Pistas de un saqueo vikingo en un yacimiento desprotegido

"El mar hizo de las suyas, para mal y para bien", responde Manuel Miranda, portavoz de Mari?aPatrimonio, cuando se le pregunta c¨®mo es posible que apareciesen ahora en O Vicedo, a la luz del d¨ªa entre rocas y arena, dos enormes anclas de piedra y puede que m¨¢s de medio centenar de lastres de s¨ªlex que podr¨ªan rondar los 10 u 11 siglos de antig¨¹edad. Los mismos temporales que han minado la deteriorada salud de varios yacimientos en la costa de Lugo han tra¨ªdo al menos una buena noticia a la playa de San Rom¨¢n, dominada por el promontorio de Os Moutill¨®s, un misterioso sitio arqueol¨®gico todav¨ªa sin investigar que algunos expertos comparan con un tipo de fortificaci¨®n normanda presente en el norte de Europa, las llamadas motte & bailey (mota y patio). Aprovechando un d¨ªa de tregua, Miranda y otros miembros de este colectivo de defensa del patrimonio hist¨®rico salieron a levantar acta de los destrozos, y se encontraron con el regalo inesperado en el arenal de O Vicedo tantas veces recorrido. Una de las anclas, m¨¢s afilada en la punta y de una tipolog¨ªa desconocida entre las de la Edad Media en Galicia, result¨® pesar 127 kilos. La otra, m¨¢s peque?a, semejante a algunas descubiertas en la comunidad anteriormente, alcanzaba los 66 en la b¨¢scula. Mari?aPatrimonio pregunt¨® a los marineros de la zona, y todos coincidieron en que semejantes pesos solo pod¨ªan corresponderse con grandes embarcaciones, no simples barcas de pescadores, que es por las que siempre se crey¨® que a aquel punto concreto en el que aparecieron las anclas y los lastres se le conoce como O Porto.

La toponimia, a Miranda, siempre le da las primeras pistas. As¨ª fue cuando identific¨®, con el asesoramiento de estudiosos apasionados como Manuel Gago, un probable motte & bailey en Os Moutill¨®s, y nuevamente ahora el nombre de lugar vuelve a sugerir algo, aunque mucho m¨¢s obvio es el de otro sitio, en San Cibrao (Cervo), conocido como Os Lastres: era el punto concreto en el que los mercantes antiguos se liberaban de la pesada carga de piedras que tra¨ªan a bordo. "Las usaban para equilibrarse en alta mar, porque ven¨ªan vac¨ªos de mercanc¨ªa. Aqu¨ª las tiraban y las sustitu¨ªan por las materias que ven¨ªan a buscar. Hab¨ªa mucho comercio entre A Mari?a e Inglaterra". Pero la playa de San Rom¨¢n, situada entre dos r¨ªas, "nunca fue un buen puerto". Bien cerca los hab¨ªa mucho m¨¢s aconsejables para el atraque. Ese es otro de los indicios que hace sospechar a Mari?aPatrimonio de las turbias intenciones que tra¨ªan los que usaban el arenal de O Vicedo y vaciaban all¨ª su carga de piedras.

As¨ª como las anclas est¨¢n labradas en grandes bloques de una piedra com¨²n en la zona, gneis u "ollo de sapo", los lastres son de s¨ªlex, un material casi ajeno a la geolog¨ªa gallega y muy abundante en las costas inglesa y normanda. "Los utensilios de s¨ªlex, cuando aparecen en la costa, es que los trajo un barco, porque es pr¨¢cticamente inexistente aqu¨ª", explica la voz del colectivo. "Con el tiempo, despu¨¦s de encontr¨¢rmelos ya en varias ocasiones -porque buscando en las playas aparecen- aprend¨ª a distinguir perfectamente los lastres fabricados con esta roca. Pero los que hab¨ªa visto hasta ahora en San Cibrao pod¨ªan pesar poco m¨¢s de un kilo", sigue contando Manuel Miranda. "En O Vicedo, en cambio, los hay de hasta 200. Nosotros tenemos fotograf¨ªas de unos 30 ejemplares, pero hay m¨¢s. M¨¢s de medio centenar... Puede que unos 100".

Como hace siempre que descubre algo nuevo (algo que suele suceder varias veces al a?o en un paisaje cuajado de secretos antiguos y vagamente explorado), Mari?aPatrimonio consulta con arque¨®logos e informa a la Conseller¨ªa de Cultura para que esta movilice a sus t¨¦cnicos y catalogue el hallazgo. Sin embargo, aunque ya en 2011 alert¨® a Patrimonio de la existencia de un extra?o sitio arqueol¨®gico en San Rom¨¢n que podr¨ªa tratarse de una fortificaci¨®n vikinga, el departamento de la Xunta, seg¨²n el colectivo de A Mari?a, no lo ha incluido como yacimiento en su inventario y, por lo tanto, Os Moutill¨®s "carece de protecci¨®n". Con el nuevo descubrimiento, el Gobierno local de O Vicedo intenta ahora tambi¨¦n despertar el inter¨¦s de la Conseller¨ªa, que en su momento consider¨® que la loma circular en la que algunos ven una construcci¨®n estrat¨¦gica de los piratas n¨®rdicos no era ni un castro ni un asentamiento del tipo motte & bailey. En el municipio piden que se investigue este lugar diferente para poder afirmar o negar todas las interpretaciones que se le han dado desde que hace tres a?os el hallazgo abri¨® el debate. Los vecinos del lugar, lo ¨²nico que saben, es que all¨ª mismo y en los alrededores, desde siempre, han aparecido vestigios del pasado con solo escarbar un poco. Tambi¨¦n huesos humanos. ?