?Qu¨¦ hizo usted este a?o, se?ora Botella?
Repasamos alfab¨¦tica y cronol¨®gicamente los aciertos y errores de un Ayuntamiento intervenido en lo econ¨®mico por Rajoy y maniatado por la herencia de Gallard¨®n
>> Alcaldesa. La sent¨® al frente del Ayuntamiento de Madrid la succi¨®n provocada por el vac¨ªo s¨²bito de Alberto Ruiz-Gallard¨®n al poner pies en polvorosa al Ministerio de Justicia sin mirar atr¨¢s. Solo Gallard¨®n parec¨ªa confiar en su val¨ªa, y un a?o despu¨¦s Ana Botella (PP) ha confirmado por qu¨¦: mejor gestora que pol¨ªtica, trabajadora incansable aunque apenas le luzca, la hasta entonces esposa de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y ahora alcaldesa ha ido madurando a marchas forzadas en el puesto, creciendo por encima de cada golpe que recib¨ªa pero siempre por debajo del siguiente, cultivando el trato directo con los ciudadanos en la calle hasta que la calle se le puso en contra, y cumpliendo sin revolverse aquello para lo que fue designada no por las urnas sino por su partido: pagar las facturas de Gallard¨®n sin chistar.
?El Ayuntamiento de Madrid ¡ªcomo todos¡ª est¨¢ intervenido econ¨®micamente por el Gobierno, lo que ha dejado a Botella sin apenas margen de maniobra. Y la tragedia del Madrid Arena le ha robado definitivamente la iniciativa y ha colocado el grueso de su gesti¨®n bajo sospecha, pese a que pr¨¢cticamente todo (incluido su equipo de Gobierno) es herencia o consecuencia de Gallard¨®n. A la alcaldesa, que no cuenta ya ni con el respaldo p¨²blico de su partido, le ha tocado pagar la cuenta.
>> Basura. Botella ha ejecutado el proyecto de Gallard¨®n de agrupar los contratos de servicios p¨²blicos (farolas, limpieza, parques, etc¨¦tera) para ahorrar y vigilar mejor su calidad. El m¨¢s importante este a?o era el de recogida de basuras, pero qued¨® desierto tras motivar una huelga de tres d¨ªas. Ese contrato preve¨ªa dejar de recoger los residuos en domingos y festivos, medida que ha sido aparcada al menos un a?o.
>> Cuentas. Gallard¨®n gast¨® en obras 9.800 millones de euros entre 2003 y 2011. Quedan por pagar 6.641 millones. ¡°Nos hemos comido parte del futuro de la siguiente generaci¨®n, tenemos que hacer la digesti¨®n lo m¨¢s r¨¢pido posible¡±, explic¨® hace d¨ªas Botella, que jam¨¢s ha se?alado de forma directa a su predecesor. Lo m¨¢s r¨¢pido posible significa que dentro de 10 a?os la ciudad a¨²n deber¨¢ 1.600 millones. La deuda de Madrid no es desmesurada si se compara con su capacidad para generar ingresos o se divide por el n¨²mero de habitantes. Le superan de largo todas las autonom¨ªas, el Estado y decenas si no cientos de ciudades de todo color pol¨ªtico. Pero la prohibici¨®n del anterior Gobierno (PSOE) de aplazar su pago y la imposici¨®n del actual (PP) de abonar de una tacada las facturas pendientes a proveedores ha asfixiado las cuentas municipales, obligando a aprobar varios planes de ajuste sucesivos que han dejado la ciudad funcionando al ralent¨ª.
>> Desahucios. Botella ha finiquitado la construcci¨®n de vivienda protegida; y ha aprobado la venta de cuatro bloques alquilados a personas de escasos recursos (en su mayor¨ªa, ancianos), diseminando a 120 familias por otros barrios. Ha querido vender adem¨¢s varios edificios oficiales, en su mayor parte sin ¨¦xito por falta de compradores.
