Muere un hombre aplastado en un edificio en ruinas que pag¨® la UE

El edificio cost¨® 420.000 euros, 300.000 aportados por la Uni¨®n Europea, y las obras remataron en 2002, pero el Centro de Interpretaci¨®n de As G¨¢ndaras de Budi?o fue un fraude, nunca lleg¨® a tener actividad y pronto se convirti¨® en una desolada ruina. Ayer a las dos y media de la tarde, seg¨²n el atestado que levant¨® la Guardia Civil de O Porri?o, un hombre joven muri¨® aplastado por uno de los muros de este inmueble abandonado.

J. B., vecino de este municipio al sur de Vigo, estaba en el lugar con una furgoneta recogiendo chatarra con la ayuda de un compa?ero de nacionalidad portuguesa cuando la pared de esta construcci¨®n completamente ruinosa se desplom¨® sobre ¨¦l. Seg¨²n describen algunas personas cercanas a la familia del fallecido, el hombre no muri¨® en el acto, sino que logr¨® apartar varios de los cascotes para respirar mientras su amigo intentaba rescatarlo. Finalmente, este pidi¨® ayuda a la Guardia Civil, pero ya nadie lo pudo salvar.

Hace varios a?os que los vecinos de la zona dieron la voz de alarma al Ayuntamiento por la situaci¨®n en la que se encontraba y el riesgo que entra?aba el que fue construido, pero no utilizado, como observatorio ornitol¨®gico y centro de interpretaci¨®n de la naturaleza en el humedal de As G¨¢ndaras, junto al pol¨ªgono industrial. El costoso edificio no fue demolido, y tampoco, seg¨²n indicaban ayer algunos vecinos, se colocaron se?ales advirtiendo del peligro en las inmediaciones.

El aula de la naturaleza de As G¨¢ndaras, levantada en tiempos del alcalde Jos¨¦ Manuel Barros por la Mancomunidade de Vigo con una gruesa ayuda europea, cost¨® 420.000 euros y ni tan siquiera lleg¨® a ser inaugurada.

El desinter¨¦s de las Administraciones fue tal que muy pronto fue pasto de los actos vand¨¢licos y de los robos de material de construcci¨®n. Cada vez quedaba menos que llevarse del peligroso recinto sin vigilancia ni precintos. Seg¨²n inform¨® en 2008 La Voz de Galicia, la Uni¨®n Europea lleg¨® a interesarse por el penoso estado de las instalaciones y se propuso recuperar al menos la mitad de la financiaci¨®n aportada para las obras, 150.000 euros procedentes de las ayudas Feder.