El Arts Santa M¨®nica exhibe un di¨¢logo visual entre Roma y Nueva York

Un encuentro puede cambiar la vida y Roma es una de aquellas ciudades que favorecen esa clase de sucesos. As¨ª empez¨® hace veinte a?os la historia personal y profesional de los artistas multidisciplinares y cosmopolitas Marga Clark y Valent¨ª G¨®mez i Oliver, que ahora toma forma en la exposici¨®n Locus Naked, abierta en el centro Arts Santa M¨®nica de Barcelona, hasta el 12 de enero. La muestra plasma un di¨¢logo po¨¦tico visual entre las dos ciudades m¨¢s arquet¨ªpicas del planeta, a partir del encuentro en Roma entre Valent¨ª G¨®mez, poeta y pintor, originario de Barcelona, afincado en la ciudad eterna y Marga Clark, fot¨®grafa y escritora nacida en Madrid y residente en Nueva York.

Roma y Nueva York

¡°Enseguida nos dimos cuenta de que nuestro background era muy diferente, pero que a la vez nuestras vidas discurr¨ªan paralelas, de la misma forma que Roma y Nueva York siendo dos ciudades a primera vista opuestas, tienen muchos puntos de contacto. Una es aparentemente m¨¢s desalmada y la otra m¨¢s espiritual, pero ambas tienen la capacidad de modelar el car¨¢cter y marcar el individuo¡±, asegura Clark. ¡°Ambas ciudades tienen conciencia de lo que son, aunque cada una desea lo que tiene la otra. Ambas son c¨¦lebres por sus puentes y por ser lugares de encuentro y relaci¨®n, ¨¢goras contempor¨¢neas que tras una apariencia de contrarios demuestran una gran similitud en la esencia¡±, a?ade G¨®mez.

Su planteamiento se plasma en un conjunto de obras, que los dos han ido produciendo a lo largo de los a?os: G¨®mez, poemas y dibujos y Clark, fotograf¨ªas, prosas po¨¦ticas y objetos. Como las dos ciudades que han marcado sus vidas e inspirado su trabajo, la obra tanto pl¨¢stica y visual como literaria de los dos creadores tiene muchos puntos de contacto, aunque tambi¨¦n esgrime caracter¨ªsticas absolutamente personales e individuales.

Poeta de formaci¨®n acad¨¦mica cl¨¢sica y docente de la universidad de Roma, G¨®mez tambi¨¦n se dio a conocer por haber traducido textos m¨ªticos, como la edici¨®n castellana de El libro de los muertos, realizada a partir de la versi¨®n directa al italiano del jerogl¨ªfico considerado el texto m¨¢s popular de la literatura religiosa del antiguo Egipto y el mejor documentado que nos ha legado esta civilizaci¨®n. En cambio los textos po¨¦ticos de Clark ¡ª que tiene numerosos libros publicados y en 2008 recibi¨® el Premio Villa de Madrid de poes¨ªa por El olor de tu nombre¡ª son mucho m¨¢s libres, secos. En el caso de Nueva York incluso descarnados. Sus textos acompa?an las im¨¢genes de libros de bibli¨®filo y carpetas fotogr¨¢ficas, de modo que a lo largo de su trayectoria la poes¨ªa se convierte en un elemento articulador y esencial de su obra fotogr¨¢fica, que en 1985 entra en el MOMA de Nueva York con su primer libro titulado: Static Movement. Al lado de su rigurosas im¨¢genes en blanco y negro, los dibujos de G¨®mez, de l¨ªneas onduladas, sinuosas, a veces casi esbozadas, transmiten una sensaci¨®n de ligereza extrema. Adem¨¢s de compartir su vida personal desde el d¨ªa que se encontraron en Roma, tambi¨¦n han realizado diversos proyectos conjuntos, como ¡°un viaje real e imaginario al antiguo mundo maya desde el presente¡±, cuyo resultado ha sido un libro, Flor de Fuego (JS ediciones) y una exposici¨®n centrada en la cosmogon¨ªa maya y en el n¨²mero 12.

Im¨¢genes en blanco

¡°Las piezas demuestran que la reflexi¨®n va cambiando a medida que pasan los a?os¡±, apunta la artista, que trabaja el tema de la memoria tambi¨¦n en unas cajas que llevan en la cubierta la imagen de mujeres an¨®nimas. Las ha bautizado arqueotipos, ¡°objetos que materializan el tiempo detenido y la memoria colapsada de los seres olvidados¡±, indica.

Locus Naked, que se presentar¨¢ pr¨®ximamente en Madrid y las metr¨®polis protagonistas, se completa con un v¨ªdeo de 18 minutos que proyecta en loop un di¨¢logo audiovisual entre Nueva York y Roma cuyas palabras son subrayadas por las im¨¢genes de las dos ciudades fotografiadas por Clark, casi siempre en blanco y negro. ¡°Roma y Nueva York son como un ox¨ªmoron: la antig¨¹edad modernizada y la modernidad anticuada¡±, concluye G¨®mez.

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