Los MIR elevan la tensi¨®n
Los m¨¦dicos en formaci¨®n deciden hoy si siguen adelante con la huelga El paro ha obligado a suspender operaciones y a reorganizar los centros
Los Especialistas Internos Residentes (EIR), los conocidos como MIR, deciden este lunes si siguen adelante con la huelga que iniciaron hace tres semanas. Las opiniones est¨¢n divididas. Unos se muestran partidarios de mantener el paro, impulsados por el seguimiento mayoritario que est¨¢ teniendo la convocatoria y el apoyo que reciben de gran parte de la profesi¨®n, pero otros prefieren suspenderlo para facilitar la negociaci¨®n con la Consejer¨ªa de Salud, que insiste en que no se sentar¨¢ a hablar con ellos hasta que dejen la huelga.
La convocatoria naci¨® el 19 de noviembre como un paro indefinido, pero casi nadie, ni siquiera muchos de los huelguistas, pensaba que iba a durar tanto. Tampoco los responsables del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que al principio no le dieron demasiada importancia a la protesta y ya empiezan a impacientarse. El principal temor de la Consejer¨ªa de Salud, que la movilizaci¨®n se extendiera entre los m¨¦dicos veteranos, se confirm¨® la semana pasada, cuando facultativos del Carlos Haya de M¨¢laga y el Virgen del Roc¨ªo de Sevilla acordaron ir a la huelga en los pr¨®ximos d¨ªas.
Los m¨¦dicos en formaci¨®n, alrededor de 4.500 en Andaluc¨ªa, se definen como asindicales y apol¨ªticos. Agrupados en torno a la Coordinadora Andaluza de Representantes de EIR (CAREIR), se comunican por Whatsapp (mensajes gratuitos de tel¨¦fonos m¨®viles), mantienen reuniones por Skype (videollamadas por Internet) y difunden sus convocatorias por Tuenti, Facebook y Twitter. Con poca log¨ªstica, se movilizan r¨¢pido.
El seguimiento de la huelga ha sido mayoritario estas dos semanas, aunque ha bajado algo a medida que pasan los d¨ªas y es m¨¢s masivo en los grandes hospitales que en los centros m¨¢s peque?os. Pero en todos han trastocado la organizaci¨®n. Los MIR deben trabajar siempre supervisados por un tutor, aunque, sobre todo los de los ¨²ltimos a?os de especialidad, operan, pasan consulta y asumen a gran parte de los pacientes que llegan a las urgencias. ¡°Forman parte del engranaje de los hospitales. El sistema est¨¢ montado as¨ª y una huelga larga puede crear muchos problemas¡±, advierte Antonio Mac¨ªas, responsable de Sanidad en UGT Andaluc¨ªa.
El paro de los MIR, que al ser profesionales en formaci¨®n no tienen servicios m¨ªnimos, est¨¢ obligando a los m¨¦dicos a asumir m¨¢s pacientes y m¨¢s guardias. Especialistas que nunca hacen guardias presenciales cumplen ahora turnos de 24 horas. El SAS est¨¢ haciendo contratos temporales para cubrir los huecos y ha tenido que suspender algunas intervenciones. Seg¨²n los datos de la Consejer¨ªa de Salud, desde que se inici¨® la huelga se han dejado de hacer 16 sesiones quir¨²rgicas, lo que ha supuesto posponer la operaci¨®n de 41 pacientes. Es el 1% de la actividad asistencial de estas dos semanas, pero algunos m¨¦dicos consultados aseguran que la huelga tambi¨¦n se est¨¢ notando en las esperas de urgencias, para asignar habitaci¨®n a los pacientes que hay que ingresar o en las demoras para dar las altas.
La protesta de los residentes ha recabado tambi¨¦n el apoyo de los colegios de m¨¦dicos. Tienen montado su cuartel general en la sede de colegio andaluz, en Sevilla, donde celebran las asambleas y organizan cada jornada de movilizaci¨®n. El presidente de los colegiados andaluces, Francisco Jos¨¦ Mart¨ªnez Amo, justifica este apoyo: ¡°Nuestra posici¨®n es ayudarles en lo posible. Pero no fomentamos la huelga ni les incitamos a que sigan¡±. ?l, asegura, no desea que la movilizaci¨®n se extienda entre los veteranos. ¡°La huelga es como una intervenci¨®n quir¨²rgica: nunca es buena, pero a veces no hay otra opci¨®n¡±, afirma.
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