La rueda del Eibar

Cuando los n¨²meros hablan, los esc¨¦pticos acostumbran a ser amplia mayor¨ªa. Sin embargo, de acuerdo a la estad¨ªstica de los ¨²ltimos diecis¨¦is a?os (periodo en el que la Segunda Divisi¨®n ha contado con 42 jornadas), el Eibar tiene un 100% de posibilidades de acabar entre los seis primeros de la clasificaci¨®n (lugar que, como m¨ªnimo, asegurar¨ªa poder jugar la ronda de play-off). M¨¢s a¨²n: aquellos equipos que en temporadas pasadas lideraron la tabla por estas fechas, en un 62,5% de las ocasiones finalizaron la temporada en el mismo lugar.

Aunque los n¨²meros en el mundo del f¨²tbol son simplemente eso, n¨²meros, hasta el aficionado m¨¢s receloso es consciente de que en este caso la estad¨ªstica no est¨¢ desprovista de una labor colectiva y ¨Csobre todo- humana del equipo eibarr¨¦s. Causa suficiente para imaginar que la meta de la permanencia a d¨ªa de hoy puede quedarse corta. ¡°La rueda del Eibar es producto de la continuaci¨®n de una idea, no funcionar¨ªa si no estuvi¨¦ramos todos enchufados¡± se?ala Fran Garagarza, encargado de la direcci¨®n deportiva.

El Eibar no hace tanto era un habitual de la Segunda Divisi¨®n espa?ola, y ahora parece haber tomado una din¨¢mica que, por qu¨¦ no, le puede enviar a Primera (terreno que, por cierto, es del todo desconocido a pesar de ser un hist¨®rico del f¨²tbol nacional). Ser l¨ªder a estas alturas de la temporada seguramente no supone un seguro de vida para una entidad de recursos tan limitados. Y por eso, por mucho que la historia reciente diga lo contrario, la filosof¨ªa del ¡°partido a partido¡± est¨¢ bajo la protecci¨®n de cualquier miembro del club. De hecho, la experiencia les ha ense?ado que ¨¦ste es el mejor camino para ahorrarse decepciones futuras. Adem¨¢s, el club cuenta con la ventaja de haber vivido la peripecia de la temporada 2004-05 (la mejor de su historia), cuando el equipo de los David Silva, Joseba Llorente, Gorka Iraizoz y el propio Gaizka Garitano (actualmente al mando del equipo) se qued¨® a tres puntos del ascenso.

En ese sentido, la afici¨®n del equipo armero puede estar tranquila, porque Garitano lo tiene claro: ¡°En el mundo del f¨²tbol pensar a largo plazo no funciona para un club como el Eibar¡±, asegura a EL PA?S. El ¡°tim¨®n del barco¡±, tal y como le apod¨® Jon Errasti (uno de los pilares en el centro del campo actualmente) cuando este diario contact¨® con el jugador, ¡°siempre se ocupa de transmitir confianza y un gran saber estar en todos los campos¡±. Precisamente, el ideal cortoplacista de la plantilla es una de las claves que explican por qu¨¦ el equipo m¨¢s modesto de la Liga Adelante corona la divisi¨®n de plata despu¨¦s haber estado en Segunda B un a?o antes.

El sistema t¨¢ctico de Garitano: un esquema robusto y dif¨ªcil de tutear al otro lado del campo

Pero si hablamos de claves, el fen¨®meno que se congrega cada domingo en Ipurua es sin duda la mejor representaci¨®n de lo que significa la Sociedad Deportiva Eibar. ¡°El secreto del ¨¦xito son los jugadores¡±, dice Garitano, aunque si de algo pueden presumir entrenador y jugadores es de la afici¨®n. ¡°Cuando est¨¢bamos en Segunda B ya nos apoyaban mil y pico espectadores. Ahora que estamos batiendo cifras de r¨¦cord, el aforo llega a las 3.000 personas¡±, comenta Garagarza. S¨®lo as¨ª se entiende que Girona, Mallorca y Numancia hayan sido los ¨²nicos rivales que han podido arrebatarle los tres puntos en casa. Ipurua ha sido el estadio que menos goles ha encajado (9) en toda la categor¨ªa; cifra que s¨®lo igualan el estadio del Alcorc¨®n y el del Real Ja¨¦n.

