En Lavapi¨¦s hay mercado
Una plaza en decadencia marcha ahora a pleno rendimiento El ensayo de convivencia entre puestos cl¨¢sicos y renovados a 10 euros el metro cuadrado Para celebrar la "reinauguraci¨®n" empiezan hoy su ¡®Semana Grande¡¯
Los comerciantes del Mercado de San Fernando, en Lavapi¨¦s, viven una nueva y vibrante fase funcionando a plena capacidad. Y han decidido que la ocasi¨®n bien merece ¡°reinaugurarse¡± celebrando, desde hoy y hasta el 18 de noviembre, su Semana Grande. Atr¨¢s queda el sopor estival y el montaje a cuentagotas de nuevas empresas repletas de gente joven. Hoy se puede decir que su revitalizaci¨®n es un hecho, con todos los locales ocupados ¡ªexceptuando una vacante para un pescadero que haga la ¡°libre competencia¡± al actual, Emilio¡ª y una lista de espera de 40 proyectos. Hace dos semanas que ampliaron los horarios para abrir los mediod¨ªas y fines de semana; la excusa perfecta para montar una fiesta y demostrar que se han reinventado y que quieren volver a ser uno de los puntales de Lavapi¨¦s.
Talleres, charlas, conciertos y actividades varias se integrar¨¢n desde hoy en el ambiente de este mercado de abastos tradicional; un programa tan diverso como los perfiles a un lado y otro del mostrador.
Al asequible precio de 10 euros por metro cuadrado han proliferado puestos que destilan frescura y originalidad: libros a granel, cerveza artesana, comercio justo, productos ecol¨®gicos o estudios de arquitectura conviven con los establecimientos ¡°de toda la vida¡±. Ana Marrero participa en PEC, un espacio de co-working de San Fernando, y explica que el objetivo de esta Semana Grande es llamar la atenci¨®n: ¡°Queremos que el mercado se abra m¨¢s al barrio y que los vecinos lo conviertan en su primera opci¨®n de compra¡±.
¡°Esto estaba muerto, la entrada de sangre joven ha sido maravillosa¡±. Lo afirma Victor Alonso, gerente del Mercado de San Fernando desde hace 18 a?os. El centro funcion¨® bien en los ochenta y noventa, pero a partir de 2004 su ocupaci¨®n comenz¨® a flaquear. ¡°Intentamos darle vida con varios proyectos, pero todos se cayeron¡±, cuenta Alonso. ¡°Y cuando ya pens¨¢bamos en cerrar lleg¨® la revoluci¨®n¡±.
Colectivos muy dispares comenzaron a hacerse eco de las inquietudes de los vecinos a principios de 2012. ¡°Analizamos el concepto de mercado como herramienta para reactivar el entorno local¡±, explica Marrero. ¡°Es cierto que personas de La Tabacalera o el 15-M contribuyeron a darle forma, pero nunca habr¨ªa sido posible sin los comerciantes que apostaron por un modelo como este, horizontal y abierto¡±.
Adem¨¢s de encontrarle un sano competidor a Emilio, solo les falta la licencia del restaurante para montar una ¡°inauguraci¨®n oficial¡±. Hasta entonces la Semana Grande calibrar¨¢ el ¨¦xito del proyecto. Por ahora, Alonso est¨¢ satisfecho: ¡°Mantenemos los clientes habituales, gente mayor, pero ahora viene mucha m¨¢s gente joven o con hijos a disfrutar del espacio. En 18 a?os no hab¨ªa visto nada igual¡±.
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