®n, para eso hay un seguro de responsabilidad civil. Pero que piensen tambi¨¦n en c¨®mo se queda un negocio tras una informaci¨®n as¨ª¡±.
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