La cara oscura de Madrid
Este s¨¢bado arranca en Getafe su festival de novela negra El g¨¦nero re¨²ne a autores y adictos al lado m¨¢s criminal de la vida
Escribo una novela policial. En la p¨¢gina 14 al sospechoso le hacen la prueba de la parafina para detectar p¨®lvora en sus manos. Ese es el momento en el que un crimin¨®logo cierra el libro espantado: ?La p¨®lvora hace d¨¦cadas que no se busca as¨ª! De acuerdo, ?pero c¨®mo iba a saberlo yo? Pues hab¨ªa medios: estudiar criminolog¨ªa, una b¨²squeda rigurosa de medicina forense o apuntarse a un seminario para escritores de novela negra.
Esta ¨²ltima soluci¨®n es la que propone la escuela de creaci¨®n Hotel Kafka (Hortaleza, 104): cursillos impartidos, junto a escritores como Rafael Reig, por forenses, abogados y detectives que instruyen a los alumnos sobre las circunstancias en torno a un asesinato. El crimin¨®logo ?ngel Garc¨ªa Collantes es uno de los docentes: ¡°Adem¨¢s de escritores, vienen guionistas o periodistas que necesiten familiarizarse con la especialidad para no decir barbaridades¡±. Aprenden a reconocer el punto del que procede una bala a partir de las manchas de sangre en la pared, el arte de los retratos robot y las autopsias¡ Por 690 euros y en 22 horas y media. ¡°Yo lo hice el primer a?o¡±, cuenta Guillermo Aguirre, coordinador de los cursos en el Hotel. ¡°Tuvimos que dar el DNI para que nos tuvieran localizados, porque es informaci¨®n sensible. Visitamos la c¨¢rcel e hicimos pr¨¢cticas de tiro¡±.
Se trata de un plato m¨¢s en el men¨² negro de Madrid. Ma?ana arranca la quinta edici¨®n del festival Getafe Negro y el mundo de la ficci¨®n criminal contin¨²a su t¨ªmida expansi¨®n: librer¨ªas, clubes de lectura y j¨®venes escritores se hacen fuertes en Madrid.
En la librer¨ªa Burma (Ave Mar¨ªa, 18) le deben el nombre al detective Nestor Burma, del franc¨¦s L¨¦o Malet. Abrieron hace dos a?os y se especializan en literatura policiaca y c¨®mic. ¡°Pero completamos con actividades como talleres, etc.¡±, cuenta Chus Garc¨ªa, copropietaria junto a Alfredo Jim¨¦nez. Los clubes de lectura (10 euros) se disponen en ciclos por g¨¦neros (novela negra, cr¨ªmenes mediterr¨¢neos, relato ruso¡), y una vez al mes la librer¨ªa organiza junto con la asociaci¨®n S¨¢bado Negro un encuentro con un autor policiaco. El invitado hoy ser¨¢ Javier M¨¢rquez S¨¢nchez con Letal como un solo de Charlie Parker. ¡°Los de la asociaci¨®n asisten fielmente, y el resto de visitas dependen del tir¨®n del escritor¡±, cuenta Jim¨¦nez. ¡°Festivales como el de Getafe son una buena oportunidad de fichar a escritores para las charlas¡±. En Burma defienden las virtudes de la especializaci¨®n: ¡°Permite tener m¨¢s fondos y escapar a la tiran¨ªa de las novedades¡±. Chus y Jacinto son grandes aficionados al g¨¦nero: ¡°Hay que leer mucho para asesorar al cliente¡±.
Cinco a?os de homenaje al ¡®noir¡¯
- Getafe Negro, del 20 al 28 de octubre, cumple su quinta edici¨®n. La mayor¨ªa de actividades se desarrollan en Getafe, pero tambi¨¦n habr¨¢ en varias en Madrid.
- La Rep¨²blica Checa ser¨¢ el pa¨ªs homenajeado. Participan los escritores Pavel Kohout, Petr Kr¨¢l, Mark¨¦ta Pil¨¢tov¨¢ y Martin Reiner.
- Kafka tendr¨¢ un tributo con una exposici¨®n tra¨ªda de Praga que se ubicar¨¢ en La F¨¢brica de Harinas de Getafe. "Sin ser un autor negro, hay elementos de su escritura que pertenecen al g¨¦nero: la crueldad, los juicios, la oscuridad...", explica Lorenzo Silva, comisario del festival.
- El humor tendr¨¢ un papel, con charlas de Eduardo Mendoza o Juan Bas. La crisis, el periodismo, el cine negro o el c¨®mic ser¨¢n otros temas de las charlas diarias. Un cami¨®n laboratorio de la Guardia Civil estar¨¢ el domingo en Getafe.
