Las pel¨ªculas de Mars¨¦

Hace dos d¨ªas, este martes 8 de enero, Juan Mars¨¦ ha cumplido los ochenta. Le vi el d¨ªa primero del a?o al cruzarme con ¨¦l y su esposa y saludarles en la calle Bail¨¦n, donde viven. No s¨¦ para cu¨¢ndo saldr¨¢ su nuevo libro, esperado como todos los suyos y escrito sin prisas como todos los suyos, un libro que por lo que ¨¦l mismo ha dicho dar¨¢ una vuelta de tuerca m¨¢s al relato de su infancia, ahora en clave de la propia biograf¨ªa. Su hija Berta, asimismo escritora, habl¨® hace ya un tiempo de una nueva novela de t¨ªtulo Aquel muchacho, esta sombra,que empieza as¨ª: ¡°Recuerda ahora a su padre de pie en el herrumbroso balc¨®n que ha dejado atr¨¢s¡±. Una frase de estirpe cinematogr¨¢fica, capaz en ocho palabras escogidas (el resto son obligadas) de incluir presente, pasado lejano y pasado reciente. A la espera del libro y en ocasi¨®n de este aniversario, la Filmoteca programa, del 22 de enero al 28 de febrero, seis filmes para celebrar los 80 a?os del escritor, escogidos por ¨¦l.

No las presentar¨¢ en directo, le cuesta salir de casa y hablar en p¨²blico, ya saben que no suele aparecer por la tele ni por la radio. No ha sucumbido a la tentaci¨®n medi¨¢tica, no se ha adaptado a ella ni siquiera a cambio de los dones ciertos o inciertos que la tal tentaci¨®n ofrece. Algunos de sus lectores lo lamentan, pero ¨¦l est¨¢ convencido de que no da bien en c¨¢mara. Ya ver¨¢n ustedes en la Filmo que no es as¨ª.

Presentar¨¢ las pel¨ªculas convertido ¨¦l mismo en cine, ese arte que nos ha ense?ado a ver primeros planos y prescindir de lo accesorio. Expondr¨¢ las razones por las que ha escogido el filme en una grabaci¨®n previa al pase. Y este 23 de enero le oiremos hablar de cine con Augusto M. Torres, en el estreno de Juan Mars¨¦ habla de Juan Mars¨¦, una conversaci¨®n reciente de hora y media filmada en su despacho.

Tambi¨¦n llevo yendo al cine desde el vientre materno. En nuestro caso no somos nativos digitales, somos nativos cinematogr¨¢ficos. As¨ª parece entenderlo tambi¨¦n ¨¦l, pues la peli m¨¢s antigua escogida le lleva dos a?os, City ligths, de Charlot.

A disgusto con las versiones cinematogr¨¢ficas de sus novelas, s¨®lo ha incluido una obra teatral adaptada. Es dif¨ªcil describir qu¨¦ gana un libro con una buena pel¨ªcula, est¨¢ m¨¢s claro qu¨¦ pierde en una adaptaci¨®n fallida. Puede que las ganancias sean las sorpresas visuales del movimiento condensado que ni tu mismo sabes que el libro encierra, aunque la trama se aligere. Mi impresi¨®n es que Mars¨¦ habr¨ªa sido un buen guionista, no necesariamente de sus libros, un guionista como lo ha sido Modiano cuando se ha puesto. El parisino tiene bastante de marseano (suena a marciano, ya veo, pero para mi bastantes cosas se describen as¨ª, son marseanas). Aunque Modiano, tan intenso, no alcanza uno de los logros de Mars¨¦, trazar con pintura al fuego el mapa urbano de posguerra, que en el autor franc¨¦s acaba siendo una combinaci¨®n de nebulosa y paradoja: los nombres de las calles situan la ciudad colaboracionista y al tiempo esconden sus lugares concretos de impiedad y porquer¨ªa. La Barcelona de Mars¨¦ se reconoce, el Par¨ªs de Modiano no. Asunto de padres, quiz¨¢. Pap¨¢ Modiano fue un colaborador; el de Mars¨¦, no, y adem¨¢s tuvo dos, pero eso tal vez lo contar¨¢ en su nuevo libro, cuando sea que lo podamos leer, esperemos que pronto.

?Qu¨¦ pelis ha escogido? Aventuras (aventis, como dice ¨¦l) de gran aliento como, por orden de proyecci¨®n, El ladr¨®n de Bagdad de Michael Powell, Tim Whelan y Ludwig Berger (1940), Luces de la ciudad de Chaplin (1931), Encadenados de Hitchcock (1946), To be or not to be de Lubistch (1942) y Luna nueva de Hawks (1940).

Y una m¨¢s. La pen¨²ltima y la m¨¢s reciente es Viridiana de Bu?uel, de 1961. Cuando la caridad est¨¢ sustituyendo al Estado del Bienestar, aplaudo a rabiar la elecci¨®n de esta nada complaciente f¨¢bula sobre una novicia y sus buenas intenciones. Triunf¨® en Cannes, provoc¨® la destituci¨®n del director general que recibi¨® el premio y fue prohibida de inmediato en Espa?a y proscrita por el Vaticano. Con ella Bu?uel lanzaba una bomba f¨ªlmica contra las pretensiones aperturistas del franquismo, algo que hoy nadie hace respecto de la democracia.

Per molts anys, Mars¨¦.

Merc¨¨ Ibarz es escritora