Testigos sit¨²an al tercer imputado por el crimen de Asunta lejos de Galicia

La instrucci¨®n del caso Asunta, la ni?a de Santiago asesinada el 21 de septiembre y cuyos padres, Rosario Porto y Alfonso Basterra, son los principales sospechosos, se ha convertido en un rompecabezas dif¨ªcil de cuadrar en el que se cruzan pruebas irrefutables con testimonios imprecisos y contradictorios. En el rocambolesco sumario no faltan tampoco elementos clave como el ordenador y el m¨®vil de Basterra que fueron localizados inesperadamente donde no estaban cuando se buscaron, lo que apunta a la ayuda de alg¨²n colaborador an¨®nimo que se habr¨ªa colado a hurtadillas en el piso del padre, que sigue encarcelado junto a su exmujer.

El juez mantiene imputado a un tercer hombre cuyo semen fue hallado en la camiseta de la ni?a y al que varios testigos sit¨²an muy lejos de Galicia la tarde noche del crimen. Ayer estas personas declararon desde el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 5 de Navalcarnero (Madrid) por videoconferencia. La pareja del chico dijo que hab¨ªan pasado la tarde juntos busc¨¢ndole un traje de novio con otros familiares. En la misma l¨ªnea testificaron tres empleados de un centro comercial que lo atendieron aquel s¨¢bado. Su letrado, Alberto Mart¨ªn Garc¨ªa, explic¨® adem¨¢s que aportaron a la causa el recibo de un local y fotos de una red social (Facebook), con fecha y hora, que lo situar¨ªan cenando a 600 kil¨®metros de Santiago, donde la autopsia estim¨® que la ni?a falleci¨® por asfixia mec¨¢nica entre las 16 y las 20 horas. Los investigadores consideran que el semen lleg¨® a la ropa de la menor por una contaminaci¨®n en el laboratorio pero ni la Guardia Civil de A Coru?a ni la de Madrid se hacen responsables de este error.

Para la acusaci¨®n popular, que ejerce la asociaci¨®n Clara Campoamor, las explicaciones del entorno del tercer imputado son ¡°relevantes y satisfactorias¡± y descartar¨ªan su implicaci¨®n. No as¨ª para la defensa de Rosario Porto, que en la puerta del juzgado compostelano, volvi¨® a poner en entredicho la coartada del joven. ¡°Yo sigo sin ver nada¡±, declar¨® Jos¨¦ Luis Guti¨¦rrez Aranguren, que opina que la novia del chico ¡°se desdijo¡± y cambi¨® su versi¨®n ¡°a conveniencia¡±. El abogado tambi¨¦n confirm¨® que su defendida se querellar¨¢ contra su antiguo psiquiatra ¡°por un delito de revelaci¨®n de secretos clar¨ªsimo¡±. Aranguren, por su parte, ha sido denunciado por la Guardia Civil por acusar a los investigadores de presionar a testigos para cambiar sus versiones y apuntalar la acusaci¨®n contra los padres de Asunta.

Tres meses y medio despu¨¦s de que el cad¨¢ver de la ni?a, ¡°drogada hasta las cejas con Lorazep¨¢n¡± seg¨²n fuentes del caso, y asfixiada hasta morir con alg¨²n objeto apareciera tendida con mimo en la cuneta de una pista forestal de Teo (A Coru?a), el juez Jos¨¦ Antonio V¨¢zquez Ta¨ªn trata de avanzar en una causa que se enreda casi al mismo ritmo que se van filtrando partes de un sumario que ha ido cayendo por piezas ¡ªcon autos, im¨¢genes, v¨ªdeos y audios¡ª en las parrillas y p¨¢ginas de varios medios de comunicaci¨®n a pesar de las marcas de agua que le fueron colocadas a todas las copias, precisamente, para tratar de evitar filtraciones.

Ta¨ªn, que es titular de la Sala de Instrucci¨®n n¨²mero 2 de Santiago, present¨® ayer una denuncia en el juzgado de guardia de su mismo partido judicial para que ¡°se investigue la procedencia de las grabaciones difundidas por varios medios¡±, inform¨® el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). Lo hizo unas horas despu¨¦s de que un programa de televisi¨®n reprodujera extractos sonoros de la conversaci¨®n que Porto y Basterra mantuvieron en el calabozo de la Guardia Civil cuando ya supon¨ªan que pod¨ªan grabarlos.