Lazos hist¨®ricos tras el Atl¨¢ntico

¡°La riqueza de Am¨¦rica Latina est¨¢ en ser tantas cosas a la vez que hacen de ella un microcosmos en el que cohabitan todas las razas y culturas del mundo¡±, escribe Mario Vargas Llosa en su Diccionario del amante de Am¨¦rica Latina.

El continente americano ha sido un destino cl¨¢sico para los vascos pr¨¢cticamente desde la llegada de Col¨®n. Esta emigraci¨®n ha atravesado diferentes etapas, pero la historia afirma que la presencia consolidada de gentes de origen vasco ha facilitado la acogida e integraci¨®n de quienes han ido llegando en cada momento. Actualmente, 62.268 vascos residen en el extranjero, de los cuales m¨¢s del 57% lo hace en Am¨¦rica, seg¨²n los datos del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).

Bajo el t¨ªtulo Am¨¦rica en la memoria: Conmemoraciones y reencuentros, entre el pasado mi¨¦rcoles y ayer la Universidad de Deusto ha acogido el 15? Congreso Internacional de la Asociaci¨®n Espa?ola de Americanistas, una organizaci¨®n fundada en 1982 que aglutina a m¨¢s de 340 expertos de ambas orillas del Atl¨¢ntico, entre profesores e investigadores de las diferentes ramas de las Ciencias Sociales y las Humanidades. Por primera vez, se han reunido en el territorio vizca¨ªno m¨¢s de 130 americanistas peninsulares, europeos y latinoamericanos.

El descubrimiento del Pac¨ªfico, el comercio, la econom¨ªa, el poder y la navegaci¨®n han sido, entre otros muchos, aspectos a tratar durante los cuatro d¨ªas de la cita. Un periodo, en el que en repetidas ocasiones, se ha debatido sobre las relaciones actuales entre el Pa¨ªs Vasco y los pa¨ªses de Am¨¦rica.

Los americanistas han analizado el papel del comercio o de la econom¨ªa

¡°Las empresas vascas cuentan con 299 implantaciones productivas a lo largo del mundo, de las cuales 119 est¨¢n en Am¨¦rica¡±, explicaba en uno de los seminarios Miguel ?ngel Crespo, delegado para la cooperaci¨®n transfronteriza del Gobierno. ¡°Existe adem¨¢s en este momento una importante presencia vasca de la mano de la cooperaci¨®n internacional, ya que de los cerca de 400 proyectos de cooperaci¨®n al desarrollo de Euskadi, la mayor¨ªa est¨¢n siendo en Am¨¦rica Latina¡±, a?ad¨ªa.

El INE precisa que m¨¢s de 24.000 personas nacidas en Euskadi residen en Europa, mientras que m¨¢s de 35.000 lo hacen en Am¨¦rica, principalmente en Venezuela y Argentina. En el caso de EE UU, destaca la elevada presencia de ciudadanos vascos o de esta procedencia residentes en Idaho. Se trata del segundo Estado de EE UU con m¨¢s ciudadanos de origen vasco, por detr¨¢s de California, donde se estima que residen unos 20.800.

M¨¢s del 57% de los vascos que residen en el extranjero vive en Am¨¦rica

Boise, la capital de Idaho, organiza cada cinco a?os desde 1990, los ciudadanos de origen vasco all¨ª residentes organizan una celebraci¨®n quincenal de la cultura, tradiciones y deportes euskaldunes.

¡°Hoy en d¨ªa, la presencia de ciudadanos vascos y empresas en Am¨¦rica se completa con 159 casas vascas, que surgen a finales del siglo XIX con importante presencia de emigrantes, con el fin de ayudarse mutuamente y de mantener v¨ªnculos con la cultura y con su tierra de origen¡±, indica Crespo.

Las exportaciones de empresas vascas se dirigen de una forma mayoritaria a Europa, con Francia y Alemania a la cabeza. Aun as¨ª, Brasil, M¨¦xico, Venezuela, Cuba y Argentina se sit¨²an entre los 20 primeros pa¨ªses a los que las firmas de la comunidad aut¨®noma venden su producci¨®n.

Por contra, entre los veinte principales pa¨ªses de los que Euskadi importa productos solo se halla M¨¦xico entre las naciones americanas, por detr¨¢s de pa¨ªses de Europa y Asia.

¡°Puesto que estamos en la fachada atl¨¢ntica, nuestra acci¨®n exterior debe centrarse en el Atl¨¢ntico¡±, prosigue Crespo. ¡°Euskadi cuenta con una posici¨®n geogr¨¢fica estrat¨¦gica para actuar como nodo central entre Europa y Am¨¦rica, y hay que trabajar en esa idea¡±, a?ade. ¡°El Atl¨¢ntico no debe convertirse en un oc¨¦ano que nos separe, sino en un puente de uni¨®n para los intereses en un espacio com¨²n donde afrontar futuros retos¡±, concluye.