>> Eurovegas. El Ayuntamiento parece haberse salido con la suya: el proyecto de Sheldon Adelson se construir¨¢ presumiblemente en Alcorc¨®n (o Paracuellos), y la capital se ver¨¢ beneficiada por la creaci¨®n de empleo sin perdonar impuestos.
>> Fiesta de Halloween. La muerte de cinco j¨®venes en el pabell¨®n Madrid Arena oblig¨® a dimitir al edil Pedro Calvo, tiene al albur de la investigaci¨®n del juez a varios miembros m¨¢s del Gobierno local, y ha dejado muy tocada la imagen de la alcaldesa, que decidi¨® marcharse apenas horas despu¨¦s de la tragedia a un balneario portugu¨¦s. La ciudad va de sobresalto en sobresalto por las actuaciones municipales para ponerse al d¨ªa en materia de seguridad tras a?os de laxitud administrativa.
>> Gonz¨¢lez. La exigua tregua de nueve meses en las batallitas diarias de Comunidad y Ayuntamiento se diluy¨® cuando Aguirre, amiga de Botella, cedi¨® el Gobierno regional a Ignacio Gonz¨¢lez. Entraron alcaldesa y presidente con mal pie por la falta de respaldo expreso de ella a las aspiraciones de ¨¦l de heredar tambi¨¦n el liderazgo del PP regional. Botella le peg¨® una patada al tablero al respaldar con su firma las protestas del sector sanitario contra Gonz¨¢lez. La Comunidad respondi¨® neg¨¢ndole el pan y la sal tras la tragedia del Madrid Arena, una estrategia (m¨¢s defensiva que otra cosa) a la que se sum¨® la tercera autoridad en discordia, la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes.
>> Incendio de la M-30. Los tres sucesos se encadenaron en apenas un mes: el 21 de septiembre, los altercados en el festival MTV (60 heridos y 11 detenidos), que el Ayuntamiento admiti¨® no haber sido capaz de evitar; el 26 de octubre, un fuego en los t¨²neles de la M-30 que cost¨® la vida a dos trabajadores y desnud¨® graves carencias de seguridad; y el 1 de noviembre, el Madrid Arena.
>> Juegos Ol¨ªmpicos. Botella ha mantenido con la cabeza muy fr¨ªa (y menguante respaldo ciudadano) la aventura sentimental en la que Gallard¨®n meti¨® a Madrid en tres ocasiones. Presume de no gastar apenas dinero (aunque la partida ol¨ªmpica superar¨¢ el gasto en polideportivos en 2013) hasta saber el desenlace en septiembre. Entre tanto, la mudanza del Atl¨¦tico de Madrid a La Peineta est¨¢ en el aire por decisi¨®n judicial; y la Caja M¨¢gica (que cost¨® casi 300 millones) ha vuelto a quedarse sin inquilinos tras ponerse a los pies del equipo de F¨®rmula 1 HRT, ahora en liquidaci¨®n. S¨®lo se ha salvado la ampliaci¨®n el Santiago Bernab¨¦u.
>> Las Artes. El responsable de la cultura municipal, Fernando Villalonga, lleg¨® en enero despotricando sobre supuestas corruptelas del equipo anterior, de la m¨¢xima confianza de Gallard¨®n, y ha terminado el a?o con un expediente de regulaci¨®n de empleo abortado a ¨²ltima hora tras fuertes protestas sindicales. Entre tanto, ha prometido poner patas arriba la cultura de Madrid, sin apenas propuestas concretas a excepci¨®n de cubrir la falta de dinero con patrocinios privados.
>> M¨²sica. El precio de las escuelas municipales de m¨²sica se ha triplicado, expulsando a muchos alumnos. Pero tambi¨¦n han subido los parqu¨ªmetros, el IBI, polideportivos y talleres culturales...
>> Negro. De luto se vistieron los funcionarios municipales por los recortes salariales del Gobierno. El Ayuntamiento ha hecho equilibrios para tocar lo menos posible su sueldo, y las protestas no han sido notables. Pero queda pendiente la restructuraci¨®n de organismos y empresas municipales, que tienen 3.500 empleados. La alcaldesa se ha cuidado de negar que vaya a haber despidos.