- Un festival de jazz en la ciudad acompa?ar¨¢ a la literatura los d¨ªas 19, 20 y 21.
- La mayor¨ªa de actividades son gratuitas.
- M¨¢s informaci¨®n en www.getafenegro.com.
Donde tambi¨¦n gestionan un club de lectura de novela negra es en la librer¨ªa Estudio en Escarlata (Guzm¨¢n el Bueno, 46). Al frente est¨¢ Juan Salvador L¨®pez, conocido en el mundillo como Juan Escarlata. ¡°Yo soy el moderador del club. Un viernes al mes nos reunimos y elegimos dos t¨ªtulos por votaci¨®n¡±, cuenta. El club es gratuito y supone un aliciente m¨¢s dentro de un negocio familiar que lleva abierto ocho a?os y que va capeando la crisis aunque haya comenzado a notar cierta ca¨ªda este a?o. Venden todas las gamas del negro (policiaca de serie, thriller, g¨®tico¡) pero su especialidad son los libros de Sherlock Holmes, un subg¨¦nero en el que Conan Doyle fue un autor m¨¢s: despu¨¦s de ¨¦l vinieron c¨®mics, sagas paralelas, aventuras de Sherlock en Espa?a (en eso no fue precursor Garci)... ¡°Hay mucha producci¨®n, y se van haciendo cosas muy buenas en espa?ol, pero yo echo de menos que no se haya explotado m¨¢s la corrupci¨®n y la degradaci¨®n de la nuestra vida pol¨ªtica. No hace falta que venga el de Las Vegas aqu¨ª para traernos eso¡±, bromea Juan.
Nueva generaci¨®n
Aunque precisamante los escritores coinciden en que el vigor del g¨¦nero se explica porque este se est¨¢ empapando de realidad. El reciente premio Planeta, Lorenzo Silva, comisario de Getafe Negro, considera que ¡°cuando bajan las aguas, quedan muchas cosas feas al aire, y existe una necesidad de contarlo¡±. Nadie niega que la marea negra tiene un componente de moda espoleada por la saga Millenium de Stieg Larsson, pero la crueldad de la crisis ha acelerado un ennegrecimiento de la novela social. ¡°Y la calidad de los escritores nuevos pesa: un g¨¦nero muy secundario se ha convertido en central y eso ha atra¨ªdo a grandes autores¡±, valora Silva.
Dos de sus recomendaciones son Mercedes Castro (1972) y Marcelo Luj¨¢n (1973), ¡°muy buenos escritores¡±. Ambos se declaran deudores de lo negro, pero no lo practican plenamente.
¡°Ahora se puede hacer negro sin que haya ni polic¨ªas ni muertos¡±, cuenta Luj¨¢n. ¡°El mundo se ha convertido en algo tan cruel que la novela urbana, social, por fuerza tiene que ser negra¡±. Luj¨¢n ha transitado tanto por el noir contempor¨¢neo (La mala espera, premiada en Getafe en 2009), como por los territorios lejanos en el tiempo y en el espacio de su ¨²ltima obra, Moravia, ambientada hace 50 a?os en c¨ªrculos checos. ¡°Lo que me importa es la historia; lo de negro es secundario: esta ¨²ltima obra la ubiqu¨¦ en el pasado porque trata de unos valores que ya no existen¡±.
Mercedes Castro, aficionada al g¨¦nero, tambi¨¦n se divierte entrando y saliendo de ¨¦l. ¡°Sus reglas pueden ser un buen punto de partida, pero a m¨ª lo que me interesa es entender la sociedad¡±. Su primera obra, Y punto, tiene como protagonista a una polic¨ªa que tiene que bracear en un mundo de hombres al tiempo que utiliza su papel de funcionaria de la ley para husmear en todas las capas sociales: las bajas y las altas. ¡°En esa novela quer¨ªa hablar de los grandes contrastes que hay en Madrid. En mi segundo libro, Mantis, romp¨ª deliberadamente con el g¨¦nero negro, aunque tambi¨¦n hay cr¨ªmenes¡±.
Los dos coinciden en que la ciudad cada d¨ªa resulta un espacio m¨¢s hostil. No tienen que moverse muy lejos para buscar material para la cr¨ªtica y la disconformidad. El boom negro les ha servido como trampol¨ªn pero tienen claro que ninguno quiere ser un nuevo Conan Doyle, prisionero de la pipa y la lupa. El objetivo es hacer Literatura. Sin colores.
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