La Guardia Civil constata el c¨²mulo de irregularidades del Sant Pau
Guti¨¦rrez Mart¨ª recibi¨® un salario siete a?os cuando ya no estaba empleado en el hospital Cuervo ¡°percib¨ªa dos sueldos por el mismo trabajo¡±
El Hospital de Sant Pau pag¨® elevadas cantidades de dinero a altos cargos en concepto de salarios que no estaban justificados, escondi¨® esas retribuciones en las auditor¨ªas y solo ces¨® en las irregularidades cuando la situaci¨®n, que conocieron sucesivos directivos del centro, fue denunciada por los trabajadores. La investigaci¨®n realizada por la Guardia Civil confirma el c¨²mulo de irregularidades en la pol¨ªtica de contrataci¨®n de la hist¨®rica instituci¨®n. Las conclusiones est¨¢n en poder del juez que instruye la macrocausa del Sant Pau, que consta de tres piezas separadas sobre los contratos ficticios, la relaci¨®n patrimonial entre las tres fundaciones que forman la instituci¨®n y el sobrecoste del nuevo hospital.
El Sant Pau est¨¢ inmerso en una triple crisis: una de gesti¨®n tras dimitir en bloque del patronato de la fundaci¨®n que gestiona el hospital en junio y el nombramiento de otro; una crisis econ¨®mica, con un agujero acumulado de 57 millones de euros en solo dos a?os; y la judicial, ya que casi todos los gerentes entre 2000 y 2011 est¨¢n imputados por el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 22 de Barcelona tras las denuncias d el comit¨¦ de empresa del centro.
El Grupo de Delincuencia Econ¨®mica y Tecnol¨®gica de la Guardia Civil deb¨ªa indicar al juez si, como denunci¨® la Asociaci¨®n Profesional de Enfermer¨ªa (API), el Sant Pau firm¨® contratos ficticios con tres personas: Ricard Guti¨¦rrez Mart¨ª, peso pesado de la sanidad de la ¨®rbita del PSC que lleg¨® al Sant Pau en 2001; Jos¨¦ Ignacio Cuervo, exconcejal socialista en Barcelona y exdelegado de la Generalitat en Madrid hasta 2010, y Mar¨ªa Merc¨¨ Cruells, exdirectora de Atenci¨®n Ciudadana del Departamento de Salud en la ¨¦poca de la socialista Marina Geli.
Los investigadores tomaron declaraci¨®n como imputados por un presunto delito de malversaci¨®n a estos tres y a otras cinco personas, responsables de esos contratos: los exgerentes Joaquim Esperalba y Jordi Varela; el director de recursos humanos, Felipe Carbajo; el exdirector general, Josep Grau Rein¨¦s y el director gerente Jordi Bachs. En el atestado enviado al juez, al que ha accedido este diario, los investigadores concluyen que Guti¨¦rrez Mart¨ª, ex gerente adjunto, cobr¨® durante siete a?os un salario cuando ya no trabajaba en el hospital y Cuervo recibi¨® dos sueldos por el mismo trabajo. Cruells s¨ª ejerci¨® las funciones para las que hab¨ªa sido contratada como ¡°facultativa colaboradora¡±.
Ricard Guti¨¦rrez aterriz¨® en el Sant Pau en 2001 de la mano del entonces gerente Joaquim Esperalba, que le contrat¨® siguiendo las indicaciones de Xavier Casas, entonces teniente de alcalde del Ayuntamiento y miembro de la Muy Ilustre Administraci¨®n (MIA) que gobierna el Sant Pau. Guti¨¦rrez Mart¨ª ejerci¨® funciones ejecutivas hasta la marcha de Esperalba, a principios de 2004. A partir de esa fecha y hasta que fue despedido, en 2011, dej¨® el hospital y pas¨® a ejercer funciones de docencia y de direcci¨®n de un m¨¢ster en la Fundaci¨®n Doctor Robert. Las tareas que ten¨ªa asignadas por contrato para el proyecto del nuevo hospital fueron asumidas por un arquitecto nombrado por una empresa externa, explic¨® Grau Rein¨¦s a los investigadores. A pesar de ello, el Sant Pau sigui¨® pagando a Guti¨¦rrez Mart¨ª un sueldo de unos 130.000 euros anuales durante siete a?os.
Cuando Jordi Varela fue nombrado gerente en 2008, Guti¨¦rrez Mart¨ª segu¨ªa cobrando del Sant Pau, aunque seg¨²n el propio Varela no realizaba ¡°las funciones detalladas en el contrato¡±. Pero Varela decidi¨® ¡°no tocar nada¡± y nombrar a otro gerente adjunto como su mano derecha. Guti¨¦rrez Mart¨ª hab¨ªa sido nombrado en 2004 patrono del hospital por parte del Gobierno tripartito, lo que le imped¨ªa cobrar un sueldo de la misma instituci¨®n que ten¨ªa que controlar, seg¨²n la ley catalana de fundaciones. De hecho, las retribuciones de Guti¨¦rrez Mart¨ª no constaron en los informes de auditor¨ªa, irregularidad que no detectaron ni los gerentes ni el propio patronato, hacen constar los investigadores. Adem¨¢s del cuantioso salario que percib¨ªa del Sant Pau, Guti¨¦rrez Mart¨ª cobr¨® tambi¨¦n de la Fundaci¨®n Doctor Robert una media de 30.000 euros anuales brutos entre 2004 y 2012 por ¡°unas 40 o 50 horas mensuales¡± de trabajo.
