Fabra: Sanidad m¨¢s plural que p¨²blica

El presidente del Consell, Alberto Fabra, estren¨® ayer nuevo Gobierno. El primero del que se puede afirmar, con rotundidad, que tiene su sello tras deshacerse de la pr¨¢ctica totalidad del gabinete que hered¨® de Francisco Camps. Es tambi¨¦n el primer Consell en el que se adivina que Fabra deja atr¨¢s un sentimiento de incomodidad, como el de quien ocupa la casa de otro.

Quiz¨¢ por eso, el jefe del Consell, m¨¢s confortable que en otras ocasiones, aprovech¨® el acto de posesi¨®n del nuevo Gabinete para reivindicar su propia gesti¨®n y, sobre todo, para desplegar un discurso con nuevos matices. Un discurso que pivota sobre dos ejes: la apuesta por la privatizaci¨®n en la sanidad p¨²blica, por un lado, y la reducci¨®n del sector p¨²blico y el cumplimiento del objetivo del d¨¦ficit en 2013, por otro. Y es en las carteras de Sanidad y Hacienda donde Fabra ha situado a los fichajes con m¨¢s lustre.

As¨ª, durante el juramento del nuevo Gabinete en el Palau de la Generalitat, Fabra, apost¨® por una sanidad ¡°plural, gratuita, universal y de calidad¡±. El cambio de ¡°plural¡± por ¡°p¨²blica¡± que siempre ha figurado en todos los discursos del PP es un salto pol¨ªtico cualitativo por parte del presidente, que acostumbra a llevar escritas sus intervenciones.

El cambio de adjetivo se produce tras un intento fallido, por parte del Gobierno valenciano, de privatizar toda la gesti¨®n no asistencial del sistema auton¨®mico de salud. Un fracaso que le ha costado el puesto a Luis Rosado como consejero de Sanidad y que ha provocado su sustituci¨®n por Manuel Llombart, un ejecutivo que hasta ahora ocupaba el cargo de director general del Instituto Valenciano de Oncolog¨ªa, una fundaci¨®n de car¨¢cter privado.

El fracasado modelo de privatizaci¨®n integral de la gesti¨®n del sistema valenciano de salud ¡ªque no inclu¨ªa ni el personal sanitario ni las infraestructuras¡ª ten¨ªa que haber entrado en vigor el pr¨®ximo 1 de enero. La Generalitat confiaba, adem¨¢s, en obtener este mismo a?o unos ingresos de 380 millones de euros, en concepto de canon cobrado a los hipot¨¦ticos gestores privados. El ingreso est¨¢ reflejado en el plan de estabilidad presentado por el Consell al Ministerio de Hacienda, pero ninguno de los objetivos previstos en el plan de privatizaci¨®n se ha logrado.

La omisi¨®n del presidente valenciano al car¨¢cter p¨²blico del sistema de salud se produce cuando en la Comunidad de Madrid, tambi¨¦n gobernada por el PP, se ha iniciado la privatizaci¨®n del sistema.

El presidente advirti¨® al nuevo consejero de Sanidad, Manuel Llombart, de que tiene por delante "retos muy importantes" y que tendr¨¢ que dar el mismo servicio pero con menos dinero.

La toma de posesi¨®n del nuevo consejero de Sanidad fue recibida con un encierro de trabajadores p¨²blicos en el Hospital General de Valencia. All¨ª, el personal, de manera espont¨¢nea, acord¨® un encierro de dos d¨ªas para protestar contra la intensificaci¨®n de los procesos de privatizaci¨®n en la sanidad y la posibilidad de que el Hospital General, gestionado por un Consorcio entre la Generalitat y la Diputaci¨®n, pueda ser uno de los m¨¢s afectados.

Ante los recelos generados por el discurso de Fabra y el perfil del nuevo consejero de Sanidad, el propio Llombart y el vicepresidente Jos¨¦ Ciscar se vieron obligados horas m¨¢s tarde a recalcar el car¨¢cter p¨²blico de la sanidad valenciana. Ambos aprovecharon sendos actos de traspaso de carteras, ya por la tarde, para enmendar la omisi¨®n del presidente.

