ERC y CiU se quedan solos

El Gobierno de Artur Mas pretend¨ªa que la reuni¨®n de ayer estuviera constituida por el n¨²cleo duro de los partidos que apoyan el ¡°derecho a decidir¡±, adem¨¢s de algunos alcaldes representativos de todas las formaciones. Se pretend¨ªa evitar as¨ª que la cumbre se convirtiera en algo poco operativo. Lo consigui¨® solo a medias, ya que al final hasta 23 personas se sentaron a la mesa que presidi¨® Mas.

La puesta en escena fue cuidada. Se visualiz¨® el n¨²cleo duro soberanista, formado por CiU y ERC, con el presidente catal¨¢n y Oriol Junqueras en primer t¨¦rmino. En cambio, el primer secretario del PSC, Pere Navarro, y el coordinador de Iniciativa, Joan Herrera, optaron por el perfil bajo y se colocaron lejos de los principales focos. Sus posicionamientos fueron acordes con la escenograf¨ªa. El l¨ªder ecosocialista, sin desmarcarse nunca del derecho a decidir, exigi¨® que este proceso se acompa?e con otro contra el ¡°austericidio¡±. En este sentido, critic¨® tambi¨¦n la pol¨ªtica social del Gobierno catal¨¢n. ¡°No pedimos que se creen estructuras de Estado, sino que no se destruyan las que ya tenemos, que son b¨¢sicamente el Estado del bienestar¡±.

En cambio, el republicano Oriol Junqueras insisti¨® en que el encuentro de ayer sirvi¨® para visualizar un ¡°consenso amplio¡± sobre el derecho a decidir.

En el poco ¨¦xito de la convocatoria influy¨® el hecho de que la cumbre se celebrara sin un orden del d¨ªa claro. De hecho, el ¨²nico documento que sali¨® del encuentro fue un texto de folio y medio que los grupos parlamentarios ten¨ªan ya desde hace semanas y que se limita a establecer las bases de lo que deber¨ªa ser el futuro Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, al que deber¨ªan incorporarse los agentes sociales y la sociedad civil. El documento ni siquiera se rubric¨®, puesto que estar¨¢ abierto a enmiendas de los partidos durante unos cuantos d¨ªas m¨¢s.