Los expertos acreditan el expolio de las hijas de Mu?oz Ramonet
El Ayuntamiento certifica que las obras de los grandes autores han desaparecido del palacete. Solo 85 de los 1.364 objetos hallados son valiosos
Nada de nada. Los expertos del Ayuntamiento de Barcelona han comprobado lo que los inventarios ya dejaban entrever: que la fabulosa colecci¨®n de arte que dej¨® en herencia el industrial Julio Mu?oz Ramonet a Barcelona en mayo de 1991, ha desaparecido de su palacete de la calle Muntaner.
En el informe que los especialistas han entregado al patronato de la Fundaci¨®n Julio Mu?oz Ramonet, reunido el 6 de febrero, suscriben que de los 1.364 objetos inventariados que permanecen en la casa ¡ªpinturas, alfombras, jarrones, muebles, cubiertos, ropa de cama...¡ª, apenas 85 tienen valor patrimonial. Y lo m¨¢s destacable es que entre ellos no se encuentra ninguna obra de los grandes maestros de la pintura como Vel¨¢zquez, El Greco, Goya, Murillo, Rembrandt, Fortuny, Sorolla, pero tambi¨¦n Delacroix, Monet, Berruguete, Ribalta, Tiepolo, Tiziano e, incluso, Boticelli, que atesoraba la colecci¨®n original. Tampoco han encontrado ninguna de las tablas g¨®ticas que durante a?os luc¨ªan en la galer¨ªa del primer piso y que tanto impresionaban a los visitantes de la casa de Mu?oz Ramonet. Seg¨²n los expertos, s¨®lo han quedado ¡°las piezas de menor atractivo decorativo y las de calidad m¨¢s baja¡±.
La mayor¨ªa de las obras del palacete son de autores comerciales de los 50
Tras recibir las llaves del juzgado, el pasado 25 de julio, el Ayuntamiento pudo acceder por primera vez a la casa tras 17 a?os de litigio con Carmen, Isabel, Alejandra y Helena Mu?oz Villalonga, las cuatro hijas del industrial. Los responsables municipales se encontraron con un paisaje desolador: pese a que en el interior del edificio hab¨ªa cerca de 600 cuadros repartidos por toda la casa, colgados en las paredes y acumulados en pasillos y habitaciones, pocos tienen un valor relevante.
Tras el ¡°inventario de presencia¡± de los objetos realizado por la empresa Veraicon, el Ayuntamiento encarg¨® a un equipo de t¨¦cnicos coordinados por N¨²ria Rivero, jefa de proyectos de la Direcci¨®n de Patrimonio, Museo y Archivos del Icub, la elaboraci¨®n de un informe para saber qu¨¦ valor patrimonial ten¨ªan todos estos objetos. Despu¨¦s de seis meses de trabajo se ha podido determinar que el 50% de las obras son del siglo XX y el resto, casi todo pinturas, esculturas y dibujos del XIX. Tan solo hay un grupo reducido de obras de cronolog¨ªa anterior. Entre ellos: siete tapices realizados entre los siglos XVI-XVIII situados en el vest¨ªbulo y los salones de la planta baja creados en B¨¦lgica y Francia; nueve obras del siglo XVIII; diez del siglo XVII; una escultura del siglo XVI y un Cristo crucificado del siglo XIV.
Los expertos, de todo el conjunto de objetos que llenan la casa en una especie de horror vacui, destacan un conjunto de ocho obras con un valor mayor. Se trata de cinco pinturas de gran formato con escenas de la Historia de Jos¨¦ en Egipto, atribuidas a Antoni Viladomat (1678-1755), el pintor m¨¢s importante del barroco catal¨¢n, un autor de moda porque protagonizar¨¢ cuatro exposiciones este a?o, una de ellas en el Museo Nacional de Arte de Catalu?a, coincidiendo con la celebraci¨®n del 1714. Las otras tres son pinturas realizadas por Pascual Bailon (muerto alrededor de 1691), uno de los maestros de Viladomat, que representan escenas de la Historia de Mois¨¦s en su regreso a la tierra de Cana¨¢n, seg¨²n ha determinado Francesc Miralpeix, uno de los mayores expertos en estos pintores, consultado para identificar y situar estas obras. Sin duda, son pinturas importantes para la historia del arte catal¨¢n, pero obras menores comparadas con las de las grandes firmas que han desaparecido. El informe ni menciona, por considerarlas falsas, obras como un peque?o rembrandt ovalado y las pinturas de Anglada Camarasa, Ramon Casas, Joaquim Mir y el grotesco Pr¨ªncipe Jes¨²s atribuido a Vel¨¢zquez, por mucho que en las cartelas se puedan leer el nombre de estos artistas.
En opini¨®n de los expertos, la mayor¨ªa de las obras conservadas son de pintores contempor¨¢neos figurativos calificados de ¡°comerciales¡±. Abundaban en los inventarios que se han ido conociendo y realizando durante la larga causa judicial, como los de 1968, 1989 y 2005. Entre los autores: Jordi Curos, con m¨¢s de cien obras, Jordi Roll¨¤n (22), Arcadi Orp¨ª (84), Michelle Broeders (14) o Joan Josep Gar¨ª (41). El informe califica el conjunto de ¡°irregular¡± ya que las obras no ¡°parecen haber estado escogidas por criterios de excelencia o rareza que tendr¨ªa en cuenta un coleccionista aut¨¦ntico, sino seguramente con un af¨¢n meramente decorativo, y en algunos casos determinados, de relaci¨®n personal con sus autores¡±. Llevan raz¨®n. Durante a?os, Mu?oz Ramonet compr¨® todas las obras que pintaba Ramon Aguilar More (se han identificado 69), hermano de un famoso cardi¨®logo que evit¨® con un certificado m¨¦dico que Mu?oz tuviera que presentarse ante un juez en Suiza.
Entre los pocos cuadros
En cuanto a los muebles, la mayor¨ªa son de alrededor de 1945 cuando la casa se decor¨® por la empresa madrile?a de Antonio Herraiz. Muchas de las cer¨¢micas son porcelanas de Sevres con poco valor art¨ªstico, siendo la t¨ªpica, destaca el informe, que us¨® la alta burgues¨ªa de los a?os cuarenta del siglo pasado para decorar sus casas. Como curiosidad, las alfombras que cubren el suelo fueron realizadas a medida por la empresa Aymat de Sant Cugat que tambi¨¦n fabric¨® las de la Generalitat o las del Palacio de Pedralbes.
Adem¨¢s de Rivero, han elaborado el informe Francesc Fontbona, especialista en pintura y escultura del siglo XIX y XX; Bonaventura Bassegoda, especialista en pintura y escultura de los siglos XVI al XVIII; M¨®nica Piera, especialista en muebles y los conservadores del Museo del Dise?o de Barcelona Josep Capsir (artes decorativas), M. Ant¨°nia Casanovas (cer¨¢mica) y Silvia Ventosa (textil e indumentaria).
A partir de ahora, el siguiente paso es determinar qu¨¦ patrimonio hab¨ªa en el interior de la casa en el momento de morir Mu?oz Ramonet y determinar qu¨¦ se ha perdido. Entonces se reclamar¨¢ judicialmente por v¨ªa penal su devoluci¨®n a las cuatro hijas de Mu?oz Ramonet, algo que ya anunci¨® en agosto el concejal de Cultura Jaume Ciurana: ¡°Instaremos a ejecutar hasta el final la sentencia conseguida por la v¨ªa civil y estudiamos usar adem¨¢s la v¨ªa penal para recuperar los bienes que faltan¡±. Todav¨ªa hay mucho camino legal por recorrer.
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