>> Prostitutas. Botella prometi¨® un plan social contra la prostituci¨®n que lleva meses congelado. Prepara tambi¨¦n una ordenanza para regular esa y otras materias de convivencia (mendicidad, gorrillas, acampadas en la calle). Promete no multar a los meretrices, como propugna el Gobierno.
>> Quioscos. Botella renov¨® la concesi¨®n de los puestos de El Retiro entre protestas de los empresarios que llevaban d¨¦cadas explot¨¢ndolos. Quiso hacer lo propio con la terraza del caf¨¦ Gij¨®n, pero en esta ocasi¨®n la presi¨®n social s¨ª permiti¨® conservar el negocio a sus due?os. Ha prometido sembrar de terrazas las plazas del centro y del ¨¢rea de las cuatro torres. En Sol, el Ayuntamiento prometi¨® adem¨¢s ¨¢rboles por encima de sus posibilidades.
>> Real. La Ca?ada sigue esperando un plan regional que deb¨ªa estar listo en septiembre y del que nada se sabe a¨²n, a cinco meses de que venza el plazo impuesto por Aguirre para solucionar el tema con consenso. Botella, por su parte, no ha logrado avanzar en El Gallinero, y ha dejado a su suerte Puerta del Hierro.
>> Social. Prometi¨® no recortar en servicios sociales, y aunque lo ha hecho (escondiendo el grueso del ajuste en la atenci¨®n directa de los distritos), s¨ª ha protegido esa partida.
>> Trabajo. Gallard¨®n gan¨® las elecciones en junio de 2011 con la promesa de impulsar la creaci¨®n de 150.000 empleos. Desde entonces, s¨®lo se ha destruido empleo. Con Botella se han sumado 27.100 personas a la cola del paro (ya son los 254.700), a un ritmo superior que en el resto del pa¨ªs. Casi 95.000 llevan dos a?os sin trabajo, y 127.776 no reciben prestaciones, seg¨²n denuncia el l¨ªder municipal socialista, Jaime Lissavetzky.
>> Urbanismo. Su gran proyecto, el nuevo plan general, no ver¨¢ la luz hasta 2015, pero antes deber¨¢ solventar el rev¨¦s judicial a las artima?as legales de Gallard¨®n, que ha dejado en el aire la mayor parte del crecimiento de la ciudad en la ¨²ltima d¨¦cada. La inversi¨®n en infraestructuras est¨¢ paralizada, y con ella las peatonalizaciones. S¨®lo se ha salvado el carril bici del centro.
>> Voluntarios. Su primera bofetada. Botella nunca ha explicado si su apuesta por colocar a voluntarios en puestos que corresponden a funcionarios fue un desliz dial¨¦ctico o una idea pol¨ªtica abortada por el esc¨¢ndalo.
>> Taxi. El Ayuntamiento ha renovado la vetusta ordenanza del sector: tarifa fija al aeropuerto, ESO obligatoria para los nuevos conductores... La norma discrimina a los enfermos de sida. A ¨²ltima hora, se cay¨® la prohibici¨®n de usar chanclas en verano.
>> ZPAE. Botella ha aprobado una norma para reducir el ruido de bares y restaurantes en el centro que no ha gustado ni a vecinos ni a hosteleros. Adem¨¢s, presume de un recorte del 11% en las emisiones contaminantes de los coches, aunque el veredicto corresponde a la UE.
Lo que ha sucedido este a?o
Diciembre. Ana Botella (PP) tom¨¢ posesi¨®n el 27 de diciembre de 2011 de un Ayuntamiento hipotecado por la enorme deuda heredada de los ocho a?os de Gobierno municipal de Alberto Ruiz-Gallard¨®n (PP). Pierde adem¨¢s a los pilares pol¨ªticos del anterior alcalde: Manuel Cobo, vicealcalde (que se retira a un segundo plano pol¨ªtico); y Juan Bravo, concejal de Hacienda (que marcha como subsecretario de Gallard¨®n en el Ministerio de Justicia).
