Una huelga deja sin comedor escolar a cientos de ni?os en C¨¢diz

Los alumnos de 40 colegios de la provincia de C¨¢diz se han quedado sin comedor escolar por la huelga de transportistas de la empresa Brassica Group, que ha provocado que los alimentos no lleguen a tiempo a los centros escolares. El paro, con car¨¢cter indefinido, ha obligado a los progenitores a improvisar soluciones para recoger antes de lo previsto a sus hijos. Colegios, empresa y Junta de Andaluc¨ªa buscan una soluci¨®n. La huelga est¨¢ motivada en los impagos de las tres ¨²ltimas n¨®minas. La compa?¨ªa aduce problemas de liquidez, derivados de los retrasos en los pagos de la administraci¨®n auton¨®mica.

Los padres han sido avisados por tel¨¦fono y carteles desde temprano por las administraciones de los colegios tras confirmarse que a las cocinas de los centros escolares no hab¨ªan llegado los alimentos para preparar los men¨²s. La huelga estaba avisada desde antes del final del a?o pasado, pero se confiaba en el abono de unos pagos pendientes de la Junta de Andaluc¨ªa para poder abonar las n¨®minas. ¡°El pago se ha producido pero a nosotros no nos ha llegado el dinero y no hemos podido pagar a los trabajadores. Puede ser que Hacienda haya retenido el dinero que nosotros le adeud¨¢bamos¡±, ha explicado el consejero delegado de Brassica, Manuel Garc¨ªa Gallardo.

Los problemas econ¨®micos de Brassica, con 1.500 trabajadores y servicios en toda Espa?a, se agravaron en 2012 cuando los pagos de las administraciones se fueron dilatando en el tiempo. ¡°La Junta de Andaluc¨ªa debe pagarnos en 30 d¨ªas y se ha llegado a 240 d¨ªas¡±, detalla Garc¨ªa Gallardo. El problema es incluso m¨¢s grave en otras comunidades como Valencia, donde Brassica sirve centros de menores o de ancianos. All¨ª el retraso se ha elevado por encima del a?o. ¡°Lo que no tenemos es liquidez. Si llegara el dinero, podr¨ªamos ponernos al d¨ªa¡±. Garc¨ªa Gallardo ha cifrado en dos millones de euros las deudas de la administraci¨®n andaluza.

Los empleados de la log¨ªstica, hartos de trabajar y no cobrar, amenazaron con esta huelga que desde este martes, con la reanudaci¨®n del curso escolar han hecho efectiva. No volver¨¢n al trabajo mientras no reciban sus sueldos. La situaci¨®n se puede agravar si este viernes, como han anunciado, a los paros se suman las monitoras de comedor. De momento, y para paliar las situaciones imprevistas de la primera jornada de huelga, algunos padres han pedido que los ni?os se queden m¨¢s tiempo hasta que los puedan recoger, algo que no se podr¨¢ hacer cuando las monitoras no est¨¦n. Los directores de los centros se han planteado comprar comida en el exterior para atender estos casos puntuales. Abuelos, t¨ªos, amigos y permisos en los trabajos han sido las soluciones buscadas por el resto de progenitores.

La Junta argumenta que a finales de a?o s¨ª ha pagado parte de lo que debe a Brassica, aunque ese dinero no ha podido servir para atender las n¨®minas porque lo ha retenido el Estado. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n podr¨ªa rescatar el servicio por incumplimiento de contrato si no se alcanza una soluci¨®n urgente.

Brassica argumenta que sus problemas financieros han venido derivados de los incumplimientos de las administraciones. Tambi¨¦n atend¨ªa comedores militares, pero los recortes del Ministerio de Defensa dejaron sin efectos esos contratos el a?o pasado, con lo que la compa?¨ªa tuvo que asumir a 200 trabajadores de plantilla, que agravaron la situaci¨®n econ¨®mica.

Asociaciones de padres y madres han recordado que llevan denunciando desde hace algunos meses un significativo empeoramiento de los men¨²s que serv¨ªa Brassica en el colegio.