Sagnier por dentro

Enric Sagnier (1858-1931) fue el arquitecto m¨¢s prol¨ªfico, no solo de su ¨¦poca, sino de toda la historia de Catalu?a y sin embargo durante d¨¦cadas su extensa y elegante obra fue eclipsada por la de sus c¨¦lebres contempor¨¢neos, empezando por Gaud¨ª. ¡°Los que hacemos historia, no hacemos justicia: Sagnier es el que tiene m¨¢s edificios y menos espacio en las historias de la arquitectura¡±, asegur¨® el historiador del arte Daniel Giralt-Miracle en la presentaci¨®n de un libro, cuyo prop¨®sito es situar el arquitecto en el lugar que se merece.

La lujosa publicaci¨®n, Sagnier Architect, recoge las im¨¢genes captadas en los interiores de los siete edificios, que mejor explican y condensan su trabajo, por la fot¨®grafa alemana Candida H?fer (Eberswalde, 1944), seguidora y a la vez innovadora interprete de la corriente alemana de la nueva objetividad. El libro completa una trilog¨ªa realizada gracias a la voluntad del nieto del arquitecto, Antoni Sagnier, por dar a conocer la obra de su abuelo: casi 500 edificios catalogados hasta la fecha. ¡°Al d¨ªa de hoy es el arquitecto que tiene m¨¢s construcciones en Barcelona¡±, asegur¨® Santi Barjau, el historiador que con su tesis doctoral encendi¨® el inter¨¦s de Sagnier nieto y le convenci¨® de la necesidad de reivindicar al arquitecto y darle a conocer universalmente.

El proyecto arranc¨® en 2007 con la publicaci¨®n de la tesis de Barjau en forma de libro profusamente ilustrado, que re¨²ne todas las obras conocidas de Sagnier, en Barcelona y tambi¨¦n Valencia, Madrid y San Sebasti¨¢n. ¡°Sabemos que con sus planos se construy¨® un convento en Australia y tenemos referencias de que tambi¨¦n hay obras suyas en M¨¦xico y Cuba¡±, indic¨® Antonio Sagnier. Con aquel libro, que ahora se encuentra en bibliotecas, universidades y casas de 103 ciudades de 29 pa¨ªses, y con una versi¨®n m¨¢s manejable y did¨¢ctica, pensada para los visitantes, titulada Ruta Sagnier, consigui¨® rescatar la memoria del autor de joyas arquitect¨®nicas, como el Palacio de Justicia, la Aduana, la iglesia del Sagrado Coraz¨®n y la casa Garriga-Nogu¨¦s, sede de la Fundaci¨®n Godia, que acogi¨® la presentaci¨®n.

La foto de portada, la biblioteca de la iglesia de Pompeia en la avenida Diagonal (un lugar casi desconocido), resulta emblem¨¢tica del estilo de H?fer. Sus fotograf¨ªas son n¨ªtidas, precisas, homog¨¦neas y detalladas, nunca hay personas, pero al ser entornos habitualmente v¨ªvidos mantienen la sensaci¨®n y memoria de la presencia humana. No utiliza escenograf¨ªa, ni focos a?adidos o manipulaciones digitales. Su secreto consiste en equipos de alta calidad y tiempos de exposici¨®n largu¨ªsimos, que permiten fijar todos los detalles y obtener la sensaci¨®n de que todos los elementos est¨¢n ba?ados por la misma luz cenital.

Antonio Sagnier sabe que H?fer es una artista cotizada internacionalmente y que este libro dar¨¢ una nueva perspectiva a la obra de su abuelo y por ello lo ha publicado en ingl¨¦s, con traducciones al catal¨¢n y castellano. Pronto lanzar¨¢ tambi¨¦n una web en estos tres idiomas, m¨¢s chino, japon¨¦s y, en cuanto los recursos lo permitan, ruso. En el marco de ese plan de recuperaci¨®n, recientemente el Ayuntamiento dio el nombre de Sagnier al jard¨ªn situado entre las calles de Brusi y Cop¨¦rnico, donde se encuentra la casa natal del arquitecto y que de hecho era su jard¨ªn.