Los vecinos de una urbanizaci¨®n de Ferrol piden ¡®asilo¡¯ a Nar¨®n
Los residentes hacen un refer¨¦ndum y el 97% vota a favor de la medida por la falta de alumbrado p¨²blico, seguridad y limpieza
Es un independentismo dom¨¦stico de baja intensidad, pero vecinos de Ciudad Jard¨ªn quieren renegar de su pasaporte ferrolano y pedir asilo en Nar¨®n, el municipio de al lado. No es solo una forma de hablar. Este fin de semana celebraron su propio refer¨¦ndum en el garaje de uno de los 109 chal¨¦s y adosados que dan forma a esta urbanizaci¨®n de O Boial, terreno fronterizo entre Ferrol y Nar¨®n y que, a pesar de su nombre, tiene m¨¢s de ciudad fantasma que de vergel. De los 200 vecinos que tienen contabilizados, 133 mayores y peque?os se desfilaron el s¨¢bado ante un caj¨®n de pl¨¢stico con ranura que hizo las veces de urna para responder una pregunta muy concreta: ¡°?Quieres seguir perteneciendo a Ferrol?¡±. El recuento de las papeletas fue contundente: el 97% votaron que no. Esto es, decir adi¨®s a Ferrol y empadronarse (si les dejan) en Nar¨®n en un alarde de transfuguismo vecinal. Hubo dos votos a favor y otros dos, nulos.
Fue una consulta simb¨®lica pero sintom¨¢tica. Esta abrumadora mayor¨ªa se siente desde?ada por el gobierno ferrolano, Ayuntamiento al que pertenecen sobre el mapa, por una problem¨¢tica urban¨ªstica que colea desde junio del 2012 y que se traduce en penumbra, suciedad y ocupaciones irregulares en un par de casas todav¨ªa en venta.
A Ciudad Jard¨ªn no llega el alumbrado p¨²blico. No se limpian las calles ni se recortan los hierbajos pero 70 familias pagan puntualmente la contribuci¨®n, cuenta Roberto Calvo, que hasta hace bien poco llevaba las riendas de la agrupaci¨®n vecinal. Le preocupan los problemas de salubridad y seguridad en una zona que ha sido objeto de varios robos estos ¨²ltimos meses. Calcula que hay unas 70 casas habitadas y el resto, en venta o embargadas. Cuando entubaron un riachuelo cercano, ratas enormes corr¨ªan por los solares donde no hay parques y sus hijos no pueden jugar porque son poco menos que vertederos urbanos. En los chal¨¦s deshabitados, la maleza escala hasta las ventanas del primer piso y en una esquina de la misma urbanizaci¨®n, viven un grupo de menores tutelados por la Xunta a trav¨¦s de Dignidad.
A escasos metros, y por la misma carretera que conduce a esta urbanizaci¨®n, se levanta Parque Ferrol, un flamante centro comercial que abri¨® en noviembre. Esa v¨ªa est¨¢ se?alizada y repleta de farolas. ¡°Alcalde, seguimos sin luz¡±, le reprochan los vecinos a Jos¨¦ Manuel Rey, del PP, con una pancarta que cuelga en un lateral. Hace poco se adue?aron del paso de peatones, estilo Beatles, para boicotear el acceso a la zona comercial a modo de protesta.
Coinasa, la promotora que est¨¢ detr¨¢s de Proxectos Ciudad Jard¨ªn, SL, se declar¨® en quiebra cuando a la urbanizaci¨®n le faltaba poco por acabar. Dej¨® pendiente una deuda de 1,2 millones con la hacienda local que se corresponden con el 10% del aprovechamiento urban¨ªstico municipal y la parte proporcional del colector de residuos que la firma ten¨ªa que costear. En octubre del 2012, el Gobierno ferrolano anunci¨® que buscaba una f¨®rmula legal para invertir el aval bancario de una inmobiliaria embargada (594.568 euros) en rematar la trama urbana sin perjudicar a los propietarios que han visto c¨®mo la casa de sus sue?os se les quedaba incrustada en una barriada sin iluminar desde hace a?o y medio. Coinasa tiraba de la luz de obra y cuando dej¨® de pagar, Fenosa cort¨® el suministro en las calles. El Ayuntamiento insiste en que como la urbanizaci¨®n no se complet¨®, la responsabilidad legal es de la promotora y ambas partes litigan en los juzgados mientras Ciudad Jard¨ªn sigue a oscuras. ¡°Hace un a?o que vamos por el ayuntamiento y el Gobierno no nos recibe¡±, dice Calvo.
Los vecinos mueven ficha y, por su cuenta, renuncian a su ferrolanidad para mudarse a la ciudad de al lado. Por lo pronto, le han pedido audiencia al regidor naron¨¦s para que los escuche. No son los primeros, en enero del 2011, los residentes de las calles Basanta y Espi?o, muy cerquita de los chal¨¦s de O Boial, ya amagaron con la segregaci¨®n administrativa y empezar a juntar firmas para empadronarse en Nar¨®n.
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