¡°Suplimos a la Administraci¨®n y eso no debe pasar¡±

Javier Garc¨ªa-Villoslada (Madrid, 1943) lleva tres a?os presidiendo una organizaci¨®n que, en Andaluc¨ªa, cuenta con m¨¢s de 104.000 socios, 33.000 voluntarios y una estructura de 83 asambleas en la comunidad. El ahora presidente de?Cruz Roja en Andaluc¨ªa ha estado ocho a?os al frente de la organizaci¨®n en Ja¨¦n y, con anterioridad, pas¨® 16 a?os como presidente de la asamblea de Linares, donde altern¨® su cargo con su puesto de funcionario de la Administraci¨®n Local. Aunque se?ala el principio de imparcialidad de Cruz Roja ante los poderes p¨²blicos, Garc¨ªa-Villoslada admite que no puede mantenerse neutral ante tragedias como la llegada incesante de inmigrantes a las costas. Tambi¨¦n lamenta que los recortes se ceben con los m¨¢s vulnerables.

Pregunta. ?Con la crisis ha cambiado el papel de Cruz Roja?

Respuesta. Cruz Roja tiene dos objetivos instrumentales: uno es procurar adaptarse a la situaci¨®n de cada momento de la sociedad, y el otro es mejorar la calidad de sus servicios. Y en ese marco general no cabe duda de que nos hemos tenido que adaptar a una nueva situaci¨®n por la cual, aunque Cruz Roja tiene vocaci¨®n de ayuda general, nos debemos sobre todo a los grupos m¨¢s vulnerables. Y ahora muchas personas han pasado a una situaci¨®n de vulnerabilidad importante, gente que se consideraba clase media. Con lo cual tenemos que atender a m¨¢s gente, pero con menos recursos materiales porque tambi¨¦n ha habido recortes en las subvenciones y en los convenios con las Administraciones p¨²blicas.

P. Es una organizaci¨®n que colabora con los poderes p¨²blicos, pero parece que est¨¢n supliendo un papel que le corresponde a la Administraci¨®n. ?Es ahora m¨¢s necesaria que nunca?

R. Las organizaciones sociales siempre han sido y son necesarias. Los titulares de los servicios p¨²blicos son las Administraciones p¨²blicas, que son las que representan a los ciudadanos. Las organizaciones sociales tenemos un papel colaborador, pero hay veces que asumimos un papel sustitutivo y suplimos a la Administraci¨®n, y eso no debe pasar. En estos momentos, y la experiencia lo demuestra, somos m¨¢s imprescindibles que nunca.

P. ?C¨®mo es la solidaridad de los andaluces?

R. Puedo constatar que ha crecido. Ha aumentado nuestro n¨²mero de voluntarios y de socios, a pesar de las bajas por imposibilidad econ¨®mica. Creo que la solidaridad andaluza es superior a la media nacional aunque estemos en un contexto com¨²n.

P. ?Dan sus recursos para cubrir todas las necesidades?

R. Es evidente que no. Prestar servicios a los m¨¢s vulnerables no tiene gratificaciones materiales pero s¨ª espirituales. Sube, por ejemplo, la autoestima del que trabaja en estas organizaciones porque sabe que est¨¢ haciendo algo ¨²til para la gente. Siempre hay que mirar al bosque, pero tambi¨¦n al ¨¢rbol. Lo m¨¢s importante son las personas, no debemos perdernos en grandes programas.

P. ?Cu¨¢l ser¨ªa el rostro de la pobreza en Andaluc¨ªa a consecuencia de la crisis?

R. Ahora hay dos rostros: el de siempre, los que siempre est¨¢n en situaci¨®n de vulnerabilidad y en una cadena de marginaci¨®n permanente, y por otro lado, los nuevos vulnerables, los parados, las familias sin recursos, etc., los que tradicionalmente se han llamado pobres vergonzantes. Esperemos que estas personas, cuando remita la crisis, vuelvan a la situaci¨®n de normalidad, pero sin olvidar que los que ya tienen m¨¢s de 50 a?os y han perdido su empleo parece dif¨ªcil que vayan a recuperarlo. Luego est¨¢ la pobreza energ¨¦tica, que es la de quien no pone el brasero o la calefacci¨®n porque no puede pagar la luz. Y otros tipos de pobreza, como no permitirse acudir al dentista.

P. ?Se pasa hambre?

R. Hambre f¨ªsica puede haber algunos casos ocultos, lo que pasa es que hay una red de solidaridad familiar que ha aumentado notablemente y tambi¨¦n est¨¢ el esfuerzo de las organizaciones sociales. Por eso yo creo que hambre f¨ªsica hay poca, pero con muchos apuros econ¨®micos y teniendo que acudir a esa red de solidaridad s¨ª que hay muchos. Con todo, la que mejor atendida est¨¢ por esa red de solidaridad es la pobreza de alimentos.

P. Se han posicionado contra los desahucios. ?Qu¨¦ hacen?

R. Hemos firmado un convenio con la Consejer¨ªa de Fomento y Vivienda por el cual todas nuestras asambleas asesoran y derivan a los servicios p¨²blicos correspondientes a las familias en riesgo de desahucio. Y en algunos casos extremos podemos incluso ayudar econ¨®micamente y mediar con las entidades financieras para evitarlos.

P. La llegada de inmigrantes a las costas andaluzas no cesa.

R. Los inmigrantes que llegan a nuestras costas lo hacen principalmente a Motril (Granada), Tarifa (C¨¢diz) y Almer¨ªa. Este a?o se ha incrementado sobre todo la llegada a Tarifa. Son, en su mayor¨ªa, norteafricanos y subsaharianos.

P. ?En qu¨¦ situaci¨®n est¨¢n estos inmigrantes cuando llegan? ?C¨®mo es la atenci¨®n en los centros de internamiento?

R. Nosotros tenemos un protocolo de actuaci¨®n, seg¨²n el cual cuando llegan los inmigrantes somos los primeros que los atendemos junto con la Guardia Civil que los recibe tambi¨¦n con gran humanidad. Cruz Roja les presta los primeros servicios sanitarios y deriva a los hospitales a los m¨¢s graves. Pero despu¨¦s ya pasan a los centros de internamiento que, a pesar del esfuerzo que se est¨¢ haciendo por dignificarlos, yo creo que son manifiestamente mejorables.

P. A la vista de tragedias como la de Lampedusa, ?cree que existe la suficiente voluntad de los poderes p¨²blicos para acabar con el tr¨¢fico de personas?

R. A pesar de que uno de los principios de Cruz Roja es el de la imparcialidad ante los poderes p¨²blicos, hechos como el de Lampedusa me parecen indignantes. La comunidad europea tiene que adoptar medidas urgentes porque el Mediterr¨¢neo se est¨¢ convirtiendo en un cementerio de seres humanos: beb¨¦s, ni?os, mujeres y hombres que mueren en el mar, y eso es inaceptable. En este tema no se puede ser neutral.