Grup 62 abandona su sede en el Raval y se muda en parte a Planeta

En el que puede ser la escenificaci¨®n de un movimiento que podr¨ªa afectar tambi¨¦n en breve a su accionariado, Grup 62, el conglomerado editorial m¨¢s importante en lengua catalana, abandonar¨¢ a finales de este mes su carism¨¢tico edificio de color verde en el centro del Raval para desplazar sus departamentos t¨¦cnicos a la sede corporativa que el Grupo Planeta (uno de los socios capitalistas del sello catal¨¢n) tiene en la Diagonal de Barcelona.

Lo que en principio es, seg¨²n fuentes de la editorial, un simple ¡°traslado f¨ªsico¡± de sus oficinas que podr¨ªa empezar el pr¨®ximo d¨ªa 22 en plena campa?a de Sant Jordi tiene en cambio una alta carga simb¨®lica y es fruto de un notable encaje de bolillos entre los socios de Grup 62, donde est¨¢n, am¨¦n de Planeta (34% del accionariado), Enciclop¨¨dia Catalana (otro 34%) y La Caixa (30%). As¨ª, el inmueble del Raval era propiedad de Edicions 62 hasta 2006, a?o a finales del cual se incorporaban a su accionariado los grupos Planeta y Enciclop¨¨dia Catalana. El edificio se vendi¨® entonces a la entidad financiera en el marco de una operaci¨®n para equilibrar cuentas que tambi¨¦n comport¨®, en diversas etapas, la venta de la divisi¨®n de revistas y publicaciones peri¨®dicas as¨ª como la del 15% de las acciones de la librer¨ªa La Central del Raval de Barcelona.

Grup 62 se qued¨® en el edificio, de unos 2000 metros cuadrados, en r¨¦gimen de alquiler, con un contrato que expira precisamente a finales de este mes y que La Caixa quiere ejecutar porque desea salir como socio inversor del conglomerado editorial catal¨¢n. Esa posible salida comportar¨ªa que la participaci¨®n de La Caixa fuera asumida por el grupo Planeta y por Enciclop¨¨dia Catalana. Pero esta ¨²ltima, inmersa en un ERE tras cerrar el ejercicio del a?o pasado con unas p¨¦rdidas de 500.000 euros, no parece que pueda absorber en primera instancia participaciones en situaci¨®n de paridad con Planeta para mantener el equilibrio accionarial como hasta la fecha.

La necesidad de hacer gestos de concordia y no soliviantar a ese socio ante futuras operaciones (que, adem¨¢s, aporta el marchamo de catalanidad de su marca y el notable fondo literario de sellos como el de Proa) as¨ª como la de combatir la imagen que podr¨ªa desprenderse de una inexorable fagocitaci¨®n del mayor grupo editorial catal¨¢n por el mayor grupo editorial espa?ol, explicar¨ªan que el cuartel general de Grup 62 no se instale en el edificio corporativo de Planeta. Por ello, las direcciones generales y editoriales, los editores y los departamentos de comunicaci¨®n y marketing de Grup 62 ocupar¨¢n unos 300 metros cuadrados en unas oficinas de alquiler cercanas, en el n¨²mero 9 de la calle Pedro i Pons. Una soluci¨®n para dar una imagen de independencia empresarial muy parecida a la adoptada con la editorial Tusquets, tras la entrada de Planeta Corporaci¨®n en ella en abril del a?o pasado.

El resto del actual Grup 62 (administraci¨®n, derechos de autor, inform¨¢tica¡­) se instalar¨¢ en el edificio institucional de Planeta, donde ocupar¨¢ unos 700 metros cuadrados. Ah¨ª se encontrar¨¢n con sus compa?eros del ¨¢rea comercial Un x Un, que a finales de enero ya abandonaron sus locales para trasladarse al antiguo edificio de Banca Catalana. La mudanza no afectar¨¢ por ahora los puestos de trabajo de las cerca de 110 personas con que cuenta Grup 62, seg¨²n fuentes de la empresa, si bien admiten que ¡°ser¨¢ a partir de la ubicaci¨®n en la nueva sede cuando pueda empezar a valorarse la reducci¨®n de costes y personal, que intentaremos minimizar cuanto podamos¡±.