Mas acepta dialogar sin aplazar la consulta

Si lo que buscaba Mariano Rajoy con su carta a Artur Mas sobre el proceso soberanista catal¨¢n era ganar tiempo para ver si se desinfla la burbuja independentista, la Generalitat se apresur¨® ayer a solemnizar que no le har¨¢ el juego.El Gobierno catal¨¢n acept¨® formalmente la oferta de di¨¢logo ¡°sin fecha de caducidad¡± formulada por el presidente. Pero puso por delante que el objetivo de tal negociaci¨®n no puede ser otra que la celebraci¨®n de una consulta o refer¨¦ndum, y que ¨¦sta debe convocarse en 2014.

La carta de Rajoy s¨ª sirvi¨® para que el nacionalismo catal¨¢n tenga que modificar ligeramente la estrategia en los pr¨®ximos meses. Tanto Converg¨¨ncia i Uni¨® como Esquerra Republicana esperaban un rotundo ¡°no¡± a la consulta, algo que habr¨ªa permitido subir un escal¨®n m¨¢s el nivel reivindicativo y, quiz¨¢s, legitimar ante sus electorados la v¨ªa r¨¢pida hacia la secesi¨®n. Rajoy fue m¨¢s precavido y, pese a que la carta destila negativas por los cuatro costados, ¨¦sta no incluye un no expl¨ªcito a la consulta. De hecho, ni habla de ella directamente.

El portavoz de la Generalitat y mano derecha de Artur Mas, Francesc Homs, tuvo que encajar ayer en el discurso nacionalista esta nueva circunstancia. De ah¨ª que comenzara su valoraci¨®n de la carta asegurando que la Generalitat se toma ¡°seriamente¡± el di¨¢logo que ofrece Rajoy. A rengl¨®n seguido, Homs insisti¨® en que el di¨¢logo no puede servir para diluir la consulta. Lo ¨²ltimo que quiere la Generalitat en este momento es que el clamor popular entre las filas soberanistas se apague con promesas de negociaci¨®n a largo plazo. ¡°El di¨¢logo tambi¨¦n forma parte de nuestros principios, pero no seremos ingenuos con lo que puede representar esto, y en cualquier caso no admitiremos dilaciones en el calendario¡±, concluy¨® Homs.

O sea, que el Gobierno de CiU no var¨ªa su hoja de ruta, que pasa por fijar la fecha de la consulta a finales de este a?o. De celebrarse, la votaci¨®n podr¨ªa tener lugar dentro de un a?o, justo antes de que Escocia celebre su propio refer¨¦ndum de independencia el 18 de septiembre.

Pese a mantener el calendario, las palabras de Homs ayer dejaron entrever cierta perplejidad dentro del Gobierno catal¨¢n. Admiti¨® que se esperaba un ¡°no como una casa¡± y que el redactado final de la carta deja abiertas algunas puertas. ¡°Vete a saber¡±, dijo el portavoz, de forma muy gr¨¢fica.

En cualquier caso, el Gobierno de CiU cree que hay partida, y que ahora es momento de negociar. De ah¨ª que una de las valoraciones menos negativas de la carta de Rajoy saliera desde Uni¨® Democr¨¤tica, el socio de la federaci¨®n CiU que m¨¢s ha insistido en el di¨¢logo y la negociaci¨®n para evitar la senda independentista. Uni¨® llam¨® a ¡°entender¡±, ¡°asumir¡± y ¡°recorrer¡± el camino de la negociaci¨®n, pero tambi¨¦n a?adi¨® que el objetivo final debe ser una consulta ¡°amparada¡± en la legalidad. Lo dijo Ramon Espadaler, consejero de Interior del Gobierno de Artur Mas.

La consulta en 2014 sigue, pues, siendo la primera opci¨®n. Al menos en su discurso p¨²blico. Pero no es la ¨²nica, dada la complejidad del tablero. El propio Mas abri¨® la puerta hace dos semanas a que si no se puede celebrar la consulta el proceso se acabe dirimiendo en unas elecciones auton¨®micas plebiscitarias que se celebrar¨ªan en 2016. El rotundo rechazo de sus socios de ERC a esta opci¨®n, que lo quieren dirimir todo en 2014, hizo recular de inmediato a Mas.

Pero el propio presidente ha insinuado los ¨²ltimos d¨ªas una tercera v¨ªa. Se tratar¨ªa de que, si no hay consulta en 2014, se celebren elecciones auton¨®micas en Catalu?a coincidiendo con las municipales de mayo de 2015. Mas lo apunt¨® en su reciente encuentro con corresponsales extranjeros coincidiendo con la Diada. Ante ¨¦stos record¨® que 2015 es un a?o ¡°fuertemente electoral¡± por la coincidencia de municipales y generales y a?adi¨®: ¡°Si no se puede hacer la consulta. Tendremos que decidir si nos metemos en este calendario electoral o no¡±.

La tesis de celebrar elecciones auton¨®micas coincidiendo con las municipales e intentar darles un car¨¢cter plebiscitario sobre la independencia ha planeado de forma intermitente entre las fuerzas soberanistas. En las filas de Esquerra Republicana genera simpat¨ªa por el car¨¢cter simb¨®lico que tendr¨ªa intentar cambiar el marco pol¨ªtico de una forma radical, como ocurri¨® en las municipales del 12 de abril de 1931, que provocaron el advenimiento de la Segunda Rep¨²blica. Converg¨¨ncia tambi¨¦n lo ha debatido en algunas reuniones internas. La idea, en general, no convence a los dirigentes, aunque ¨¦stos entienden que Mas necesite prever todos los escenarios posibles dado lo complicado de la situaci¨®n. A favor de esta convocatoria electoral pesar¨ªa el hecho de evitar la convocatoria de un refer¨¦ndum ilegal. Y es que el Gobierno de CiU, tambi¨¦n ayer, insisti¨® en que la legalidad es la premisa b¨¢sica del proceso soberanista. Los argumentos en contra son muchos m¨¢s. De entrada, Converg¨¨ncia no quiere hacer experimentos en unas elecciones municipales, especialmente en un momento en que tiene su m¨¢xima cuota de poder. El otro argumento que desaconseja aunar municipales y auton¨®micas es el terror que genera en los cuadros convergentes el fulgurante ascenso de ERC en todas las encuestas a ra¨ªz del proceso soberanista. De momento, son los republicanos y no los convergentes quienes lo est¨¢n capitalizando. Y no quieren que su l¨ªder, Oriol Junqueras, se lo acabe llevando todo.