Wert o desprestigia cuanto puedas
Tenemos el mayor ¨ªndice de escolarizaci¨®n infantil del mundo
El ministro Wert no consigui¨® su nombramiento por su papel de contertulio sino por colaboraciones con la FAES de Jose Mar¨ªa Aznar donde ya propon¨ªa un cambio total en el modelo educativo, se lamentaba de la abundancia de becas universitarias y manifestaba su preocupaci¨®n por la escasa religiosidad de la sociedad espa?ola, especialmente los j¨®venes. Con esos magn¨ªficos avales le encomendaron la tarea de reformar, cristianizar y espa?olizar el sistema educativo aprovechando que la crisis es una oportunidad ¨²nica para cambiar las reglas de juego sociales.
Sin embargo, esta tarea no se hubiera podido culminar si desde hace a?os, la derecha pol¨ªtica espa?ola y todos los think tank que las envuelven, no hubiesen conseguido desprestigiar la escuela p¨²blica, sus resultados y caricaturizar sus problemas.
Mutilaron y manipularon informes como el PISA o el de la OCDE para presentar la cara m¨¢s oscura de la ense?anza espa?ola. Ocultaron celosamente todos sus ¨¦xitos y consiguieron que la palabra educaci¨®n se impregnara del concepto de fracaso, error y conflicto.
El sistema educativo espa?ol, con todos sus defectos, es actualmente uno de los primeros del mundo en equidad y uno de los m¨¢s potentes en facilitar la movilidad social
La ense?anza en Espa?a necesita cambios en profundidad, sin duda. Especialmente la educaci¨®n secundaria necesita encontrar nuevos caminos y mejoras, pero no todo lo existente ni los valores del modelo actual est¨¢n caducos y fracasados, sino m¨¢s bien faltos de desarrollo y de aplicaci¨®n.
Para sacudirnos tanto prejuicio y mentira, nada mejor que ver la evoluci¨®n de la ense?anza espa?ola. Seg¨²n afirman los estudios de la OCDE el punto de partida de la educaci¨®n en Espa?a era el m¨¢s penoso de Europa. Al inicio de la democracia solo el 17% de los adultos ten¨ªa estudios equivalentes a secundaria. En estos momentos es el 64% de la poblaci¨®n quien ha conseguido ese nivel.
Por si alguien argumenta que nos hemos ido demasiado lejos, la OCDE en el ¨²ltimo informe aplaude el salto que se ha producido en la ense?anza entre los a?os 2000 y 2010 en los que se ha recortado la diferencia con el resto de los pa¨ªses de 11 a cuatro puntos en el nivel educativo del conjunto de la poblaci¨®n. Si en estos a?os no se hubiese producido el auge del ladrillo, con la nefasta consecuencia de sacar de las aulas a miles de j¨®venes, nuestro nivel estar¨ªa completamente equiparado a nuestro entorno.
El sistema educativo espa?ol, con todos sus defectos, es actualmente uno de los primeros del mundo en equidad y uno de los m¨¢s potentes en facilitar la movilidad social. La mitad de los estudiantes espa?oles superan el nivel educativo de sus padres, en muchos casos en varios escalones y este es el mejor indicador de su ¨¦xito. En el caso de Andaluc¨ªa, por aproximaci¨®n, podemos estimar que m¨¢s del 65% de los j¨®venes superan educativamente a sus padres. Todo un motivo de orgullo y un ejemplo de superaci¨®n, porque los d¨¦ficits culturales tardan mucho tiempo en ser superados.
Por si no fuera suficiente, tenemos el mayor ¨ªndice de escolarizaci¨®n infantil del mundo que dar¨¢ sus frutos en el futuro, si es que no desaparece antes. Tenemos una poblaci¨®n universitaria amplia, bien formada y con titulaciones apreciadas en el mundo entero. Resulta infame el desprestigio al que se quiere someter la comunidad universitaria y el recorte a sus estudios. Finalmente tenemos un n¨²cleo de problemas en los estudios medios y en la recuperaci¨®n de los estudiantes que abandonaron las aulas que deber¨ªamos haber afrontado con decisi¨®n e imaginaci¨®n.
Incluso en estos a?os de crisis, de malas noticias imparables, la educaci¨®n se ha superado a s¨ª misma, ha aumentado el ¨¦xito escolar casi diez puntos y ha rescatado miles de j¨®venes para la formaci¨®n y el futuro.
El complejo de inferioridad, la falta de compromiso y de proyecto educativo de la izquierda, en general, han paralizado las iniciativas de cambio y han defraudado a un profesorado convertido en rompeolas de todos los conflictos sociales. Ahora la derecha espa?ola ha cubierto este hueco con un proyecto educativo cuyo santo y se?a es la religi¨®n, la segregaci¨®n y la privatizaci¨®n. Por cierto que en Espa?a, estas tres palabras son una sinonimia casi perfecta.
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