Barreiros ignora el pinchazo de la burbuja y planea miles de viviendas
El municipio, con 3.300 habitantes, insiste en construir para m¨¢s de 25.000
El primer plan de urbanismo con que contar¨¢ el Ayuntamiento de Barreiros, en la costa de Lugo, estaba llamado a ordenar la ca¨®tica proliferaci¨®n de segundas residencias que comenzaron a levantarse all¨ª hace una d¨¦cada. Fue como un s¨ªmbolo de la burbuja inmobiliaria en Galicia, hasta que en 2007 la Xunta bipartita decidi¨® paralizar la construcci¨®n en el municipio. Pero el esperado documento, que no ha pasado todav¨ªa de un muy inicial borrador elaborado solo a efectos ambientales, ya no convence al actual Gobierno gallego, del mismo color pol¨ªtico que el Ayuntamiento, del PP. La Xunta critica los ¡°datos contradictorios¡± que maneja sobre el crecimiento demogr¨¢fico del municipio y lo ¡°confuso¡± y ¡°sin justificaci¨®n¡± de algunas recalificaciones, que el gobierno local defiende como necesarias para ordenar lo que ya se ha ido construyendo ilegalmente.
?La Conseller¨ªa de Medio Ambiente ha respondido al primer borrador del futuro Plan Xeral de Ordenaci¨®n Municipal (PXOM) recordando que seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) Barreiros tiene apenas 3.200 habitantes pero cuenta con m¨¢s de 3.500 segundas residencias o viviendas vac¨ªas. La Xunta se?ala que, seg¨²n admite el propio Ayuntamiento, esas casas ya construidas y otras que est¨¢n a medio levantar ¡°pueden cubrir unas necesidades por encima de los 25.000 habitantes¡±, por lo que para el Gobierno gallego ¡°no se justifica la necesidad de programar nuevos desarrollos residenciales¡±. Es lo que pretende el Ayuntamiento al recalificar como urbanizables dos nuevos sectores en el lugar de San Bartolo, en la llanura litoral del municipio, que para Medio Ambiente ¡°no tienen justificaci¨®n alguna dado que pretenden generar nuevas bolsas de suelo para el desarrollo urban¨ªstico en una zona que actualmente presenta una considerable saturaci¨®n edificatoria¡±.
La Xunta no se acaba de creer el argumento municipal de que esas y otras seis grandes recalificaciones servir¨¢n solo para ordenar zonas en las que ya se hab¨ªa comenzado a construir de forma ca¨®tica. Incluso ironiza con ello: ¡°Llama la atenci¨®n que de todas las categor¨ªas de suelo contempladas en la alternativa propuesta, la ¨²nica que no presenta una delimitaci¨®n cartogr¨¢fica precisa es la referida a los ¨¢mbitos designados para la recalificaci¨®n (sectores urbanizables), los cuales son representados mediante una trama difusa en la que no se define el per¨ªmetro con claridad¡±.
Por otra parte, el Ayuntamiento argumenta que su nuevo plan apostar¨¢ por los usos hoteleros frente a las segundas residencias, pero para la Xunta tambi¨¦n ¡°llama la atenci¨®n¡± que el documento no detalle d¨®nde. El Gobierno gallego considera que los objetivos globales del plan ¡°no fueron establecidos con claridad¡± y que el borrador que le entreg¨® el Ayuntamiento ¡°presenta un componente ¨²nicamente descriptivo y no propositivo¡±. Incluso esas pocas propuestas que plantea el borrador ambiental del plan merecen alg¨²n tipo de censura de Medio Ambiente: ¡°No pueden validarse como objetivos del PXOM de Barreiros todos los relacionados con la aplicaci¨®n de normativa o legislaci¨®n sectorial dado que todos ellos son aspectos de obligado cumplimiento¡±.
Los reproches auton¨®micos hacia el documento municipal son m¨²ltiples: es ¡°muy esquem¨¢tico¡±; ¡°el an¨¢lisis del paisaje es muy gen¨¦rico¡±; ¡°no referenci¨® en su cartograf¨ªa ni los bienes patrimoniales ni el trazado del Camino del Norte¡±; o ¡°no presenta un an¨¢lisis coherente de la previsible evoluci¨®n demogr¨¢fica¡±. La Xunta critica que incluso una de las dos grandes alternativas de desarrollo urban¨ªstico planteadas "no puede considerarse v¨¢lida dado que incumple la legislaci¨®n vigente".
El plan que elabora Barreiros sigue contemplando la inversi¨®n de 14 millones de euros para dotar de servicios urbanos a cientos de viviendas irregulares que carecen de ellos. La intenci¨®n original de la Xunta era acometerlos con fondos p¨²blicos a trav¨¦s un convenio con el Ayuntamiento y la Diputaci¨®n, que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia anul¨® hace ocho meses. Ahora el Gobierno gallego se limita a reclamar a Barreiros que su plan incluya ¡°una concisa justificaci¨®n de las previsiones para su financiaci¨®n¡±. Todas estas apreciaciones las recoge la Xunta en el denominado Documento de Referencia, una gu¨ªa de cumplimiento obligatorio que ahora deber¨¢ seguir el Ayuntamiento para analizar correctamente el impacto ambiental del futuro plan.
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