Cortylandia, aliado inesperado de los desahuciados
Los acampados en la plaza de Celenque siguen en su lucha con el apoyo de las familias que visitan el ¡®show¡¯ navide?o
Hora de la merienda en la plaza de Celenque. Cinco de los acampados arrimados al brasero de ascuas sacan de un par de bolsas de pl¨¢stico una tableta de turr¨®n, unos bollos y unas cuantas piezas de fruta. Mientras Jos¨¦ Mar¨ªa coloca un cazo de leche a calentar en el rescoldo, Marga reparte los dulces. La tarde noche se aventura fr¨ªa y estos dos voluntarios pretenden permanecer el mayor tiempo posible con los desahuciados que desde el pasado 22 de octubre se instalaron frente a la hist¨®rica sede de Bankia con el objetivo de que la entidad paralizase sus desahucios, les garantizase un alquiler social y les condonase la deuda que contrajeron con el banco para la adquisici¨®n de sus viviendas.
A su lado, cuatro compa?eros recogen las firmas de todos los viandantes que se acercan a las mesas para apoyar la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que impuls¨® la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) el pasado mes de abril para modificar la ley hipotecaria. De m¨²sica de fondo se escucha: ¡°Cortylandia, Cortylandia, vamos todos a cantar alegr¨ªa en estas fiestas porque ya es Navidad¡±.
Desde primeros de mes, los desahuciados comparten espacio con los mu?ecos animados que cada a?o por estas fechas cubren la fachada de los grandes almacenes de la calle del Maestro Victoria. Si en un primer momento los acampados vieron con recelo la instalaci¨®n del espect¨¢culo navide?o, en cuanto empez¨® a multiplicarse el n¨²mero de firmas de padres y madres que aprovechaban el paso por la c¨¦ntrica calle para solidarizarse con la causa, Cortylandia se convirti¨® en su mejor aliado.
¡°La m¨²sica nos aburre pero tenemos que reconocer que atrae a mucha gente. Hay d¨ªas en los que no damos abasto con la recogida de firmas¡±, explica Dominique Campbel, un estudiante de auxiliar de vuelo involucrado en el 15-M. A primeros de octubre, la PAH contabiliz¨® un total de 400.000 firmas para la ILP. Dos meses despu¨¦s, se han recogido m¨¢s de 700.000 r¨²bricas en toda Espa?a.
Aunque el medio centenar de desahuciados de Celenque se muestra muy satisfecho por estar contribuyendo con esta causa, recuerdan que su principal objetivo es negociar su situaci¨®n con Bankia. Lamentablemente, este escollo es m¨¢s dif¨ªcil de conseguir. Rafa Mayoral, uno de los abogados de la PAH, asegura que despu¨¦s de dos meses de acampada, las negociaciones con el banco est¨¢n ¡°bastante bloqueadas¡±.
A pesar de todo, desahuciados y voluntarios desarrollan su rutina cobijados bajo las cuatro carpas de pl¨¢stico con la mayor normalidad posible. Mientras Mar¨ªa Jos¨¦ Gonz¨¢lez, de 66 a?os, invita con vehemencia a los transe¨²ntes a que firmen la ILP, Judith Castro, una de las afectadas, de 44 a?os, ordena los trastos que se acumulan en los escasos metros de acera que ocupan los acampados: decenas de carteles en los que se pueden leer emblemas contra banqueros y pol¨ªticos, colchas apiladas sobre las sillas, cajas de comida¡
Atra¨ªda por los carteles, Patricia Cuevas, de 31 a?os, decide acercarse a una de las mesas para dejar su r¨²brica. ¡°No ten¨ªa informaci¨®n sobre esta iniciativa pero estoy de acuerdo con ellos: hay que parar esta locura¡±, explica esta trabajadora social en paro. A diferencia de ella, Demetria Marcos, de 68 a?os, s¨ª que hab¨ªa visto por televisi¨®n la acampada de Celenque. En cuanto se ha recuperado de una operaci¨®n de ojos, se ha trasladado desde el municipio de Torrelodones para apoyar a los desahuciados. A su lado, sus dos nietos esperan con expectaci¨®n que los mu?ecos de Cortylandia empiecen la funci¨®n.
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