Los magos y el ¡®lobby¡¯ gallego
Amancio Ortega, fundador de Inditex, acaba de comprar tres inmuebles destacados en el paisaje urbano de Barcelona
Una de las razones ¨²ltimas de toda estrategia consiste en tener el control de lo que pueda venir despu¨¦s. Despu¨¦s de toda revoluci¨®n acostumbra a darse una reacci¨®n, del mismo modo que la ruptura puede acabar generando luego una a?oranza de continuidad. De Artur Mas, por su responsabilidad como presidente de la Generalitat, hay que suponer que al lanzarse a la epopeya del independentismo sin fecha fija sab¨ªa que pronto volver¨ªa a tener sobre la mesa la gesti¨®n de lo cotidiano: pagar la n¨®mina todos los meses, rehacer el ejecutivo auton¨®mico despu¨¦s de las elecciones, atender a las facturas de las farmacias o ir en el AVE con el presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, y el Pr¨ªncipe de Asturias. De forma aleatoria pero implacable, reaparecen temas pendientes o se suscitan novedades. Y no es conveniente olvidarse de lo que vendr¨¢ despu¨¦s.
La crisis est¨¢ erosionando el tejido econ¨®mico de la sociedad catalana, de un modo que contrasta con el bullicio navide?o en las pistas de esqu¨ª en Baqueira Beret. Seg¨²n el balance de 2012, la p¨¦rdida de empleos por cuenta propia ha descendido a Catalu?a por encima de la media espa?ola. S¨®lo en Barcelona, se han dado de baja 7.442 aut¨®nomos. Es un dato sombr¨ªo si consideramos que, dada la alta densidad del aut¨®nomo en la econom¨ªa catalana, ser¨ªa la peque?a empresa la que, de darse una mayor fluidez crediticia, debiera generar empleo. Nuevos empleos. La grave circunstancia del aut¨®nomo en Catalu?a, como en toda Espa?a, por ahora no tiene horizontes de recuperaci¨®n. Eso sigue as¨ª despu¨¦s de la manifestaci¨®n del 11-S ¡ªtan err¨®neamente interpretada por el nacionalismo¡ª, como en el mejor de los casos probablemente seguir¨ªa del mismo modo de darse el inicio, la refrendaci¨®n y la botadura de una Catalu?a separada del conjunto de Espa?a. Eso inquieta al empresariado catal¨¢n, acostumbrado a influenciar entre bastidores y a evitar confrontaciones abiertas con cualquier poder. Es el precio de la estabilidad como condici¨®n ineludible del crecimiento.
Por otra parte, la consolidaci¨®n impactante del lobby gallego en la econom¨ªa de Barcelona confirma una interdependencia que a veces el secesionismo minusvalora, desprecia o niega. Las din¨¢micas econ¨®micas no del todo previstas, como el boom hotelero de Barcelona, son las que exigen imaginaci¨®n y rigor por parte de quienes gestionan la econom¨ªa, p¨²blica y privada. Har¨ªan falta m¨¢s estrategias de anticipaci¨®n. Los ¨¦xitos del lobby gallego se explican en gran parte por el realismo del esfuerzo y la inteligencia de la anticipaci¨®n. No pocos empresarios de Barcelona expresan su sorpresa y admiraci¨®n por los logros actuales del lobby gallego y por su tenacidad t¨¢ctica. Tiene de dimensiones de implantaci¨®n desconocidas hasta ahora. Todo ese proceso ha ido germinando al margen de los altibajos pol¨ªticos, aunque siempre resulta m¨¢s confortable en un clima business friendly.
Por ejemplo, Amancio Ortega, fundador de Inditex, acaba de comprar tres inmuebles destacados en el paisaje urbano de Barcelona. Una inversi¨®n de 223 millones. La ¨²ltima adquisici¨®n es el edificio del BBVA ubicado en pleno centro simb¨®lico, en plaza? Catalunya: 13.875 metros cuadrados. En plaza Catalunya, Amancio Ortega hab¨ªa comprado antes la tienda de Apple, del mismo modo que en? paseo de Gr¨¤cia ya posee la sede de Burberry. En hosteler¨ªa, los avances del lobby gallego son espectaculares para la nueva Barcelona. Dif¨ªcilmente puede negarse que estos avances a veces contrastan con el tono lastimero y victimista de n¨²cleos rezagados del mundo empresarial catal¨¢n acostumbrados a mirar hacia el pasado. La burgues¨ªa que no fue. Ponerle puertas al campo. Desde?ar al reci¨¦n llegado. Pero lo fundamental es que las sinergias socio-econ¨®micas que se pueden dar saldr¨ªan al paso de una melancol¨ªa con master en macro-gesti¨®n. Incluso en plena crisis, hay margen para los buenos emprendedores. El realismo del esfuerzo frente al pesimismo m¨¢gico. Por azar o por necesidad, la literatura gallega abunda m¨¢s en magos que la literatura catalana.
Valent¨ª Puig es escritor
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