En su primer discurso, Botella refrenda el proyecto ol¨ªmpico, promete austeridad y pone el ¨¦nfasis en los servicios a los m¨¢s desfavorecidos. Coloca como vicealcalde a Miguel ?ngel Villanueva, hasta entonces responsable de Econom¨ªa, y crea una super¨¢rea de Medio Ambiente, Movilidad y Seguridad que concentra la mitad del gasto municipal. Adem¨¢s, recorta altos cargos.
Enero. El Ayuntamiento elimina la mayor¨ªa de cabalgatas de distrito por falta de fondos y para potenciar el desfile central. En la Ca?ada Real, propone regularizar una parte y derribar el resto. La contaminaci¨®n sigue por encima de los l¨ªmites legales, pero pese a ello se niega a adoptar medidas que restrinjan el tr¨¢fico. En su primera reuni¨®n con Esperanza Aguirre, Botella se muestra prudente ante el entusiasmo de la presidenta regional por Eurovegas.
A final de mes se enfrenta a su primera crisis, al desvelar EL PA?S que funcionarios del ¨¢rea de Movilidad empleaban para fines privados los veh¨ªculos municipales para reparar sem¨¢foros, que les serv¨ªan de coche oficial, seg¨²n admite el concejal Pedro Calvo. Adem¨¢s, provoca esc¨¢ndalo su petici¨®n de voluntarios para sustituir el trabajo de funcionarios en las bibliotecas municipales.
Febrero. Se desvela el logotipo de la candidatura de Madrid 2020, entre cr¨ªticas y preocupaci¨®n por la falta de apoyo ciudadano. Adem¨¢s, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid bloquea la Operaci¨®n Calder¨®n y, por ende, la construcci¨®n del estadio ol¨ªmpico de La Peineta, lo que enfrenta por primera vez a Aguirre y Botella; finalmente, la alcaldesa recurre al Tribunal Supremo. La capital presenta su informe t¨¦cnico al Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, que prev¨¦ m¨¢s de 1.500 millones de gasto y cuatro nuevas estaciones de metro; la contaminaci¨®n, el dopaje y el terrorismo lastran la candidatura.
El Ayuntamiento alquila la Caja M¨¢gica por cinco a?os al equipo de f¨®rmula 1 HRT, que apenas dura como inquilino hasta final de a?o. Y renueva las concesiones de los quioscos de El Retiro entre grandes protestas. Aprueba un plan de calidad del aire que sube los parqu¨ªmetros, y un plan de protecci¨®n ac¨²stica para reducir el ruido en el centro de la ciudad. Adem¨¢s, sufre carcoma en el flamante centro cultural Conde Duque.
El Gobierno central aprueba el primer plan de ajuste municipal, lo que le permite ponerse al d¨ªa en el pago a proveedores, con los que acumulaba una deuda comercial de m¨¢s de 1.000 millones de euros. El vicealcalde promete que no se subir¨¢n los impuestos, algo que ocurrir¨¢ en apenas diez meses. Adem¨¢s, el Tribunal Supremo sentencia que el encarecimiento de las multas de 2005 fue ilegal. Los salvavidas del Gobierno central permiten sin embargo sobrevivir econ¨®micamente al Ayuntamiento, que acomete recortes sociales.
Marzo. Botella ficha a Natalio Grueso, exdirector del Niemeyer, para la programaci¨®n cultural de Madrid; Mario Gas abandona el Teatro Espa?ol. La contaminaci¨®n sigue desbocada, y el Gobierno municipal pide una moratoria a la Uni¨®n Europea para cumplir los l¨ªmites legales. El Ayuntamiento se enfrenta a la Comunidad por la privatizaci¨®n del Canal de Isabel II, que motiva incluso una consulta popular. Se producen derribos en el poblado chabolista de El Gallinero, que queda excluido del plan para la Ca?ada Real.
