Recuperada una importante muestra de monedas robada a un coleccionista
La colecci¨®n, hallada en manos de un comprador de oro que las hab¨ªa adquirido ilegalmente Una de las piezas es de car¨¢cter exclusivo, ya que no existe ninguna otra copia en el mundo
La Brigada de Patrimonio Hist¨®rico de la Polic¨ªa Nacional ha recuperado una importante colecci¨®n de monedas imperiales datadas entre el siglo I antes de Cristo y el siglo I despu¨¦s de Cristo que conten¨ªa una pieza de la que solo existe un ¨²nico ejemplar conocido en el mundo. Toda la colecci¨®n fue hallada en manos de un comprador de oro que las hab¨ªa adquirido de forma ilegal tras haber sido sustra¨ªdas a un coleccionista haciendo un butr¨®n en su domicilio de Madrid, ha informado esta ma?ana el inspector jefe responsable de la investigaci¨®n.
El robo se produjo en una c¨¦ntrica vivienda de Madrid en abril de 2012, cuando los ladrones accedieron desde la azotea al piso del coleccionista, situado en una s¨¦ptima planta. Abrieron un agujero en el techo y reventaron una caja fuerte y un armario en el que se escond¨ªan 867 monedas de origen lusitano, c¨¢ntabro e ¨ªbero. La colocaci¨®n est¨¢ valorada en 600.000 euros.
El coleccionista denunci¨® los hechos en la comisar¨ªa del distrito Centro de Madrid, cuyos agentes pasaron las pesquisas a la Brigada de Patrimonio Hist¨®rico. En el asalto tambi¨¦n se llevaron joyas y una colecci¨®n de relojes de lujo de primeras marcas como Rolex y Patek Philippe.
La Brigada de Patrimonio Hist¨®rico colg¨® los datos de las principales monedas en su p¨¢gina web y pas¨® los datos tambi¨¦n a la Asociaci¨®n Nacional de Numism¨¢tica, dado que el coleccionista ten¨ªa im¨¢genes de cada una de las monedas sustra¨ªdas. De la inspecci¨®n ocular no se pudo sacar ning¨²n dato que permitiese determinar la autor¨ªa del robo.
El coleccionista hab¨ªa realizado dos semanas antes del robo unas obras en su casa. Los agentes interrogaron a los obreros, pero no pudieron esclarecer si estos ten¨ªan alguna vinculaci¨®n con el robo, aunque todo hac¨ªa suponer que as¨ª era. La alerta surgi¨® el d¨ªa 5 de diciembre, cuando en una sala de subastas de Barcelona una persona particular llev¨® 204 monedas para su tasaci¨®n y para la venta en p¨²blica subasta. El responsable de la sala, conocedor de que podr¨ªan ser las del robo de Madrid, alert¨® a Patrimonio Hist¨®rico de Barcelona, cuyo inspector jefe comprob¨® la veracidad de este extremo.
El vendedor fue localizado en Madrid como propietario de tres establecimientos de compraventa de oro en el centro de la capital. Cuando acudieron los agentes de la Brigada este les entreg¨® las piezas sustra¨ªdas en el robo. En ese momento fue detenido acusado de receptaci¨®n (comprar un objeto a sabiendas de que es robado). La polic¨ªa le interrog¨® e intent¨® detener a los autores del robo, pero este no dio ning¨²n detalle de qui¨¦nes pudieron ser.
El poseedor de las monedas tambi¨¦n las manipul¨® y estuvo a punto de causarles alg¨²n deterioro importante dado que lleg¨® a sumergirlas en botes con aceite y productos qu¨ªmicos. En el momento en que fueron mostradas a su leg¨ªtimo propietario, este pidi¨® a los agentes que las sacara de inmediato de esos recipientes y que las limpiaran ya que podr¨ªan ser da?adas de forma irreversible. En las investigaciones tambi¨¦n han participado agentes de la Brigada provincial de Polic¨ªa Judicial de Madrid.
Una de las monedas era de car¨¢cter exclusivo, ya que no existe ninguna otra copia en el mundo. Fue adquirida en Nueva York en una subasta y ya en aquel entonces le cost¨® al coleccionista 30.000 euros. Este dijo a la polic¨ªa que estaba haciendo un cat¨¢logo con todas las monedas, que estaban perfectamente clasificadas y subclasificadas en su vivienda antes de ser sustra¨ªdas.
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