Un viaje al espacio desde Elche
Un grupo de estudiantes de la Miguel Hern¨¢ndez recauda 800.000 euros para lanzar un cohete
Qui¨¦n iba a decirle a Ra¨²l Torres a sus 26 a?os que mientras toda su generaci¨®n hac¨ªa las maletas para buscarse un trabajo por Europa ¨¦l y un par de amigos iban a conseguir 800.000 euros para poner en marcha una idea. Y no una cualquiera, sino el sue?o de su infancia y, adem¨¢s, sin moverse de su ciudad: construir un cohete.
Ra¨²l Torres y su tocayo Ra¨²l Verd¨², junto a su otro socio, Jos¨¦ Enrique Mart¨ªnez, tienen pensado lanzar un cohete a m¨¢s de 250 kil¨®metros de la superficie terrestre cargado de 200 kilos de experimentos cient¨ªficos en menos de cuatro a?os. Medir¨¢ 13 metros de largo y 0,65 de ancho, una nave con forma de supositorio que pesar¨¢ cerca de unos 2.000 kilos. Con un par de modificaciones se pondr¨¢ en ¨®rbita. Es la idea inicial que cuidan y perfilan en Payload Aerospace, en el parque cient¨ªfico y empresarial de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez de Elche (Alicante).
¡°Un d¨ªa¡±, cuenta Torres, ¡°le coment¨¦ el proyecto a Ra¨²l. ?Por qu¨¦ si la electr¨®nica es cada vez m¨¢s peque?a no lo pueden ser los sat¨¦lites de telecomunicaciones? Generalmente, suelen pesar entre cinco y 10 toneladas, pero hoy en d¨ªa ya existe una parte del mercado que construyen sat¨¦lites que pesan entre uno y 100 kilos. No se necesitan cohetes tan grandes para subirlos al espacio. En ese momento, pensamos: ah¨ª hay un mercado¡±, recuerda este licenciado en Biolog¨ªa que se ha quedado en tercero de Ingenier¨ªa Aeron¨¢utica por culpa de la aventura en la que ¨¦l y sus amigos se han metido.
Solo hay dos empresas en Europa que hagan lo que persiguen en Payload. No es que la NASA peligre, pero a los ilicitanos les gusta presumir de ser gente con iniciativa. Y, sobre todo, valientes. Y los dos ra¨²les lo son. Sus padres (una mujer en paro desde 2008, un fontanero con poco trabajo, otra que cose calzado en su casa y un operario de una f¨¢brica de cartones) les prestaron el dinero para pagarse a medias el alta de aut¨®nomo para poder acceder a cr¨¦ditos gubernamentales. ¡°Tuvimos que pagar una asesor¨ªa, una auditor¨ªa del ministerio, viajamos mil veces a Madrid a justificar el proyecto, incluso a N¨¢poles a explic¨¢rselo a la Agencia Espacial Europea¡ No somos ni?os ricos¡±, remata Torres, a quien se le nota el orgullo contando una historia que suena extraterrestre en Espa?a y que pill¨® carrerilla cuando ganaron un concurso de la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia en 2010.
El cohete se desarrollar¨¢ por fases: la primera, que arranca ya, pasa por la construcci¨®n de los motores, que ser¨¢n testados dentro de seis meses en un banco de ensayos que construyen en el municipio de Salinas (Alicante). A la segunda fase se unir¨¢n dos empresas m¨¢s, una de Elche y otra de Valencia, para construir el cohete.
¡°Al ministerio lo que le gust¨® fue que con pocas modificaciones podr¨ªa ponerse en ¨®rbita. No hemos recibido ni una subvenci¨®n, son todo cr¨¦ditos que pagaremos con resultados¡± afirma Torres. La inversi¨®n p¨²blica es de 250.000 euros del Ministerio de Econom¨ªa y Competitividad, 300.000 vienen de capital privado, 100.000 de un cr¨¦dito de La Caixa. ¡°Y esta semana, o la que viene, el Instituto Valenciano de Finanzas nos va a aprobar otro de 200.000¡±, contin¨²a. ¡°Hasta hace unos d¨ªas hac¨ªamos coworking, compartiendo mesa y oficina con otras empresas. Nadie te dice c¨®mo se construye un cohete, pero en la vida todo es empezar¡±, a?ade.
¡°Lo lanzaremos desde la base militar del Arenosillo en Huelva¡±, se?ala Torres mientras dice divertido que ¡°no es Cabo Ca?averal [la m¨ªtica base de lanzamientos de Florida, EE UU] pero all¨ª ya se lanzaban cohetes en los sesenta¡±. Y lo cuenta tal cual. A sus 26 a?os y cumpliendo un sue?o. Con casi 800.000 euros en el bolsillo. En la mayor crisis crediticia desde Isabel II. Y ya han contratado a cuatro personas y tres becarios.
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