La recesi¨®n noquea las cuentas municipales. Madrid aprueba recortar gastos y subir impuestos para ajustar sus cuentas. Botella congela al menos dos a?os las peatonalizaciones previstas, empieza a privatizar polideportivos municipales, y rebaja un 60% el presupuesto de los festejos de barrio. La justicia paraliza el acuerdo del Real Madrid y el Ayuntamiento sobre el estadio Santiago Bernab¨¦u. Arrecian los enfrentamientos en Lavapies entre vecinos y polic¨ªa. Se proh¨ªbe abrir m¨¢s bares en el centro de la ciudad. La NASA capta la contaminaci¨®n lum¨ªnica.
Abril. Catalu?a y Madrid se disputan Eurovegas, y la capital toma ventaja por las barreras urban¨ªsticas en Barcelona. El Ayuntamiento contabiliza a medio millar de 'sin techo' durmiendo en las calles. El Tribunal Supremo anula la tasa de vados. La ciudad avanza a pedales hacia una normativa para la circulaci¨®n de bicicletas. Botella cumple cien d¨ªas al frente del Ayuntamiento, que contrata a dedo como asesora a una hermana de Aguirre.
Madrid estudia crear nuevos aparcamientos de residentes y convertir plazas azules en parkings disuasorios. El Tribunal Supremo ratifica la prohibici¨®n de los coches-anuncio. La alcaldesa decide usar el transporte p¨²blico en algunos de sus desplazamientos de trabajo. El Ayuntamiento dise?a un parque en la azotea del nuevo polideportivo y el centro comercial de La Cebada, y da luz verde a convertir la Casa de la Carnicer¨ªa en un hotel de lujo. Prepara adem¨¢s su mayor operaci¨®n de venta de inmuebles municipales. Botella entrega la medalla de honor de la ciudad a Gallard¨®n.
Mayo. El Ayuntamiento revisa el anterior plan urban¨ªstico y admite el error de 15 a?os de crecimiento basado solo en el ladrillo. Madrid 2020 pasa el primer corte en cabeza, seguida de Estambul y Tokio. Sin embargo, el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional duda de que Espa?a pueda invertir 1.900 millones en los Juegos. Botella recorta el presupuesto para las actividades deportivas municipales sin tocar los fondos de la candidatura. No son los ¨²nicos ajustes, que afectan incluso a la lucha contra el desempleo y a los servicios sociales. Los recortes paralizan adem¨¢s la apertura de un teatro y un museo y terminan con la Noche en Blanco. Se aplaza la rehabilitaci¨®n de la calle Atocha por falta de dinero. Los recortes llegan incluso a los m¨¦dicos de los polideportivos. Y no se descartan m¨¢s. Prosiguen entre tanto las protestas de los empleados municipales por los recortes, bautizadas ya como marea negra.
La alcaldesa rechaza las propuestas de la oposici¨®n para combatir la contaminaci¨®n. La Defensora del Pueblo se?ala al Ayuntamiento por el mal olor del PAU de Vallecas, y este responde que las emisiones han bajado un 80%. Desmantela adem¨¢s un huerto urbano de vecinos pese a no tener planes para ese solar. Los padres de alumnos del colegio de San Ildefonso protestan por la mudanza forzada por el mal estado de conservaci¨®n del centro, que terminar¨¢ por paralizarse.
Junio. Botella realiza una desastrosa intervenci¨®n en el debate sobre el estado de la ciudad, lastrada por la inexperiencia y el legado de Gallard¨®n. En materia social, promete 200 viviendas a familias desahuciadas, y muestra su oposici¨®n a multar a las prostitutas. Anuncia que el Ayuntamiento dejar¨¢ de ofrecer electricidad gratis a los coches ecol¨®gicos a partir de 2013 y que estudia aprobar tasas para modelar el paisaje urbano. La Fiscal¨ªa se querella por las obras sin licencia del Hip¨®dromo de la Zarzuela, prosiguen las protestas de los quiosqueros de El Retiro, y los vecinos salen a la calle contra el nuevo crematorio de Carabanchel. La retirada del cartel de T¨ªo Pepe en la puerta del Sol provoca un gran revuelo ciudadano. El Ayuntamiento pide adem¨¢s cuentas al Athletic de Bilbao y al FC Barcelona por los destrozos en la Copa del Rey.