Los investigadores destacan que el sueldo de Guti¨¦rrez Mart¨ª no consta en las auditor¨ªas
Al ser despedido, en 2011, fue el Instituto Catal¨¢n de la Salud (ICS), donde tiene plaza como inspector m¨¦dico, el que se hizo cargo de su sueldo. El ICS le pag¨® por ello menos de la mitad de lo que le pagaba el Sant Pau, lo que demuestra que su puesto hab¨ªa estado hasta ese momento ¡°sobrevalorado econ¨®micamente¡±, seg¨²n la Guardia Civil.
Aunque su ocupaci¨®n requer¨ªa dedicaci¨®n exclusiva, Guti¨¦rrez Mart¨ª tambi¨¦n cobr¨® de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona (UAB), del Colegio de M¨¦dicos de Barcelona y diversas sociedades vinculadas, del Consejo General de Colegios de M¨¦dicos y de la Universidad Pompeu Fabra. Guti¨¦rrez Mart¨ª abandon¨® su puesto en mayo de 2011. Ese a?o, se embols¨® m¨¢s de 370.000 euros, entre ellos, 60.000 del Consejo General del Colegio de M¨¦dicos; 13.000 del Colegio de M¨¦dicos de Barcelona; 49.000 de la Fundaci¨®n Doctor Robert; 46.000 del Sant Pau; 34.000 del ICS; 3.200 de la UAB y 158.000 de indemnizaci¨®n al ser despedido del hospital.
Aunque Varela afirm¨® que el despido del gerente adjunto se debi¨® a una orden para reducir los cargos directivos, la salida de Guti¨¦rrez Mart¨ª se produjo poco despu¨¦s de que los representantes sindicales del Sant Pau tuvieran acceso al censo de la plantilla y denunciaran que el alto cargo segu¨ªa figurando en ella. Y eso a pesar de que el director de Comunicaci¨®n y Relaciones Ciudadanas, Josep Tard¨¤, explic¨® a la Guardia Civil que no supo qui¨¦n era Guti¨¦rrez Mart¨ª hasta que EL PA?S public¨® el primer art¨ªculo sobre ¨¦l.
Cuervo pas¨® a cobrar como
Otro de los contratos investigados es el de Jos¨¦ Ignacio Cuervo, concejal del Ayuntamiento de Barcelona por el PSC, inspector m¨¦dico del ICS a partir de 2010. Cuervo lleg¨® al Sant Pau en enero de 2011, dos meses despu¨¦s de ser relevado en Madrid, para colaborar en el despliegue de un campus de excelencia y un nuevo instituto de investigaci¨®n. Cuando Varela le contrat¨®, ¡°Cuervo realizaba un solo trabajo y percib¨ªa dos sueldos¡± ¡ªel que le pagaba el Sant Pau y el del ICS¡ª afirman los investigadores. Esto sucedi¨® con ¡°conocimiento pleno¡± por parte de la fundaci¨®n de gesti¨®n.
El contrato de Cuervo se termin¨® en junio de 2011, motivado seg¨²n ¨¦l por el ¡°conflicto laboral del hospital, que llevaba aparejado la reducci¨®n de directivos¡±. Pero en realidad, el Sant Pau empez¨® a pagarle como aut¨®nomo a cargo de la fundaci¨®n patrimonial, aunque una cantidad menor puesto que Cuervo pas¨® a trabajar solo dos d¨ªas a la semana, ya que se hab¨ªa reintegrado a su puesto en el hospital Vall d¡¯Hebron. La retribuci¨®n de ese contrato como aut¨®nomo era de 49.900 euros al a?o.
Preguntado por EL PA?S en mayo de 2012, Cuervo admiti¨® que ¡°fue un error firmar ese contrato¡±, aunque pens¨® que su aportaci¨®n al Sant Pau podr¨ªa ser ¡°interesante¡±. Tambi¨¦n dijo que no valor¨® ¡°bien las circunstancias¡±, pero que s¨ª ¡°hizo el trabajo¡±. Guti¨¦rrez Mart¨ª, por su parte, dijo a los investigadores que siempre realiz¨® la actividad ¡°objeto del contrato¡± suscrito con la fundaci¨®n y que su doble remuneraci¨®n se debi¨® a que el Sant Pau le pagaba por gestionar la c¨¢tedra y la Fundaci¨®n Doctor Robert lo hac¨ªa por dirigir el m¨¢ster.
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