El 80% de los amarres de la marina de lujo de Tarragona siguen vac¨ªos

La marina Port Tarraco, el espacio de amarre de barcos de lujo de Tarragona, est¨¢ pr¨¢cticamente vac¨ªa. Las instalaciones est¨¢n preparadas para atraer a las numerosas embarcaciones de gran eslora que surcan el Mediterr¨¢neo, pero este verano apenas ha tenido demanda. Su ocupaci¨®n dif¨ªcilmente sobrepasa el 20%.

Desde hace un a?o, la marina es propiedad de un fondo de inversi¨®n de la familia real de Catar, que controla el 95% del capital, y de la empresa Marina Barcelona 92. La transacci¨®n se fragu¨® el 15 de julio de 2011, cuando la Sociedad Internacional Marina Tarraco (IMT) vendi¨® las instalaciones a un jeque de Catar en una operaci¨®n cifrada en 65 millones de euros. La adquisici¨®n la hizo una divisi¨®n inmobiliaria del fondo Qatari Diar Real Estate Investment Company, propiedad del emir Hamabbin Chalifa al Thani. Seg¨²n explic¨® el consejero delegado de la compa?¨ªa, Mohamed Bin Ali al Hedfa, la marina de Tarragona estaba llamada a ser ¡°uno de los pocos puertos deportivos de su categor¨ªa que ofrezcan en el Mediterr¨¢neo occidental amarres de gran calado para sofisticados s¨²per, mega y gigayates¡±.

En total, la marina cuenta con 64 amarres para embarcaciones de un m¨ªnimo de 35 metros de eslora. Una parte de ellos tiene capacidad para acoger yates de hasta 160 metros. Dentro del recinto hay seis edificios, pero solo el 32% del espacio est¨¢ ocupado, la mayor¨ªa por oficinas. Tambi¨¦n se pueden encontrar comercios y establecimientos de restauraci¨®n, aunque muchos han cerrado por la crisis. Los propietarios de la Marina Port Tarraco han rechazado ofertas para instalar locales de ocio nocturno porque no forma parte ¡°del modelo de negocio¡± que desean para el lugar.

Seg¨²n el director de la marina Port Tarraco, Marc Colls, el objetivo es atraer a las embarcaciones de alto nivel en los periodos de entre temporadas, durante la primavera y el oto?o, cuando no surcan por aguas de la Costa Azul, Ibiza o el Caribe. La tripulaci¨®n de estos yates puede alcanzar las 80 personas. ¡°El 99% de los clientes son extranjeros; vienen de Estados Unidos, Inglaterra u Oriente Pr¨®ximo¡±, explica Colls. Pese a la discreta ocupaci¨®n de la marina, asegura que est¨¢n fidelizando clientes y que el proyecto es a largo plazo. Esta temporada la ocupaci¨®n podr¨ªa rondar el 25%.

La compra de la marina por la familia real de Catar no se libr¨® de la pol¨¦mica. Esta zona del puerto deportivo de Tarragona se inaugur¨® en octubre de 2006 con una inversi¨®n inicial de 32 millones de euros. Cuando el poderoso fondo inversor del golfo P¨¦rsico intent¨® adquirir la marina, la transacci¨®n tard¨® en fraguarse porque una sentencia obligaba a derribar parte del complejo. Meses despu¨¦s, una nueva decisi¨®n judicial salv¨® del derribo tanto el complejo de ocio como las d¨¢rsenas de embarcaciones porque se tuvo en cuenta que el Ayuntamiento cambi¨® los usos del terreno.