Los recelos de los trabajadores sanitarios con el nuevo Consell de Fabra no son los ¨²nicos. Otros colectivos de empleados p¨²blicos, como los de Ferrocarrils de la Generalitat ¡ªque amenizaron el acto de toma de posesi¨®n de los consejeros con bocinas¡ª, tambi¨¦n siguen desconfiando del nuevo Consell. Especialmente desp¨²es de que la competencia sobre el sector p¨²blico empresarial, en plena reconversi¨®n, se haya trasladado de la Consejer¨ªa de Econom¨ªa a la de Hacienda. Un departamento en el que el nuevo consejero Juan Carlos Moragues pretende acabar con las dilaciones de un proceso que deb¨ªa estar mucho m¨¢s avanzado.

Fabra advirti¨® a su nuevo Consell que no tendr¨¢n ¡°plazos de gracia o de cortes¨ªa porque la ciudadan¨ªa no puede esperar¡±. Y la oposici¨®n tampoco est¨¢ por darle a Fabra un margen que consideran que no se ha ganado.

El PSPV, que no acudi¨® a la toma de posesi¨®n de los nuevos consejeros, anunci¨® que reclamar¨¢ otra vez la comparecencia urgente del presidente de la Generalitat para que explique las dimisiones de Jos¨¦ Manuel Vela, como consejero de Hacienda hace 15 d¨ªas, y la del director general de R¨¤dio Televisi¨® Valenciana (RTVV) Jos¨¦ L¨®pez Jaraba y los nuevos nombramientos realizados el pasado viernes. Comparecencia que, previsiblemente, Fabra dejar¨¢ para el pr¨®ximo periodo de sesiones que se inicia en febrero.

Qui¨¦n s¨ª pudo escuchar la intervenci¨®n de Fabra fue el portavoz de Comprom¨ªs, Enric Morera, que anunci¨® que exigir¨¢ resultados ¡°desde el minuto uno¡±. EU tambi¨¦n se ausent¨®.

En su discurso, el presidente de la Generalitat defendi¨® la gesti¨®n del Gobierno saliente, especialmente en la reducci¨®n de los costes de la Administraci¨®n y en ¡°quitar privilegios a la clase politica, tal y como la sociedad ped¨ªa¡±. ¡°Hemos sabido hacer los deberes¡±.

Sin embargo, el relevo de los consejeros m¨¢s identificados con el campismo (Lola Johnson, Maritina Hern¨¢ndez y Jorge Cabr¨¦, que no acudi¨® a la jura de su sucesor pero s¨ª al relevo de carteras vespertino) deja nuevas heridas en el seno del PP.

Buena parte del campismo, refugiado en empresas p¨²blicas y en otras Administraciones, acudi¨® a arropar a los consejeros destituidos, especialmente a Hern¨¢ndez y a Johnson, que vieron como el sal¨®n de actos de sus respectivas consejer¨ªas ¡ªAgricultura y Turismo, que desaparecen¡ª estaban abarrotados en el acto de traspaso de carteras.

El tercero de los fichajes realizados por el jefe del Consell, el de la nueva consejera de Bienestar Social, Asunci¨®n S¨¢nchez, fue el que arranc¨® con un perfil m¨¢s plano. Por una parte, porque Llombart en Sanidad y Moragues en Hacienda son los llamados para llevar a cabo las prioridades que ha establecido Fabra. Por otra, porque Cabr¨¦, en su despedida admiti¨® su descontento por no haber logrado el dinero necesario para los colectivos m¨¢s desfavorecidos. El ya exconsejero asegur¨® que en materia de Justicia no se pleg¨® ante nadie y que la gesti¨®n de la Cooperaci¨®n al desarrollo la deja mejor que la encontr¨® cuando la hered¨® de manos de Rafael Blasco. ¡°Ahora quiero volver a mi trabajo de fiscal y desaparecer de la vida pol¨ªtica¡±, sentenci¨®.