Rom¨¢n, dimensi¨®n de gran torero
El valenciano cort¨® una oreja y le negaron injustamente la segunda
El novillo que abri¨® plaza y feria no quer¨ªa florituras. Ni tampoco confianzas. Fue algo tard¨®n ya desde salida; frenado con la capa y con poca entrega. Rom¨¢n, torero de ideas claras y de firme decisi¨®n, nunca vio en ese novillo un problema insalvable. A un frustrado quite de Mart¨ªn Escudero, respondi¨® Rom¨¢n con dos lopecinas y un farol con las dos rodillas en tierra de gallarda provocaci¨®n. Ya con la muleta esper¨® y tir¨® del novillo con ritmo. Con el astado aparentemente entregado, Rom¨¢n se dej¨® querer demasiado y en el intento de un natural vol¨® por los aires. Sin ninguna ayuda del novillo, Rom¨¢n pis¨® terrenos de compromiso: valiente y puesto siempre. Tambi¨¦n muy motivado, tanto que volvi¨® a cobrar otra voltereta. La espada frustr¨® un triunfo mayor.
La dimensi¨®n de un novillero muy puesto y en saz¨®n la dio Rom¨¢n en el gran cuarto. La calidad la pusieron torero y novillo, a partes iguales. Las series, por uno y otro pit¨®n, se desgranaron con gran precisi¨®n. Hilvanadas siempre. Sin pausas y sin prisas. Bien medido todo. Y ligado. No hubo tiempos muertos. Cohesi¨®n total entre ambos protagonistas. La impresi¨®n final: faena grande. A gran novillo, gran toreo de Rom¨¢n. Una estocada, un puntito desprendida, coron¨® la hermosa obra. No se entiende que solo se premiara tan gran faena con solo un trofeo.
RUIZ / ROM?N, ESCUDERO, ARMILLITA
Novillos de Daniel Ruiz. De correcta presentaci¨®n, aunque desiguales de cara y tipo. Justos de fuerzas. Apenas picados. Manejables en su conjunto, el cuarto destac¨® por su gran calidad en la muleta. El sexto, el de m¨¢s cuajo.
Rom¨¢n. Cuatro pinchazos y entera ¨Caviso- (palmas); estocada un punto desprendida (oreja con fuerte petici¨®n de la segunda y dos vueltas al ruedo)
Mart¨ªn Escudero. Pinchazo y estocada (silencio); cuatro pinchazos ¨Caviso-, uno m¨¢s y media (silencio).
Ferm¨ªn Espinosa "Armillita". Tres pinchazos ¨Caviso- otro m¨¢s y nueve descabellos (silencio); estocada ¨Caviso- y ¨C tres descabellos (silencio)
Plaza de Valencia, 23 de julio, Primera de Feria. Menos de media.
Mart¨ªn Escudero sali¨® desarmado a las primeras de cambio con el capote en el segundo de la tarde. No ser¨ªa la ¨²nica. Al dar el primer muletazo pas¨® lo mismo. Bastante que torear en el novillo, que sin humillar pec¨® de acostarse descaradamente por los dos pitones. Mart¨ªn Escudero sorte¨® los envites como pudo. Verde en t¨¦cnica, aunque sin perder los papeles, le vino grande un novillo nada f¨¢cil.
En el manejable quinto, muy ofensivo de pitones, se asent¨® m¨¢s. Con la muleta en la izquierda, Mart¨ªn Escudero tuvo sus mejores momentos. Un par de series por ese lado, con cierto empaque, parecieron darle vida a una faena algo deslavazada en su conjunto. El novillo, con las fuerzas al l¨ªmite, aguant¨® sin rechistar un trasteo que acab¨® por pecar de largo. Luego, pinchazo a pinchazo acab¨® por dejar la cosa en nada.
El tercero pas¨® a la muleta de Armillita con apenas dos picotazos, nota com¨²n de toda la novillada. Quit¨® Rom¨¢n en su turno y volvi¨® a sufrir una voltereta espectacular. Una paliza, vamos. Armillita, ¨²ltimo descendiente de una dinast¨ªa de grandes toreros aztecas, apunt¨® calidad. Cierto encanto en su toreo, aunque poco ajustado. Falsa impresi¨®n de fragilidad y siempre con movimientos muy sutiles. No redonde¨® pero dej¨® muletazos muy templados por ambos pitones. Se desmoron¨® todo con el manejo de la espada. Un mitin.
El novillo de m¨¢s cuajo salt¨® en sexto turno y Armillita lo salud¨® con una larga de rodillas. No fue novillo de entrega ni de grandes problemas y Armillita tampoco encontr¨® el sito. Lo intent¨® por aqu¨ª y por all¨¢, pero falt¨® reposo y confianza. Muy ligero todo, acab¨® siendo faena en exceso movida. Estuvo h¨¢bil con la espada, aunque necesit¨® el refrendo del descabello.
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