El coste total de la Alh¨®ndiga se sit¨²a por encima de los 100 millones
El Tribunal Vasco de Cuentas aprecia deficiencias en contratos relativos al proyecto
El coste total para las arcas p¨²blicas de la Alh¨®ndiga, el centro de ocio y cultura dise?ado por Philippe Starck en pleno centro de Bilbao, superaba al final de 2010, siete meses despu¨¦s de su inauguraci¨®n, los 100 millones de euros ¡ªincluido su entorno¡ª. La cifra figura en el informe del Tribunal Vasco de Cuentas P¨²blicas sobre el Ayuntamiento de Bilbao relativo a ese a?o, que incluye un apartado espec¨ªfico de fiscalizaci¨®n del centro cultural.
El Tribunal recuerda que a la fecha del informe ¡ªel pasado d¨ªa 8¡ª est¨¢ a¨²n pendiente la liquidaci¨®n final de las obras, por lo que no se puede a¨²n determinar el coste total de su construcci¨®n. El coste total de la puesta en marcha del Guggenheim Bilbao supuso en su d¨ªa ¡ªincluyendo las aportaciones a la Fundaci¨®n norteamericana y la compra de obras de arte¡ª 166,5 millones de euros (27.705 millones de pesetas), seg¨²n la fiscalizaci¨®n que en su momento realiz¨® el mismo Tribunal.
El coste de la Alh¨®ndiga incluye los gastos de la sociedad mercantil creada con capital ¨ªntegramente del Ayuntamiento de Bilbao para construir y explotar el centro como los del propio consistorio. Dicha mercantil encomend¨® en 2005 a la sociedad interinstitucional Bilbao R¨ªa 2000 gestionar las obras de construcci¨®n que entonces restaban, encomienda que el Tribunal considera ahora que ¡°carece de cobertura legal¡±.
A ello a?ade que el convenio firmado en junio de 2005 entre la mercantil propiedad del Ayuntamiento y Bilbao R¨ªa 2000 fijaba el coste estimado de las obras en 39 millones, sin que se pueda determinar ¡°a qu¨¦ conceptos corresponde la diferencia¡± hasta los 67,1 millones facturados por Bilbao R¨ªa 2000 a fecha 31 de diciembre de 2010 en concepto de ejecuci¨®n de obra.
El centro cultural bilba¨ªno supera este a?o los cinco millones de usuarios
El Ayuntamiento replica en sus alegaciones que la enconmienda no se ve afectada por la Ley de Contratos del Sector P¨²blico y que la valoraci¨®n inicial fue muy previa y en la evoluci¨®n de los costes se procedi¨® como fijaba el convenio.
El ¨®rgano auditor aprecia adem¨¢s diferentes deficiencias en contratos ligados al centro adjudicados tanto por el consistorio como por su mercantil o Bilbao R¨ªa 2000. El importe de adjudicaci¨®n de estos contratos supera en conjunto los 60 millones. El consistorio alega en su descargo en la mayor¨ªa de casos, ofreciendo distintas argumentaciones legales.
Precisamente ayer el Ayuntamiento de Bilbao aprob¨® en pleno, solo con los votos del PNV, una ampliaci¨®n de capital de 1,8 millones para liquidar las obras pendientes de la Alh¨®ndiga. El concejal de Obras y Servicios, Jos¨¦ Luis Sabas, que cifr¨® en 67,7 millones la construcci¨®n del centro, consider¨® ¡°un ¨¦xito¡± el equipamiento, que en lo que va de a?o ha tenido m¨¢s de cinco millones de usuarios.
La Alh¨®ndiga contar¨¢ el pr¨®ximo a?o con 5,65 millones de presupuesto. El ejercicio 2010, el fiscalizado por el Tribunal y su primer a?o, no completo, de funcionamiento, cerr¨® con 3,4 millones de p¨¦rdidas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.