Se vende piso okupado por 1.000 euros

Es un mercado poco conocido, pero existe. Y se extiende: la venta y alquiler de casas okupadas. Bandas organizadas ofrecen pisos vac¨ªos ¡ªde familias que han sido desahuciadas o adquiridos por bancos, pero no habitados o, incluso, de protecci¨®n oficial y a¨²n no adjudicados¡ª por un precio de venta de entre 1.000 y 2.000 euros. El alquiler sale, a la larga, m¨¢s caro: por una cantidad que oscila entre los 200 y 400 euros mensuales, estos grupos aseguran la apertura de la puerta de la vivienda, agua y luz. Algunos tienen hasta calefacci¨®n. Y todo gratis. El nuevo inquilino no tiene por qu¨¦ pagar la comunidad de vecinos. El alojamiento est¨¢ asegurado hasta que un juzgado le expulse. Pueden pasar muchos meses, incluso a?os. La Federaci¨®n de Asociaci¨®n de Vecinos (FRAVM) sostiene que el fen¨®meno afecta sobre todo a los barrios del sur de la capital.

??Camino Alto de San Isidro, Carabanchel. Hace unos d¨ªas todo parec¨ªa tranquilo en esta calle del sur de la ciudad. Pero solo era una ilusi¨®n. Los vecinos que caminaban por la calle prefer¨ªan acelerar el paso y mirar hacia el suelo para evitar el contacto visual con tres grupos de hombres que se concentraban frente a unos edificios de protecci¨®n social del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima). Algunas de las personas del bloque llevaban perros y parec¨ªan patrullar.

El precio del ¡®alquiler¡¯ oscila entre 200 y 400 euros mensuales

Un hombre, conocido como El Portugu¨¦s, no pon¨ªa reparos en admitir lo que ocurr¨ªa. ¡°Suelo abrir las puertas de pisos que est¨¢n vac¨ªos por 500 euros, pero si estoy aqu¨ª aburrido, pues venga, puedo cobrar 300¡±. Mientras tanto, uno de sus compa?eros coge una navaja. Solo para afilarla. ¡°Tambi¨¦n ocupo pisos y los alquilo por 300 euros al mes, con luz, agua y gas enganchados. Pero igualmente los puedo vender [ilegalmente] por unos 1.500 euros¡±.

El impago de hipotecas y de alquileres por la crisis econ¨®mica ha generado una doble consecuencia: muchas personas han sido desahuciadas y se han quedado sin hogar, por lo que el n¨²mero de viviendas vac¨ªas se ha incrementado notablemente. Uno de los resultados de esta combinaci¨®n ha sido el aumento de las ocupaciones ilegales: personas sin hogar que aprovechan la ¡°disponibilidad¡± de estas casas. ?Pero c¨®mo saber cu¨¢les carecen de moradores para evitar problemas adicionales?: las bandas organizadas dan una respuesta por cierta cantidad de dinero.

Estas organizaciones delictivas no tienen un poder absoluto sobre una regi¨®n, sino que son peque?os grupos que act¨²an por barrios. Y tienen sus tarifas: entre 200 y 500 euros por abrir la puerta de un piso vac¨ªo; entre 200 y 400 por el alquiler y entre 1.000 y 2.000 euros por la venta.

En Madrid, esos grupos act¨²an sobre todo en el sur, en los distritos de Carabanchel, Villaverde, Usera, Arganzuela y Puente de Vallecas, seg¨²n la Federaci¨®n Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM). En esas zonas de la capital se concentran inmuebles de bancos que est¨¢n desocupados y viviendas p¨²blicas de protecci¨®n del Ivima y de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVS).?En Madrid, hay unas 306.000 casas vac¨ªas, seg¨²n datos de 2011 publicados por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica en abril de 2013. Pero no hay cifras sobre el n¨²mero de ocupaciones ilegales. Nadie sabe cu¨¢ntas son.

? Calle de Godella, San Crist¨®bal. Dos amigos, Antonio y Paco, de entre 20 y 30 a?os, arreglan un coche distra¨ªdamente. No lo parece, pero son parte de una de las bandas del barrio que ocupa ilegalmente inmuebles de bancos para luego venderlos. ¡°Cobramos de media 1.200 euros por un piso de dos o tres habitaciones, cocina y agua, gas y luz enganchados. Y tenemos el mejor precio del barrio, otros grupos te cobrar¨¢n 2.000¡±, explica Paco sin tapujos.

