Recuerdos de suecas y teatros
El actor, que hasta el 10 de noviembre da vida en ¡®La lengua madre¡¯ a un texto de Mill¨¢s, elige un paseo que hila sus lugares favoritos con las an¨¦cdotas de su vasta carrera teatral
1. Plaza de Santa Ana. La plaza Santa Ana era, cuando empezamos, el centro neur¨¢lgico del teatro. Los de fuera ven¨ªamos a mirar a la gente del mundillo, por si pasaba un director y te se?alaba diciendo: ¡°Ese va a hacer mi pr¨®xima obra¡±. La espalda de la iglesia de San Sebasti¨¢n, muy cerca, donde est¨¢ enterrado Lope de Vega, me recordaba a la iglesia de mi pueblo.
2. Museo del Prado. Cuando no hab¨ªa Wikipedia iba al museo para documentarme sobre mis personajes. Ve¨ªa cuadros del XVIII y el XIX para poder visualizar el mundo que propon¨ªan las obras. Luego estudiaba los papeles en el Retiro o el Jard¨ªn Bot¨¢nico. (Paseo del Prado s/n).
3. La Ancha. Ah¨ª est¨¢ Gabino, al que le dices ¡°sorpr¨¦ndeme¡± y te dice lo que tiene cada d¨ªa. Ponen lo que puedes comer en una casa: pochas, ensaladas, pescados, muchos pescados. Sus especialidades son el escalope Armando, la tortilla velazque?a o los dados de merluza con salsa de chipirones (Zorrilla, 7).
4. Torrelodones. Vivo all¨ª, en la zona de La Colonia, es una especie de pueblo, una zona tranquila, sin humos, puedo ir andando a todas partes, a por el pepino que se me ha olvidado comprar. Hay un centro cultural con muchas asociaciones y actividades. Es una delicia. Se puede visitar un restaurante asturiano buen¨ªsimo que se llama El Trasgu (Cudillero, 2).
5. La Central de Callao. Me la descubri¨® Juan Jos¨¦ Mill¨¢s. Es una gozada entrar all¨ª, es otra forma de comprar libros. Es como si estuviera all¨ª puesta de toda la vida, y los libros te estuvieran esperando. El personal es muy competente. Me gusta llevar a mi hijo que tiene 15 a?os y es buen lector (Postigo de San Mart¨ªn, 8).
6. Bar Cock. Un cl¨¢sico que sigue manteniendo su solera. ?bamos en los famosos a?os ochenta, cuando hac¨ªamos todas aquellas barbaridades. Est¨¢bamos all¨ª toda la noche hasta que nos echaban. (Reina, 6).
7. Candela. Era donde nos reun¨ªamos los flamencos, sobre todo en la cueva que hay abajo, donde se tocaba y se cantaba. Lo frecuentaba con mi compadre Enrique Morente. Desde que muri¨® el due?o, Miguelito, hace unos a?os, no he vuelto. (Olmo, 2).
Mon¨®logo sobre la lengua
Juan Diego (1942, Bormujos, Sevilla), protagoniza en el Teatro Espa?ol un mon¨®logo sobre la lengua escrita. El mi¨¦rcoles d¨ªa 9 a las 21.45 habr¨¢ un encuentro con entrada libre, en el que el p¨²blico podr¨¢ charlar con el actor y el equipo.
8. Teatro Espa?ol. En el Espa?ol no hab¨ªa trabajado todav¨ªa. As¨ª que aqu¨ª estoy haciendo de meritorio en la sala peque?a a ver si me promocionan a la sala grande. De joven me intentaba colar para llegar al despacho del director, que era Jos¨¦ Tamayo. Cuando me pillaban dec¨ªa ¡°quiero trabajar en teatro, si no entro, c¨®mo lo voy a hacer¡± (Plaza de Santa Ana).
9. Las Cuevas de Luis Candelas. Cuando trabajamos aquello de ligar con las suecas ¨ªbamos mucho. Tom¨¢bamos sangr¨ªa y yo les contaba que era actor y que el tipo de la puerta vestido de bandolero con su trabuco era mi amigo. Cuando la sangr¨ªa hac¨ªa efecto ¨ªbamos a la zona de los Austrias porque su penumbra es id¨®nea para buscar un beso furtivo (Cuchilleros, 1).
10. Estaci¨®n de Atocha. Cuando llegu¨¦ de mi pueblo, sent¨ª como si entrara en el cuerpo de una madre muy grande. La estaci¨®n de C¨®rdoba, en Sevilla, de la que ven¨ªa, era grande, pero en Madrid todo me parec¨ªa mucho m¨¢s grande. Aunque ha cambiado mucho, la sigo recordando con aquel olor, las maletas de cart¨®n, el vag¨®n de tercera (Plaza del Emperador Carlos V).
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