El ¡®software libre¡¯ no arranca
La Generalitat defiende implantar el sistema Lliurex pero gasta 1,5 millones en licencias inform¨¢ticas
Carlos ten¨ªa nueve a?os cuando fue presentado como un portento de las nuevas tecnolog¨ªas. Educaci¨®n recurri¨® en 2005 a un estudiante de primaria para promocionar ante la prensa Lliurex, distribuci¨®n gratuita del sistema operativo de c¨®digo abierto Linux. Carlos fue exhibido como ¡°asesor¡± de los programadores de la consejer¨ªa, que por entonces auguraba un ahorro de 4,7 millones de euros anuales en licencias inform¨¢ticas. Nada se sabe del precoz inform¨¢tico ocho a?os despu¨¦s. Pero s¨ª de su mentora. La exdirectora general de Innovaci¨®n Tecnol¨®gica Silvia Caballer est¨¢ imputada por la adjudicaci¨®n en 2005 del II Congreso de Software Libre. El contrato fue para Orange Market, franquicia valenciana de la trama G¨¹rtel.
La an¨¦cdota resume para las fuentes consultadas la ¡°dejadez¡± del Consell para implantar Lliurex. Profesores y sindicatos sostienen que, tras el anuncio de la migraci¨®n al sistema operativo libre, ¡ªque sirvi¨® de inspiraci¨®n de cuatro congresos por donde desfilaron gur¨²s como el presidente de Linux Internacional, Jon Maddog Hall¡ª, solo hay ¡°humo medi¨¢tico¡±. Ponen como ejemplo que los ordenadores de la direcci¨®n territorial de Educaci¨®n funcionan con Windows de Microsoft, ant¨ªpoda del esp¨ªritu del software libre, seg¨²n CC OO.
Los cr¨ªticos cuestionan las cifras de la Generalitat. El Consell asegura que el distribuidor gratuito de Linux corre en los 110.000 ordenadores de las aulas valencianas. Que sus 1.109 cursos de Lliurex y GNU/Linux han permitido la formaci¨®n de cerca de 22.000 alumnos y profesores. Y que se ha ahorrado m¨¢s de 30 millones de euros desde 2005 en licencias. La ¡°seguridad¡± de Lliurex, a?ade, evita la compra de antivirus.
Los formadores discrepan. ¡°El uso de Lliurex es testimonial porque no hay compromiso para su divulgaci¨®n¡±, dice Paco Garc¨ªa, de CC OO. ¡°Faltan programas¡±, se queja Vicente Ripoll, presidente de la Asociaci¨®n de Directores de Primaria y director del colegio de Valencia Ballester Fandos, donde solo 15 ordenadores del aula de inform¨¢tica funcionan con el entorno gratuito. Un tercer representante educativo admite que desconoce las ventajas y se define como ¡°analfabeto para los ordenadores¡±. E Hilari Mar¨ª, coordinador tecnol¨®gico del Colegio P¨²blico Jes¨²s de Valencia, destaca la ¡°baja¡± implantaci¨®n del distribuidor entre los formadores. Un ¨²ltimo docente confiesa bajo anonimato que las diez terminales de la sala de profesores de su centro, un colegio p¨²blico del barrio valenciano de Patraix, est¨¢n trucadas. Tienen una versi¨®n pirata de Windows que convive con el Lliurex preinstalado.
La historia de Lliurex se escribe desde 2004 y lleva la firma del exconsejero de Educaci¨®n Esteban Gonz¨¢lez Pons, que ha declinado atender a EL PA?S. El pol¨ªtico defendi¨® el ¡°uso¡± de software libre en la Administraci¨®n. De lo contrario, advirti¨®, los colegios corr¨ªan el riesgo de ser ¡°esclavos de una marca¡±. Casi una d¨¦cada despu¨¦s, la marca sigue haciendo caja. La Generalitat gast¨® el pasado a?o casi 1,5 millones en licencias de Microsoft, seg¨²n la respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el diputado de Comprom¨ªs Fran Ferri.
¡°El uso de Lliurex es testimonial porque no hay compromiso para su divulgaci¨®n¡±
Lliurex se enmarc¨® en un movimiento de software libre global auspiciado por gobiernos de izquierda. Una idea de pensamiento colaborativo y c¨®digo abierto que preconiz¨® el brasile?o Luis Ignacio Lula da Silva. Extremadura (Linex) fue la pionera en Espa?a con un modelo que encadenaba reconocimientos. Despu¨¦s aterrizaron Andaluc¨ªa (Guadalinex) o Castilla-La Mancha (Molinux). Los patrones regionales no confluyeron en uno com¨²n.
La primera versi¨®n de Lliurex fue presentada en 2005, un a?o despu¨¦s del primer congreso para promocionar la distribuci¨®n valenciana. ¡°La paradoja lleg¨® al punto que en el evento hab¨ªa presentaciones hechas con programas de pago¡±, explica un asistente. La Generalitat opt¨® por un desarrollo inicial en diez centros piloto. ¡°Antes de llegar a las aulas ya se estaba presentando", lamenta Emilio Mart¨ªnez Hern¨¢ndez, coordinador de Educaci¨®n del PSPV en Alicante. Sostiene que prim¨® la celebraci¨®n de los ostentosos congresos que ahora investiga la justicia al desarrollo de la tecnolog¨ªa. Y critica que el proyecto de convertir la autonom¨ªa en territorio lliurex choc¨® con la firma de convenios con la compa?¨ªa cofundada por Bill Gates, paradigma de los programas de pago.
Con la irrupci¨®n de la crisis, la implantaci¨®n del sistema operativo coincidi¨® con la falta de inversi¨®n en equipamiento. La Generlaitat declin¨® en 2009 sumarse al convenio Escuela 2.0 del Gobierno. El exconsejero de Educaci¨®n Alejandro Font de Mora argument¨® que los ordenadores del Ejecutivo socialista produc¨ªan miop¨ªa. Dos ni?os andaluces comparten hoy un ordenador frente a los seis valencianos, seg¨²n el ¨²ltimo informe del Gobierno, de 2011. ¡°La situaci¨®n ha empeorado porque en Valencia y Madrid no se ha invertido¡±, zanja el socialista Miguel Soler, exdirector general de FP del Gobierno hasta 2012.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.