Una vez ocupado el piso, la Polic¨ªa Nacional solo puede coger los datos de los moradores para que comience el proceso judicial. El desahucio ¨²nicamente se produce a partir de una orden del juez. Para Paco, la l¨®gica del negocio es muy sencilla: ¡°La persona que compra [ilegalmente] el piso lo va a ocupar por unos a?os hasta que termine el juicio. No tendr¨¢ que pagar gastos a la comunidad y quiz¨¢, despu¨¦s de unos meses, el banco decida darle un alquiler de 150 euros para ganar algo. O sea, ahorrar¨¢ un mont¨®n¡±.

IU y los vecinos denuncian que las Administraciones hacen caso omiso

La presidenta de la Asociaci¨®n de Vecinos de San Crist¨®bal y concejala de Izquierda Unida, Mar¨ªa del Prado, se?ala que el a?o pasado hubo menos ocupaciones ilegales en su barrio ¡ªuna media de 100¡ª, porque ¡°el boom de los desahucios ya ha pasado y hay menos viviendas vac¨ªas¡±. Paco lo admite: ¡°Antes pod¨ªamos tener hasta unos 10 pisos disponibles para vender, pero ahora mismo tenemos solo dos¡±.

Aun as¨ª, Prado asegura que las asociaciones de vecinos, a trav¨¦s de la FRAVM, llevan cuatro a?os denunciando la actuaci¨®n de esas bandas organizadas sin que nadie les haga caso. La ¨²ltima vez fue el pasado 30 de octubre, cuando el Grupo Municipal de Izquierda Unida llev¨® la queja al pleno del Ayuntamiento de Madrid. La coalici¨®n propuso que se pusiera en marcha un censo en las viviendas de la EMVS. La delegada de Urbanismo y Vivienda, Paz Gonz¨¢lez, asegur¨® entonces que no ten¨ªa conocimiento oficial del problema, si bien el delegado de Seguridad, Enrique N¨²?ez, se comprometi¨® a incrementar la vigilancia para evitar posibles casos de ocupaciones.

La Consejer¨ªa de Vivienda de Madrid, responsable del Ivima, recuerda que destina 5,6 millones para la vigilancia de las viviendas de su propiedad. Sostiene, adem¨¢s, que los agentes investigan si las ocupaciones ilegales se producen mediante estos grupos organizados. La EMVS, a su vez, mantiene que ¡°trabaja de manera estrecha con la polic¨ªa y las comunidades de vecinos para evitar el uso fraudulento de los pisos¡±.

Responsables de la Polic¨ªa Municipal admitieron ayer la existencia del problema, pero insistieron en que su actuaci¨®n solo es posible si cuentan con una orden judicial.

Juan Luis Camarero, portavoz de la Asociaci¨®n de Vecinos del Alto de San Isidro, considera que la ¡°principal medida de seguridad no es incrementar la vigilancia, sino adjudicar r¨¢pido las viviendas vac¨ªas. Es la ¨²nica manera. Las ocupaciones se producen pocos d¨ªas despu¨¦s de un desalojo. El Ivima tapia las puertas, pero luego entran usando una radial sin dificultades¡±.

Por su parte, Vicente P¨¦rez, portavoz de la FRAVM, destaca: ¡°Nosotros no condenamos las ocupaciones de los pisos, porque hay mucha gente que necesita una vivienda y no puede acceder a ella. De lo que estamos en contra son de las organizaciones mafiosas porque intentan aprovecharse de la gente que necesita un piso¡±.

La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ¡ªque viene denunciando numerosos casos de desalojos¡ª afirma que la lista de espera para acceder a viviendas del Ivima y de la EMVS no se mueve desde hace m¨¢s de dos a?os. La Comunidad de Madrid no ha querido ofrecer datos de cu¨¢ntos de sus inmuebles est¨¢n vac¨ªos para ¡°evitar el efecto llamada¡±.

? Calle de la Unanimidad, Villaverde. Durante nueve de sus 33 a?os, ?gueda Hern¨¢ndez vivi¨® en su vieja furgoneta aparcada en esta v¨ªa madrile?a. Cobraba 350 euros de renta m¨ªnima de reinserci¨®n y pidi¨® varias veces un piso de protecci¨®n social a la Comunidad y al Ayuntamiento. Harta, decidi¨® escuchar a los vecinos que le aconsejaban a ocupar un piso p¨²blico de la EMVS en el n¨²mero 27 de la misma calle. ¡°Habl¨¦ con un chico y le pagu¨¦ 200 euros para que abriera la puerta¡±, cuenta.