Botella y Aguirre limitan la primera fase del proceso de eliminaci¨®n de duplicidades a centros de mayores y de drogadictos. El Ayuntamiento anuncia que relajar¨¢ la protecci¨®n de edificios antiguos para permitir su rehabilitaci¨®n, para dinamizar la ciudad. Adem¨¢s, pone a la venta m¨¢s bloques para hacer caja. Se presenta un reglamento de uso de los polideportivos que impone multas de 750 euros por comer un bocata o poner m¨²sica en la piscina, y se aprueba la celebraci¨®n de bodas los s¨¢bados en recintos municipales. Botella plantea que el cami¨®n de la basura deje de pasar los domingos, aunque finalmente no podr¨¢ llevar a cabo sus planes.
Julio. Se celebra el Orgullo Gay, y el Ayuntamiento lo multa por exceso de ruido. Botella anuncia los primeros despidos, pese a que los funcionarios municipales trabajar¨¢n m¨¢s horas y cobrar¨¢n menos; es increpada en la calle por ello. Alemania retira una placa nazi defendida por el Ayuntamiento. Suben los parqu¨ªmetros.
La justicia levanta la paralizaci¨®n del acuerdo sobre el Santiago Bernab¨¦u, y el Ayuntamiento aprueba la remodelaci¨®n del estadio. Se secan la mayor parte de las fuentes ornamentales para ahorrar. Se presenta la nueva ordenanza del taxi, que prev¨¦ una tarifa fija para desplazamientos al aeropuerto; y el reglamento para los polideportivos, que plantea reducir su horario de apertura. Botella evita imponerse una reducci¨®n de muertos por atropellos.
El nuevo plan general urban¨ªstico plantea convertir para 2030 Madrid en una ciudad de bulevares. Las algas ti?en de verde el r¨ªo Manzanares. Las protestas por el crematorio de Carabanchel llegan a los juzgados. Un juez censura la "desproporcionada" actuaci¨®n contra El Gallinero, y la Comunidad promete para septiembre un plan urban¨ªstico y social de la Ca?ada Real, promesa que ha incumplido hasta la fecha.
La Uni¨®n Europea pone bajo vigilancia la boina de contaminaci¨®n sobre la capital. A Madrid no le salen las cuentas ol¨ªmpicas, y paga las facturas con a?os de retraso.
Agosto. La crisis dispara las diferencias entre distritos en desempleo y desahucios. Madrid 2020 se aprieta el cintur¨®n. El caf¨¦ Gij¨®n salva su terraza, y con ella su futuro. La Polic¨ªa Municipal impone 2.345 multas en el primer mes contra el botell¨®n. Los bomberos abuchean a Botella en las fiestas de la Paloma. El Ayuntamiento asegura que ha ofrecido vivienda a una ni?a de 6 a?os que Amnist¨ªa Internacional denuncia que duerme en la calle en un poblado chabolista. La Defensora del Pueblo pide informaci¨®n al respecto.
Septiembre. Sheldon Adelson elige a Madrid frente a Barcelona para instalar Eurovegas, una inversi¨®n que a¨²n se disputan Alcorc¨®n, la capital y Paracuellos-Torrej¨®n; y que cuestiona el futuro de Ifema. Botella prepara una norma para regular la prostituci¨®n y la mendicidad en la calle, que tambi¨¦n afectar¨¢ a acampadas, 'gorrillas' y 'lateros'. Madrid 2020 sigue remando a contracorriente. Surgen nuevas sombras de corrupci¨®n en el ¨¢rea de Las Artes.
