Un geri¨¢trico de Ourense expulsa a un octogenario por no pagar la plaza
La Xunta se desentiende del caso alegando que no dispone de plazas p¨²blicas
La hijastra del octogenario desalojado este s¨¢bado de una residencia en el municipio ourensano de Bande por no poder pagarla ha subrayado que ¨¦l "no pide nada que no le corresponda y que no est¨¦ acreditado por ley" . Mar¨ªa Alves ha explicado, en una entrevista a Europa Press, que su padrastro, Antonio Lopes Gon?alves, ha abandonado alrededor de las 14.30 horas de este s¨¢bado la residencia de Nuestra Se?ora de la Salud de A Peroxa, en Bande (Ourense), ya que hab¨ªa recibido un comunicado de la Fundaci¨®n San Rosendo en el que se le informaba de que ten¨ªa como plazo hasta el 5 de agosto para dejar esta residencia.
Antonio Lopes hab¨ªa ingresado en este centro despu¨¦s de sufrir un infarto en diciembre de 2012 en virtud de un convenio entre la Xerencia de Xesti¨®n Integrada del Sergas y la Fundaci¨®n San Rosendo. Gracias a este acuerdo, el octogenario vivi¨® en la residencia de A Peroxa hasta este s¨¢bado, como ha indicado su hijastra. A pesar de que Antonio Lopes ha sido beneficiario de este convenio, ¨¦l hab¨ªa pedido a la Xunta en enero de 2013, tras sufrir este infarto, una plaza p¨²blica de residencia como dependiente, pero le comunicaron que no hab¨ªa disponibilidad. Ante esta situaci¨®n, el anciano deb¨ªa esperar un per¨ªodo de tres meses para que se le asignase una ubicaci¨®n. No obstante, como ha indicado Mar¨ªa Alves, han pasado ocho meses y todav¨ªa no la ha recibido. La Fundaci¨®n San Rosendo fue fundada y dirigida durante a?os por un sacerdote, Benigno Moure, condenado por apropiarse de la herencia de una anciana residente en uno de sus centros.
Tras sufrir el ataque, el anciano fue examinado por un neur¨®logo que, seg¨²n ha se?alado Alves, certific¨® que ¨¦ste "no pod¨ªa estar solo y que necesitaba ayuda para todo". Adem¨¢s, Antonio Lopes fue reconocido por un terapeuta de la Xunta que le otorg¨® un grado 2 de incapacidad y asegur¨® que "todav¨ªa pod¨ªa comer por su propia mano y caminar algo".
Mar¨ªa Alves ha explicado que ella no puede hacerse cargo de su padre porque es una "persona enferma operada de la columna" y que tiene que "ir a rehabilitaci¨®n". Asimismo, ha admitido que la pensi¨®n de 524 euros que recibe su padrastro es, al finalizar el convenio de seis meses y sin ninguna ayuda de dependencia, insuficiente para costear la nueva cuant¨ªa que la residencia le pide, de 1.200 euros. Ante esta situaci¨®n, Antonio Lopes envi¨® una carta el 18 de julio en la que ped¨ªa que se modificase su programa individual de atenci¨®n (PIA) para conseguir una libranza econ¨®mica que le permita sufragar los gastos asistenciales. De momento,Alves ha explicado que un empresario de Bande, que regenta el bar Tr¨¦bol, se ha ofrecido a cuidar y a dar de comer a su padre de manera gratuita hasta que reciba una plaza.
Por su parte, fuentes de la Conseller¨ªa de Traballo e Benestar han indicado a Europa Press que, tras recibir esta carta, t¨¦cnicos de la Xunta han empezado a trabajar en el caso para buscar una "soluci¨®n adecuada". Sin embargo, el departamento que dirige Beatriz Mato ha puntualizado que antes tiene que pedir un informe de su situaci¨®n a los servicios sociales de Bande.
Benestar ha indicado que, aunque el plazo habitual que los dependientes deben esperar para recibir una plaza p¨²blica es de tres meses, los de grado 3 tienen prioridad. Adem¨¢s, est¨¢ limitado por su preferencia de ser instalado en una residencia de la provincia ourensana. En cuanto a la libranza econ¨®mica, Benestar ha explicado que los t¨¦cnicos siguen estudiando esta petici¨®n, que fue realizado por Antonio Lopes el 18 de julio.
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