Cobro 500 por casa pero puedo bajar a 300 Un miembro de la banda

A lo largo de un a?o y medio, ha ido arreglando poco a poco este piso de 40 metros cuadrados y una ¨²nica habitaci¨®n. ¡°Llevaba a?os vac¨ªo y, cuando entr¨¦, solo encontr¨¦ cucarachas. Estaba todo muy deteriorado¡±, recuerda. ¡°Y es que la casa ya hab¨ªa sido ocupada antes por otras personas, y cuando llegu¨¦ ya ten¨ªa luz, agua y gas¡±. Despu¨¦s de una orden de desalojo suspendida, espera nerviosa la resoluci¨®n de su petici¨®n de alquiler social. Quiere legalizar su situaci¨®n lo antes posible. ¡°Es lo ¨²nico que tengo¡±.

"El principal problema es que hay muchas viviendas que est¨¢n vac¨ªas y personas que no tienen hogar. Las personas ocupan un piso porque viven en una situaci¨®n de emergencia social. Y la existencia de estas bandas organizadas tiene su origen en la necesidad urgente de tener un hogar¡±, explica Manuel San Pastor, abogado de la PAH de Madrid. El grupo defiende que las familias ocupen, "a trav¨¦s de la campa?a Obra Social de la PAH", las viviendas que est¨¦n vac¨ªas de los bancos y de protecci¨®n social. ¡°Pero el hecho de que alguien se lucre con eso es condenable de cualquier manera y solo dificulta nuestra lucha por la vivienda digna¡±, argumenta San Pastor.

Una lucha que logr¨® un gran ¨¦xito el pasado mes de octubre cuando el Tribunal Europeo de Derechos Humanos paraliz¨® el desahucio de un edificio ocupado en marzo de 2013 en Salt, Girona. Estrasburgo consider¨® que el desahucio no podr¨ªa producirse sin saber qu¨¦ iba a hacer el Gobierno con las 16 familias y, sobre todo, con los ni?os. El pasado noviembre, el tribunal levant¨® la paralizaci¨®n y las personas fueron trasladadas y alojadas en casas protegidas o cedidas.

? Calle de los Voluntarios Macabebes, Legazpi. Las ventanas del bajo del edificio n¨²mero cuatro, que pertenece a Bankia, est¨¢n tapiadas con ladrillo y cemento para evitar la entrada de las bandas organizadas, algo que ocurri¨® hasta el pasado octubre. La iniciativa fue de los propios vecinos. ¡°El problema es que cuatro d¨ªas despu¨¦s de un desalojo, volv¨ªan a ocuparlo¡±, indica Anita Garc¨ªa, portavoz de la Asociaci¨®n de Vecinos Nudo Sur. En concreto, este piso funcionaba como una pensi¨®n: los okupas alquilaban colchones por cinco euros la noche y los vecinos ya estaban hartos de los ruidos y del esc¨¢ndalo que se produc¨ªa, sobre todo, durante las madrugadas. ¡°Los propietarios deben hacerse cargo de tapiar el piso, pero los bancos siempre se lavan las manos y no hacen nada¡±, se queja Garc¨ªa.

Una portavoz de Bankia explica que, tras el aviso de una ocupaci¨®n, env¨ªan a un empleado de la entidad bancaria para sacar fotos y hacer un informe, que luego es enviado al departamento jur¨ªdico para que comience el proceso judicial.

Las cifras oficiales se?alan que en Madrid hay 306.000 pisos vac¨ªos

Cuando se trata de una ocupaci¨®n ilegal, Bankia no negocia un posible alquiler social. ¡°Esta posibilidad solo existe cuando se trata de alguien que vive legalmente y no puede pagar la hipoteca¡±, sostiene la portavoz. Para evitar la entrada en las viviendas, Bankia refuerza las cerraduras y tapia las ventanas, se?alan.

? Calle del Pintor Sorolla, Entrev¨ªas. Sonia, una joven gitana que aparenta unos 16 a?os lleva m¨¢s de un a?o ocupando, con otras 20 familias, todo el edificio 1-B, conocido como el bloque azul. ¡°Aqu¨ª hay de todo: espa?oles, ecuatorianos, peruanos, gitanos...¡±, cuenta.

Paga un alquiler de 300 euros, mientras su amiga, Jandira, abona 200. ¡°Es que mi piso es m¨¢s grande y tiene dos habitaciones, pero no pago nada m¨¢s. Agua, luz y gas est¨¢n ya enganchados¡±, asevera. ¡°Este edificio ya est¨¢ todo ocupado, pero venga, hay otros vac¨ªos. Un segundo, voy a llamar al t¨ªo Kiko para que le cuente...¡±.