Barcelona - Venecia, ida y vuelta

?Por qu¨¦ una silla dentro de un museo es una obra de arte, mientras que en la calle es tan s¨®lo eso, una silla? Aurea Gonzales, ecuatoriana en paro, con 45 a?os muy bien llevados, cuatro hijos y cinco nietos, se formul¨® la pregunta, una de las cuestiones clave del arte a partir del conceptual, cuando la llevaron al Museo de Arte Contempor¨¢neo de Barcelona (Macba) para elegir una obra que formar¨ªa parte del proyecto del Pabell¨®n de Catalu?a en la Bienal de Venecia 2013. Titulada 25%,el porcentaje de parados en Catalu?a, la propuesta de Francesc Torres y Mercedes ?lvarez, bajo la batuta de Jordi Ball¨®, se concibi¨® con la voluntad de visibilizar la lacra del desempleo a trav¨¦s de ocho personas, representativas de un amplio espectro de la poblaci¨®n en paro.

La exposici¨®n formada por las fotograf¨ªas de Torres y los v¨ªdeos de ?lvarez, juntos con la pieza de la colecci¨®n del Macba elegida por cada parado m¨¢s un objeto personal que le valiera la consideraci¨®n de una obra de arte, se presenta hasta el 27 de julio en el Palau de la Virreina de Barcelona con un montaje, por necesidades log¨ªsticas, m¨¢s fragmentado, pero muy logrado. El ¨²nico elemento a?adido es un v¨ªdeo, que inmortaliza las reacciones de los ocho durante su visita al Pabell¨®n veneciano, al verse convertidos en protagonistas de un proyecto art¨ªstico.

Un a?o despu¨¦s su perplejidad permanece y siguen sin entender bien que relaci¨®n hay, si la hay, entre arte y paro. ¡°La verdad que yo no le veo la relaci¨®n. Nunca hab¨ªa entrado en el Macba y el arte contempor¨¢neo me sorprendi¨®, de hecho sigue sorprendi¨¦ndome, por eso eleg¨ª el ladrillo de Jaume Xifra¡±, revela Pedro Gonz¨¢lez, que lleg¨® al proyecto a trav¨¦s de Comisiones Obreras.

¡°El arte contempor¨¢neo no desprende lo que, por ejemplo, Las Meninas. De ah¨ª que la reflexi¨®n sobre el valor del arte, el valor de uso y el valor de cambio, as¨ª como la legitimaci¨®n y solemnidad que otorga el espacio del museo, fueran elementos centrales, mientras que la sorpresa fue el sentimiento predominante. En los v¨ªdeos intento reflejar estas distorsiones¡±, indica ?lvarez, que en su carrera de cineasta, antes de esta experiencia, no se hab¨ªa enfrentado nunca a un espacio museal.

Desgraciadamente no s¨®lo perduran las dudas, sino tambi¨¦n el paro: la inclusi¨®n en una muestra de arte no les abri¨® las puertas de la fama y ni siquiera de un trabajo digno. Todos siguen con sus vidas y el ¨²nico que ha conservado de cierta forma una relaci¨®n con el mundo del arte es Kheraba Drame, personalidad destacada de la comunidad africana de Catalu?a, que actualmente participa en un proyecto de Nuria G¨¹ell, producido por el Macba. ¡°Vali¨® la pena. El arte nos ense?¨® un camino desconocido, nos mostr¨® nuevas v¨ªas para desarrollar¡±, concluye Alejandro Rold¨¢n, un ex metalmec¨¢nico que qued¨® fascinado por los cortes limpios de una escultura de Jorge Oteiza. Como Aurea Gonzales, tambi¨¦n Roldan vive en L¡¯Hospitalet, cuyo centro de arte Tecla Sala se baraj¨® como opci¨®n descentralizada, quiz¨¢s m¨¢s coherente con un proyecto de estas caracter¨ªsticas, aunque finalmente se tuvo que conformar con acoger el programa de actividades paralelas.