El amigo alem¨¢n

El bar¨ªtono de Weimar Matthias Goerne se ha convertido por m¨¦ritos m¨¢s que sobrados en el embajador por excelencia de la canci¨®n alemana en Espa?a. No solamente por ser el int¨¦rprete que m¨¢s veces ha intervenido en estos ciclos de Lied del teatro de La Zarzuela- trece al menos en diecinueve ediciones-, sino porque su presencia se ha multiplicado ¨²ltimamente en otras convocatorias madrile?as. Esta temporada, sin ir m¨¢s lejos, intervino con orquesta en el teatro Real en noviembre cantando Mahler bajo la direcci¨®n de Currentzis, y este mismo mes de mayo ha participado con la ONE y Pons en un programa que inclu¨ªa canciones de Schubert y Richard Strauss.

M¨¢s que un cantante es ya, en Madrid, un amigo, y por ello ayer fue recibido y despedido efusivamente en un exigente recital con piano -magn¨ªfico Alexander Schmalcz- en el que se alternaban lieder de amor, soledad, desolaci¨®n y guerra de Schumann y Mahler. La propuesta era, adem¨¢s de atrevida, inteligente, gracias al juego dial¨¦ctico de los diferentes textos y a la combinaci¨®n estil¨ªstica entre enfoque intelectual y vuelo po¨¦tico que caracteriza musicalmente a los dos compositores. La atm¨®sfera fue lieder¨ªstica al cien por cien, y el p¨²blico respondi¨® con gran concentraci¨®n a un recital rebosante de sugerencias de todo tipo.