La val¨ªa de este equipo reside en la dedicaci¨®n y la pasi¨®n con la que trabaja cada miembro del club en el d¨ªa a d¨ªa. As¨ª lo atestigua el sistema t¨¢ctico de Garitano: un esquema robusto y dif¨ªcil de tutear si est¨¢s al otro lado del campo. Un sistema cimentado con personas de ¡°gran valor humano¡±, comenta Garagarza, quien admite que la secretar¨ªa t¨¦cnica tiene muy en cuenta la personalidad de los jugadores para poder fichar por el club. ¡°Buscamos jugadores que sepan lo que supone venir al Eibar¡±, a?ade. Un club en el que no van a contar con la atenci¨®n m¨¦dica recomendada (la m¨¦dico no viaja con los jugadores) y en el que la econom¨ªa juega a contracorriente.

En cuanto a este ¨²ltimo aspecto, si bien es verdad que el Eibar no debe nada a nadie (no tiene deudas), hace unos d¨ªas el Consejo Superior de Deportes se puso en contacto con el Eibar para advertirle de que la legislaci¨®n de Segunda Divisi¨®n obliga al club armero a ampliar su capital social a 1,7 millones antes del pr¨®ximo 6 de agosto. De lo contrario, el Eibar podr¨ªa ¡°perder en los despachos lo que est¨¢ ganando de manera meritoria en los terrenos de juego¡±, fueron las palabras que el juntero Mart¨ªn Ibabe (PNV) utiliz¨® esta semana para dirigirse a la Diputaci¨®n de Gipuzkoa con la intenci¨®n de que la instituci¨®n foral tome medidas al respecto.

En palabras del socialista Miguel de los Toyos, alcalde de Eibar, la ley es ¡°injusta¡± para un club referente como el Eibar, que siempre ha demostrado ser una ¡°entidad mod¨¦lico¡± para cualquier club de la categor¨ªa. Sin embargo, ¡°las leyes est¨¢n ah¨ª para cumplirlas¡±, afirmaba con cierto tono de resignaci¨®n. En la misma l¨ªnea, I?aki Barahona, aficionado e hijo del ex vicepresidente del club, V¨ªctor Jos¨¦ Barahona, que estuvo en la directiva de 1974 a 1989, se siente indignado ante una ley que pone frenos al equipo ¡°con menos presupuesto de Segunda A¡±.

Atendiendo a estos condicionantes, parece evidente que aquellos jugadores interesados en vestir la zamarra azulgrana no se mueven por optimizar su cuenta corriente. En el mejor de los casos, el Eibar puede funcionar como ¡°equipo puente¡± para llamar la atenci¨®n de clubes con mayor entidad. Es el caso de Yuri Berchiche y Dani Garc¨ªa, (ambos incluidos en el mejor once de la primera vuelta de la Liga Adelante, quienes est¨¢n en calidad de cedidos y son propiedad de la Real Sociedad (en el caso del primero, el pasado mes de enero renov¨® con el equipo ¡®txuri-urdin¡¯ hasta 2016).

Con todo, es curioso c¨®mo tanto dentro y fuera del estadio, club y afici¨®n coinciden con exactitud a la hora de analizar lo que resta de temporada. Mientras Jon Errasti considera ¡°un sue?o¡± subir a Primera, en la mente de Garitano solo hay un horizonte: ¡°el pr¨®ximo partido¡±. De la misma forma, Barahona admite que la permanencia y ampliar el capital social son los objetivos de mayor necesidad. En cualquier caso, independientemente de cu¨¢les puedan ser los objetivos, el entorno del club coincide en un aspecto: al Eibar no le hace falta un ascenso para sentirse un equipo de primera.