El paro crece en la capital m¨¢s r¨¢pido que en la regi¨®n y en el resto del pa¨ªs. Botella intensifica un 27% su recorte en servicios municipales, rebaja hasta un 39% el precio de seis edificios al no encontrar comprador, y triplica el precio de las 13 escuelas municipales de m¨²sica y danza. De esos seis edificios, s¨®lo lograr¨¢ vender uno.
La justicia permite a las discotecas colocar terrazas en la calle. Una pelea multitudinaria revienta el festival musical de la MTV y pone en cuesti¨®n la actuaci¨®n de la Polic¨ªa Municipal. El Ayuntamiento acaba por reconocer sus errores. Botella insin¨²a que el Gobierno autoriza demasiadas manifestaciones y pide que saque las protestas del centro. Asociaciones, arquitectos y religiosos presentan un proyecto para El Gallinero para cubrir el vac¨ªo municipal.
Octubre. El Ayuntamiento liquida la construcci¨®n de vivienda protegida en Madrid. El Tribunal Supremo tumba los desarrollos urban¨ªsticos de la capital. Adelson visita la capital, anuncia que ya tiene el dinero para Eurovegas y se re¨²ne con Mariano Rajoy en La Moncloa.
El Ayuntamiento aboga por permitir m¨²sica en los bares y restaurantes. Adem¨¢s, se plantea poner una terraza en Sol, aunque no ¨¢rboles, y tambi¨¦n en Callao y bajo las cuatro Torres. Adem¨¢s, se plantea un ¨²ltimo intento de salvar el faro de Moncloa. Madrid 2020 sigue perdiendo apoyo ciudadano. Una decena de ediles del PP se ausenta de la votaci¨®n para dar una calle a Carrillo.
Botella mantiene la subida de impuestos pese a recibir m¨¢s dinero del previsto. El Club de Campo olvida sin embargo pagar el IBI. La nueva ordenanza del taxi incluye la prohibici¨®n de llevar ch¨¢ndal o sandalias, la obligaci¨®n de tener la ESO, y una cl¨¢usula discriminatoria contra los enfermos de sida. Dos trabajadores mueren en el incendio de una instalaci¨®n el¨¦ctrica de la M-30, que destapa graves fallos de seguridad.
Noviembre. Cinco chicas de 17 a 20 a?os mueren aplastadas en la fiesta de Halloween del pabell¨®n municipal Madrid Arena. El organizador, Miguel ?ngel Flores, es imputado por el juez, que sospecha que duplic¨® el aforo de 10.600 personas. La alcaldesa, Ana Botella (PP), aprueba con muchas cortapisas una comisi¨®n de investigaci¨®n en la que la oposici¨®n denuncia fallos de seguridad. El Ayuntamiento lo niega, pero impulsa cambios normativos y operativos. El concejal Pedro Calvo dimite tras ser imputado como responsable de alquilar el pabell¨®n. Botella y el nuevo presidente regional, Ignacio Gonz¨¢lez, se enfrentan por el Madrid Arena y el plan de privatizaci¨®n de la sanidad p¨²blica. El incremento de la seguridad pone en peligro la celebraci¨®n del rastrillo Nuevo Futuro.
El Gobierno municipal presenta sus presupuestos para 2013, que recortan al m¨¢ximo el gasto en servicios y suben los impuestos. Estos ajustes dejan al Ayuntamiento funcionando al ralent¨ª. Botella desaloja a 120 familias para vender sus pisos a una empresa y hacer caja. Huelga de tres d¨ªas de la recogida de basuras. Las protestas por el despido de empleados p¨²blicos afectan a la programaci¨®n cultural del Ayuntamiento e incluso se suman a ella espectadores.
Diciembre. La sacudida del Madrid Arena alcanza a eventos en m¨¢s recintos municipales y a las macrofiestas navide?as. El Ayuntamiento adelanta o veta las cabalgatas de distrito por falta de Polic¨ªa Municipal. Botella no logra sacar adelante su nuevo contrato de basuras, que preve¨ªa dejar de recoger los residuos en domingos y festivos. Sigue adelante el plan para vender los edificios con inquilinos de alquiler social.
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